El opositor venezolano Pedro Urruchurtu, uno de los seis antichavistas refugiados en la residencia de la Embajada de Argentina en Caracas, denunció el miércoles un incremento del “asedio policial” por parte de las fuerzas de seguridad del régimen de Nicolás Maduro.
“Hoy se ha intensificado el asedio, con amenazas de ingreso y sobrevuelo de drones durante la tarde”, declaró Urruchurtu a través de sus redes sociales.
Desde el 23 de noviembre, la residencia estuvo rodeada por efectivos de seguridad del Estado. El miércoles, según Urruchurtu, hubo un “importante despliegue de agentes represivos” en las inmediaciones de la sede, lo que calificó como una violación al derecho internacional y al derecho de asilo.
El opositor afirmó que la residencia continúa sin suministro eléctrico y que los refugiados solo pudieron refrigerar alimentos gracias a una “pequeña planta eléctrica” que no alcanza para cubrir todas las necesidades del inmueble.
“Enfrentan escasez de agua potable, ya que las autoridades han bloqueado el ingreso de camiones cisterna”. También, señaló “restricciones y algunos incidentes” relacionados con el acceso a alimentos.
Urruchurtu, colaborador cercano de la líder opositora María Corina Machado, hizo un llamado a los Gobiernos de Argentina y Brasil, responsables de la protección de la embajada, para que intervengan ante lo que describió como una “terrible violación” al derecho de asilo y las normas internacionales.
Horas antes, María Corina Machado denunció que agentes de seguridad habían amenazado con un eventual ingreso a la residencia. Según Machado, durante la madrugada, “más de 20 funcionarios llegaron al lugar en cinco patrullas y vehículos civiles.”
Desde agosto, la embajada argentina permanece bajo la custodia de Brasil, luego de que los diplomáticos argentinos fueran expulsados por el régimen de Maduro. Sin embargo, en septiembre, el régimen venezolano revocó esta autorización, acusando a los asilados de planificar actos terroristas desde el interior de la sede.
La Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la principal coalición opositora, pidió la semana pasada a la comunidad internacional que exija el cese del “asedio criminal” contra los asilados y que se emitan salvoconductos para garantizar su salida segura del país.
“Es urgente que se proteja a estos compañeros perseguidos injustamente por el régimen”, declaró el organismo en un comunicado. Entre los refugiados en la residencia, además de Urruchurtu, se encuentran Magalli Meda, Omar González, Claudia Macero, Humberto Villalobos (todos miembros del partido opositor Vente Venezuela, liderado por Machado) y el ex ministro Fernando Martínez Mottola, asesor de la PUD.
Estados Unidos se sumó a las críticas contra el régimen de Maduro el miércoles, exigiendo la entrega de salvoconductos para los seis opositores.
“Es inaceptable el asedio y las violaciones a los derechos humanos que enfrenta la oposición venezolana”, declararon representantes estadounidenses, reiterando su apoyo a la causa democrática en el país sudamericano.
(Con información de EFE)