Gabriel Boric afirmó este sábado tras reunirse en La Moneda (sede del Ejecutivo) con su embajador en Venezuela, Jaime Gazmuri, recientemente expulsado por el Ejecutivo de ese país, que “mantenemos nuestra posición: no reconocemos el proclamado triunfo de Maduro y no validaremos ningún resultado que no esté verificado por organismos internacionales independientes”, según publicó en su cuenta de la red social X.
“Además hacemos un llamado a respetar íntegramente los derechos humanos de los manifestantes en Venezuela y terminar con las detenciones arbitrarias y la violencia”, agregó el mandatario chileno, al tiempo que calificó como “intempestiva e injustificada” la expulsión de la misión diplomática chilena del país caribeño.
Por su parte, esta mañana, el canciller chileno, Alberto van Klaveren, aseguró: “Respetamos mucho la figura de Edmundo González, creemos que es probable que haya ganado la elección, pero no lo podemos afirmar con certeza básicamente porque estamos hablando de un proceso electoral que no ha sido verificado”.
Este lunes Boric recibirá en Santiago al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien todavía no condenó el fraude en Venezuela. “Es más que natural que conversen sobre la región” y, en ese marco, sobre la situación generada tras las elecciones del pasado domingo en Venezuela, dijo en una rueda de prensa la secretaria para América Latina de la Cancillería brasileña, Gisela Padovan.
La diplomática aclaró que el borrador del comunicado bilateral que preparan los Gobiernos de Chile y Brasil como corolario de la visita no tiene ninguna mención a la crisis venezolana y se centra en la relación entre ambos países, que definió como una “amistad sin límites”.
Además de Chile, el régimen venezolano ordenó el retiro de sus embajadores en Argentina, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay y expulsó a sus misiones diplomáticas de su territorio.
Tras el cierre de la Embajada de Venezuela en Santiago y la “suspensión indefinida” de todos sus trámites consulares, decenas de ciudadanos venezolanos llevan días apostados frente al edificio para obtener información sobre su situación migratoria y otros asuntos.
El presidente Boric fue uno de los primeros líderes internacionales en exigir transparencia en el recuento de votos y en cuestionar los resultados otorgados la noche del domingo por el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano, que, en su momento, declaró ganador al dictador Nicolás Maduro, con el 51,2% de los votos y el 80% de la actas escrutadas.
Su principal opositor, el ex diplomático Edmundo González Urrutia, obtuvo el 44,2% de los sufragios, de acuerdo con el reporte público el lunes del CNE chavista, que no precisó a qué candidatos han ido a parar los 2.394.268 votos de los que no se informó.
Este viernes, el ente electoral ratificó que Nicolás Maduro fue reelegido en los comicios del domingo pasado con el 51,95% de los votos, frente al 43,18% del candidato de la oposición mayoritaria, Edmundo González Urrutia, con el 96,87 % de las actas escrutadas.
La oposición denunció irregularidades en el conteo y exigió la publicación de todas las actas, al igual que la mayoría de los países de la región, la ONU y el Centro Carter, que ofició de observador internacional.
(Con información de EFE)