El gobierno de los Estados Unidos emitió una enérgica condena este domingo contra los nuevos actos de hostigamiento y asedio de las fuerzas del régimen de Nicolás Maduro contra la Embajada de Argentina en Caracas, donde opositores venezolanos se encuentran asilados bajo la protección diplomática de Brasil.
La administración estadounidense calificó estas acciones como una “grave violación del derecho internacional” al comprometer la inviolabilidad de las misiones diplomáticas y los derechos de quienes buscan asilo. En un comunicado oficial, Washington instó a la dictadura chavista a respetar sus obligaciones internacionales, detener las acciones intimidatorias y garantizar salvoconductos seguros para los asilados.
“Exigimos que se cese inmediatamente esta conducta contraria a las normas internacionales”, señaló el gobierno estadounidense, reafirmando además su compromiso con la defensa de los derechos humanos y el respeto al orden internacional.
Hasta el momento, las autoridades venezolanas no han emitido una respuesta oficial frente a estas acusaciones. La situación genera preocupación en la comunidad internacional, dada la importancia del respeto al derecho internacional en casos de asilo y protección diplomática.
El disidente, Pedro Urruchurtu, denunció este domingo temprano que agentes que trabajan para la dictadura chavista continúan a las afueras de la sede diplomática, actualmente bajo la custodia de Brasil tras la expulsión del personal del recinto.
Urruchrtu había señalado la escalada de hostilidades de las fuerzas de Maduro desde el sábado en la noche, cuando grupos de encapuchados rodearon la sede diplomática y cortaron la electricidad.
El asedio continuó durante toda la noche del sábado y madrugada del domingo. A las 2 de la madrugada, Urruchurtu Noselli, del equipo de trabajo de María Corina Machado, confirmó que los agentes de seguridad del régimen, como parte de su asedio, cortaron el servicio eléctrico de la residencia.
Ante este panorama, el comando de campaña de la oposición mayoritaria de Venezuela pidió este domingo que se emitan, “cuanto antes”, salvoconductos para los seis antichavistas asilados en la residencia de la Embajada de Argentina en Caracas -custodiada por Brasil-.
A través de un comunicado, el comando denunció que la sede diplomática “permanece sin energía eléctrica y rodeada por vehículos del régimen que impiden el tránsito en el lugar”.
Asimismo, reportó un “bloqueo de las señales de comunicación para evitar que se denunciara la situación desde el sitio mientras se utilizaban drones para sobrevolar las áreas protegidas de la residencia”.
“Esta acción repetida constituye una clara violación a los convenios internacionales en materia de asilo y diplomacia suscritos por el Estado venezolano, así como un ataque a los derechos de los perseguidos políticos”, sostuvo.
Durante la tarde del sábado, Urruchurtu, asilado en la sede, había notificado que los agentes de la dictadura chavista también habían cortado los accesos en la calle, y sobrevolaron drones que “bloquean la señal móvil”, en un nuevo intento por intimidar a los seis opositores que, desde hace meses, están recluidos en el lugar bajo asilo político por la persecución del régimen de Nicolás Maduro y la negativa de concederles un salvoconducto que garantice su salida segura del país.
La Cancillería argentina también se pronunció al respecto y condenó las imágenes que llegan desde Caracas. “El despliegue de efectivos armados, el cierre de calles alrededor de nuestra Embajada y otras maniobras constituyen una perturbación de la seguridad que debe garantizarse a las sedes diplomáticas de conformidad con el derecho internacional, así como a quienes han solicitado asilo diplomático”, apuntó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Javier Milei, que aprovechó para instar a la comunidad internacional a condenar estas prácticas, agradecer a Brasil sus esfuerzos por proteger sus intereses en el país y reafirmar su compromiso con la “defensa de los derechos humanos, el respeto de las normas internacionales y la seguridad de quienes se encuentran en situación de asilo”.