En República Dominicana, un segundo avión vinculado al régimen de Nicolás Maduro está bajo vigilancia continua por parte de las autoridades locales, según una fuente citada por CNN. Esta información se conoce poco después de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos incautara un Dassault Falcon 900EX, también vinculado a Maduro y llevado a Florida tras ser capturado en la misma isla caribeña.
Hasta el momento, no se han revelado detalles específicos sobre el modelo o la marca del segundo avión vigilado, ni si se ha solicitado su inmovilización. Esta nueva situación subraya la intensificación de las medidas monitorización y control sobre activos vinculados al dictador venezolano y sus allegados.
El Dassault Falcon 900EX fue incautado debido a su asociación con el presidente venezolano y varias personas cercanas a él. Este avión fue interceptado en República Dominicana antes de ser trasladado a territorio estadounidense, marcando un importante episodio en la estrategia de Estados Unidos para presionar al régimen de Maduro.
La coordinación entre las autoridades dominicanas y estadounidenses parece formar parte de un esfuerzo más amplio para restringir el movimiento de activos que podrían estar relacionados con actividades ilícitas o que desafían sanciones internacionales. Este contexto sugiere una vigilancia estrecha y acciones concretas contra los bienes y recursos del régimen de Venezuela en jurisdicciones extranjeras.
Este tipo de acciones no solo subraya la cooperación internacional en la aplicación de sanciones, sino también la creciente presión sobre el círculo íntimo de Nicolás Maduro. Los vínculos con aviones privados y otros recursos de alto valor se convierten en puntos clave de control y posibles futuras incautaciones.
Por ahora, las autoridades dominicanas continúan con la vigilancia del segundo avión, a medida que nuevos detalles puedan surgir y esclarecer los aspectos operativos y legales relacionados con su estado y posible ulterior destino.
República Dominicana ha intensificado la vigilancia sobre el segundo avión relacionado con el régimen de Nicolás Maduro, indican diversas fuentes. Las autoridades locales han desplegado un seguimiento continuo de 24 horas sobre la aeronave, informó CNN, citando a una fuente con conocimiento directo de la situación.
“La fuente no especificó detalles sobre el modelo o la marca del avión o si se había solicitado la inmovilización de la aeronave,” añadió la misma fuente a CNN. Este desarrollo se suma a la reciente incautación de un Dassault Falcon 900EX, un avión también vinculado a Maduro y sus allegados por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos en Florida.
El vehículo en mención fue confiscado inicialmente en República Dominicana antes de ser trasladado a Estados Unidos para su fiscalización.
“La incautación se llevó a cabo bajo una operación coordinada de diversas agencias de seguridad,” informó el Departamento de Justicia. Según CNN, el procedimiento fue parte de una estrategia más amplia de presión sobre el régimen venezolano.
Por su parte, el Departamento de Justicia insertó en su comunicado: “Este avión representaba un medio logístico para la distribución de bienes y servicios de lujo destinados a la élite del régimen venezolano.” La retención y eventual traslado a Florida del avión Dassault Falcon 900EX refuerza las acciones internacionales contra lo que se percibe como corrupción y flagrante abuso de poder en Venezuela.
Una fuente con conocimiento de estos eventos agregó a CNN que aspectos específicos sobre la marca o modelo del segundo avión en vigilancia no fueron detallados.
“Las medidas adoptadas responden a la necesidad de prevenir el uso indebido de estos activos,” comentó el informante a CNN.
Este nuevo escenario sitúa aún más en el foco mundial a Nicolás Maduro y su círculo cercano, quienes en los últimos meses han enfrentado una creciente presión internacional. La confiscación y la vigilancia de estos activos reflejan la capacidad operativa de las agencias de seguridad para actuar contra infraestructuras críticas del régimen venezolano.
Para los expertos en geopolítica y seguridad, estas acciones representan un avance significativo. “Son medidas que fortalecen el cerco internacional contra prácticas ilícitas y corrupción estatal”, se destaca en el análisis de los movimientos recientes por parte de varios gobiernos en la región.
El seguimiento del segundo avión en República Dominicana, según especifica CNN, forma parte de una investigación más amplia que trata de identificar y neutralizar fuentes logísticas y financieras asociadas al régimen de Maduro. Las autoridades no han revelado si tienen intenciones de inmovilizar o confiscar la aeronave mientras continúan las investigaciones y procedimientos legales.
En resumen, la vigilancia global sobre los activos asociados al régimen venezolano se intensifica. Con la colaboración entre distintas agencias internacionales, se espera una mayor presión sobre los canales y recursos de quienes están vinculados con la dictadura de Nicolás Maduro.
Las recientes medidas y operativos reflejan una operación coordinada de vigilancia y acción directa contra prácticas ilegales que, según los investigadores, tienen graves repercusiones económicas y sociales para los venezolanos.