El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, calificó como “inaceptable y contrario al derecho internacional” el asedio que el régimen de Nicolás Maduro mantiene sobre la Embajada de Argentina en Caracas.
A través de un mensaje difundido en redes sociales, Almagro dijo que “es inaceptable y contrario al derecho internacional el acoso al que la dictadura en Venezuela somete a la Embajada de Argentina en Caracas. Debe cesar el hostigamiento de inmediato y se debe garantizar el derecho de asilo de los opositores a la dictadura”.
El asedio, que comenzó la noche del sábado, incluye el despliegue de agentes de seguridad del régimen en las inmediaciones de la sede diplomática, cortes de electricidad, bloqueos de calles y el uso de drones para interferir la señal móvil, según denunció el disidente Pedro Urruchurtu, asilado en la embajada.
Urruchurtu aseguró que las acciones intimidatorias han escalado desde el fin de semana, afectando a los seis opositores refugiados en el lugar bajo asilo político, a quienes se les ha negado un salvoconducto para abandonar el país.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina condenó los hechos y señaló que “el despliegue de efectivos armados, el cierre de calles alrededor de nuestra Embajada y otras maniobras constituyen una perturbación de la seguridad que debe garantizarse a las sedes diplomáticas de conformidad con el derecho internacional”.
Además, agradeció al gobierno de Brasil por custodiar la sede tras la expulsión del personal argentino y reiteró su llamado a la comunidad internacional para condenar las acciones del régimen de Maduro.
Por su parte, la oposición venezolana, encabezada por el comando de María Corina Machado, también repudió los actos de hostigamiento y exigió la emisión inmediata de salvoconductos para los opositores asilados.
“Esta acción repetida constituye una clara violación a los convenios internacionales en materia de asilo y diplomacia suscritos por el Estado venezolano”, señaló un comunicado difundido por la dirigencia opositora.
El último incidente de este estilo ocurrió en septiembre, cuando la situación escaló a nivel diplomático, tensándose incluso el vínculo con Brasil.
El gobierno de los Estados Unidos, por su parte, emitió una enérgica condena este domingo contra los nuevos actos de hostigamiento y asedio de las fuerzas del régimen de Nicolás Maduro contra la Embajada de Argentina en Caracas, donde opositores venezolanos se encuentran asilados bajo la protección diplomática de Brasil.
La administración estadounidense calificó estas acciones como una “grave violación del derecho internacional” al comprometer la inviolabilidad de las misiones diplomáticas y los derechos de quienes buscan asilo. En un comunicado oficial, Washington instó a la dictadura chavista a respetar sus obligaciones internacionales, detener las acciones intimidatorias y garantizar salvoconductos seguros para los asilados.
“Exigimos que se cese inmediatamente esta conducta contraria a las normas internacionales”, señaló el gobierno estadounidense, reafirmando además su compromiso con la defensa de los derechos humanos y el respeto al orden internacional.
Hasta el momento, las autoridades venezolanas no han emitido una respuesta oficial frente a estas acusaciones. La situación genera preocupación en la comunidad internacional, dada la importancia del respeto al derecho internacional en casos de asilo y protección diplomática.