La cotización del dólar oficial en Venezuela alcanzó este jueves los 51 bolívares, agudizándose así la caída de la moneda local, que desde octubre sufrió bajas casi diarias.
Según el Banco Central, luego de que finalizaran “las operaciones de las mesas de cambio de las instituciones bancarias” de esta jornada, el tipo de cambio se ubicó en 51,3 bolívares por cada dólar estadounidense, aunque en el mercado paralelo la cifra fue aún mayor, de 64,7 bolívares por cada unidad extranjera.
El número difundido por el Banco Central expuso que, en lo que va de diciembre, el dólar ya subió un 7,7% respecto a los 47,60 bolívares que se necesitaban a principios de mes para obtener USD 1, por lo que el bolívar perdió un 7% de su valor, especialmente en el mercado venezolano en el que muchos bienes y servicios se cotizan en divisas.
De hecho, el rápido avance del dólar en el mercado financiero venezolano llevó a muchos comercios a optar por el cobro en euros durante el último trimestre de este año.
El chavismo, si bien minimiza la gravedad de estas cuestiones, aseguró en octubre que trabajaría por aplicar medidas que permitan alcanzar un equilibrio en el mercado de divisas, aunque no lo ha logrado hasta el momento.
Esta dolarización de facto, que lleva años en el país, hace que cualquier fluctuación de la moneda estadounidense tenga un impacto directo en la economía de los venezolanos y disminuya aún más su poder adquisitivo, en un contexto de salarios mínimos paupérrimos y pensiones prácticamente inservibles, de USD 2,5 mensuales.
Por ejemplo, un docente cobra un salario promedio de apenas 18,13 dólares por mes por lo que, para acceder a una canasta de alimentos, necesita 29,76 veces esta suma. En otras palabras, su sueldo cubre apenas el 3,4% de este paquete de insumos básicos.
A esto se suma, además, que la inflación en noviembre fue del 12,5% interanual, lo que supuso un aumento de 2,9 puntos porcentuales respecto a octubre, cuando se ubicó en 9,6 por ciento, según los datos difundidos por el Observatorio Venezolano de Finanzas. Asimismo, la inflación acumulada fue del 60% y la anualizada del 67 por ciento.
Con el registro de noviembre, advirtieron los expertos del OVF, Caracas volvió a una inflación de dos dígitos mensuales, algo que no se veía desde comienzos de 2023.
Otro dato que alertó a los miembros del Observatorio fue que el rubro que más sufrió estas subas fue el de la salud, con un 16 por ciento, mientras que el de alimentos se vio afectado en un 12 por ciento.
El opositor y dos veces candidato a la presidencia Henrique Capriles exigió al régimen tomar acciones concretas y urgentes para asistir al pueblo que, ante la falta de dinero, se ve impedido de alimentarse correctamente y de acceder a la asistencia médica que necesita.
Los trabajadores públicos y los pensionados “hacen malabares para sobrevivir”, comenzó diciendo antes de señalar que “lo único que no aumenta en Venezuela es el salario mínimo”. “Las pensiones son absurdas”, lamentó.
(Con información de EFE)