La ONU confirmó este martes que enviará una misión de cuatro expertos electorales a los comicios del próximo 28 de julio en Venezuela, en los que Nicolás Maduro buscará una reelección, mientras que el principal candidato opositor, Edmundo González Urrutia, aspira a poner fin a los años de chavismo.
Desde la Secretaría General de Naciones Unidas precisaron que este panel viajará al país y, al término de su visita, elaborará un “informe independiente e interno” sobre el desarrollo del proceso electoral, que será presentado a su jefe, Antonio Guterres, con recomendaciones de “mejoras que se podrían realizar” en futuras citas electorales.
Sin embargo, a diferencia de las misiones de observación, que vigilan la celebración del acto democrático, ésta se limitará a las tareas antes mencionadas y “no emitirá ninguna declaración pública”; inclusive el informe será de carácter confidencial.
El pasado viernes, el Centro Carter también anunció la presencia de sus expertos en las elecciones, siguiendo a la invitación del Consejo Nacional Electoral. El grupo estará liderado por Jennie Lincoln, asesora principal para América Latina y el Caribe del organismo.
La misión llegará a Caracas el 29 de junio, es decir, casi un mes antes de la fecha establecida para la celebración de los comicios.
En su caso, no se realizará una evaluación integral de los procesos de votación, conteo y tabulación, dado su tamaño y alcance limitado, sino que serán tareas basadas en el marco legal nacional y las obligaciones y estándares regionales e internacionales de Derechos Humanos para elecciones democráticas.
Quienes no estarán presentes en el evento serán los expertos de la Unión Europea, cuya invitación fue anulada por el chavismo el pasado 28 de mayo. Así, una vez más el oficialismo venezolano incumplió los compromisos que asumió al firmar el Acuerdo de Barbados y condicionó un cambio de su postura al levantamiento total de las cerca de 50 sanciones sobre el país.
“Si no hay un levantamiento de las sanciones y el bloqueo contra el pueblo de Venezuela, contra los enfermos, contra los estudiantes, contra las personas de cierta edad, no hay absolutamente nada que conversar, ni pensar que puedan venir a Venezuela cuando desprecian a todos los venezolanos. Sería inmoral permitir su participación conociendo sus prácticas neocolonialistas e intervencionistas contra Venezuela”, dijo el presidente del CNE, Elvis Amoroso.
Estados Unidos -otro de los actores que mantiene sanciones sobre Caracas y que, tras participar en la mediación del Acuerdo accedió al cese de algunas de las medidas aunque debió reponerlas por el incumplimiento de Maduro- instó al chavismo a apegarse al orden democrático en los próximos comicios y cumplir con los estándares mínimos.
En ese sentido, el encargado para Latinoamérica del Departamento de Estado, Brian Nichols, recientemente manifestó su esperanza porque “el pueblo venezolano tenga la oportunidad de elegir a sus propios líderes” y que haya, a su vez, “elecciones competitivas”.
“Observaremos el proceso de cerca y esperamos que la presencia de observadores internacionales ayude a brindar mayores garantías”, sumó.
Por otro lado, desconfiado de las maniobras que aún puede implementar el oficialismo, la semana pasada González Urrutia se opuso a firmar el acuerdo propuesto por Maduro sobre el reconocimiento del resultado de los comicios, al que sí suscribieron ocho candidatos.
El aspirante de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) explicó que eso ya está contemplado en el Acuerdo de Barbados y, por tanto, no existe necesidad de firmar un nuevo documento sino que Maduro solo debe cumplir con el del pasado octubre.
(Con información de EFE)