Quién es Kendyl, la niña sorda que escuchó su voz por primera vez y conmovió las redes sociales

Los médicos no confiaban en que los audífonos pudieran ayudarla, pero con 8 años decidió dar pelea. ”Ella puede hacer cualquier cosa que se proponga”, la emoción de su madre en diálogo con Infobae

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"Cuando se escuchó a sí misma, me sentí abrumada de alegría por ella”, destacó", su madre

En épocas en que las redes sociales son cuestionadas con dureza por la cantidad de haters, que suelen destilar su odio con comentarios agresivos, aparecen historias que conmueven. Esas que salen a la luz tal vez para mostrar que con su ejemplo de superación pueden modificar la vida de otras personas, son las elegidas por gran cantidad de usuarios de las distintas plataformas. En este sentido, surgió la historia de vida de Kendyl, una niña de ocho años que nació sorda pero su vida dio un giro inesperado y, gracias a no bajar los brazos, logró escuchar su voz por primera vez y conmovió en las redes.

Kacy Brianne, una madre soltera con tres hijos oriunda de Colorado, Estados Unidos, fue el engranaje perfecto para lograr el sueño de su pequeña Kendyl, la hija del medio. La mujer publicó el video del momento exacto en el que la niña se colocó los audífonos que le permitieron conocer los sonidos y sorprenderse de su propia voz. Su cara de emoción e incredulidad llamaron la atención de las redes que, en pocos minutos, convirtieron lo que en principio iba a ser un video para la familia, en una publicación viral.

La pequeña Kendyl creció junto a sus hermanos Jude, de 11 años y Marlowe, de 6. Si bien nació sorda, Kacy explicó a Infobae que los médicos presionaron por un implante coclear pero esto fracasó debido a sus malformaciones en los oídos. “Me dijeron que lo más probable era que los audífonos no ayudaran y me recomendaron buscar un implante auditivo de tronco cerebral. Opté en contra de eso”, afirmó la madre de la niña.

Kendyl vive con Kacy, su madre y sus hermanos Jude y Marlowe
Kendyl vive con Kacy, su madre y sus hermanos Jude y Marlowe

Se trataba de una decisión difícil y la mujer quiso tomarse el tiempo necesario para meditar todas las opciones con su hija. “Elegí aprender su idioma, el lenguaje de señas americano, y cuando llegara el momento en el que ella eligiera un dispositivo de asistencia auditiva, la apoyaría por completo”, agregó Kacy.

Y su madre acompañó cada paso hasta que finalmente llegó la decisión de probar los audífonos y, cuando la mujer vio la reacción de su hija, no pudo evitar conmoverse. “Estaba tan feliz por ella. Decidió que quería probar audífonos y me preocupaba que no tuviera acceso al sonido que quería. Cuando se escuchó a sí misma, me sentí abrumada de alegría por ella”, destacó.

En el video viral se observa cuando Kacy golpea sus piernas y la niña sonríe mientras mueve la cabeza en señal de aprobación. Es tal su alegría que emite un sonido y se queda sorprendida al escuchar su voz. Mientras su familia la miraba y reía con ella, Kendyl continuaba haciendo diferentes sonidos y se deleitaba con la nueva experiencia.

Los médicos no confiaban en que los audífonos pudieran ayudarla pero la niña de 8 años no se dio por vencida
Los médicos no confiaban en que los audífonos pudieran ayudarla pero la niña de 8 años no se dio por vencida

A partir de ahora es probable que la vida de Kendyl ya no sea la misma. La pequeña guerrera le demostró a todos y en especial a ella misma, que cualquier sueño se puede cumplir. “Creo que su vida cambiará mucho. Ella es sorda y el lenguaje de señas americano siempre será su idioma principal y todos seguiremos aprendiendo más y más”, dijo Kacy.

La mujer explicó que los audífonos “pueden ser difíciles y suponen mucho trabajo para ella. Es casi un sonido robótico lo que obtiene y puede ser mucho para ella. Está aprendiendo y esencialmente reconfigurando su cerebro”, destacó.

Sin embargo, como lo hizo cuando era un bebé, otra vez, la decisión la dejará en manos de su hija, que ya demostró su tenacidad y fortaleza para lograr sus metas. “Definitivamente será un proceso, pero todo depende de ella sobre lo que quiere hacer. Si los odia, entonces podemos dejar de usarlos. Si ella los ama, entonces trabajaremos en escuchar y aprender a verbalizar inglés. Creo que el cielo es el límite para ella. ¡Ella puede hacer cualquier cosa que se proponga!”, concluyó Kacy con orgullo.

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