El 90 % de las empresas de Venezuela reportó que los “excesivos tributos fiscales y/o parafiscales” son el factor que más impactó en la producción nacional durante el primer trimestre de 2024, según un informe publicado este miércoles por la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria).
El documento, elaborado a partir de una encuesta a 1.504 empresas, señala que en abril de 2024 se registró una recaudación tributaria no petrolera de 883 millones de dólares, más del doble que los 405 millones de dólares recaudados en el mismo mes del año pasado.
Este martes, Fedecámaras, la mayor patronal de Venezuela, advirtió que la ley de pensiones aprobada por el Parlamento el pasado 7 de mayo, que contempla una “contribución especial” del 9 % sobre el total de los pagos realizados a los trabajadores, agrega una “mayor presión fiscal a las empresas”.
Sin embargo, pese a la carga fiscal, el informe de Conindustria señala que el 57 % de las empresas encuestadas percibió una mejora en la situación económica del país durante el primer trimestre de 2024 respecto al mismo período de 2023, mientras que el 65 % considera que será “mejor” en los próximos 12 meses en comparación con la actual.
Para esta encuesta, de tipo probabilística, Conindustria estratificó a las empresas por grupo económico, tamaño y entidad federal, por lo que los grandes establecimientos agrupaban a más de 100 empleados, los medianos desde 21 a 100 trabajadores, mientras que pequeñas, entre 5 y 20.
“Capacidad económica agotada”
Las empresas privadas en Venezuela enfrentan, según organizaciones gremiales, una “alta carga fiscal” a la que ahora se suma una contribución mensual recientemente creada para mejorar las pensiones -equivalentes hoy a unos 3,5 dólares al mes-, que reciben más de cinco millones de adultos mayores.
El 8 de mayo, Nicolás Maduro promulgó la ‘Ley de Protección de las Pensiones’, que crea una “contribución especial” de hasta el 15 % del total de los pagos realizados “por concepto de salario y bonificaciones de carácter no salarial”, que debe ser “declarada y pagada mensualmente”, con el fin de “mitigar el impacto negativo” de las sanciones en los ingresos de los pensionados.
Para el abogado Juan Korody, presidente de la Asociación Venezolana de Derecho Tributario (AVDT), si bien el propósito de mejorar las pensiones es “loable”, el empresario privado tiene “prácticamente su capacidad económica agotada” a causa de la “excesiva carga fiscal” que -afirma- hay en el país.
El experto dijo a la agencia de noticias EFE que “la tributación en Venezuela se encuentra totalmente desarmonizada y llena de cargas materiales y formales”.
Explicó que las empresas destinan, en promedio, un 80 % de su utilidad en el pago de los tributos, lo que deja con poco margen para otros aspectos, como inversiones, adquisición de equipos, salarios y ganancias.
Por tanto, “no es el momento de un nuevo aporte fiscal”, sino de “armonizar” los tributos que “ya existen”.
Un nuevo “impuesto”
De acuerdo con la ley, el jefe de Estado “establecerá, anualmente, el porcentaje correspondiente de la contribución”, que para esta primera vez fijó en un 9 %, tres puntos más de lo sugerido por empresarios.
A juicio de Korody, la carga fiscal aumenta con este “impuesto”, lo que tiene un impacto -advirtió- en los precios de los productos que pagan los consumidores, así como en la capacidad de las empresas para incrementar los salarios o hacer nuevas contrataciones.
Conindustria, según dijo a EFE su primer vicepresidente, Francisco Acevedo, había pedido que el porcentaje no superara el 6 % y que se exonerase el pago para “los sectores prioritarios”.
Además, propuso un “tope máximo” equivalente hoy a 390 dólares para que “no se castiguen los esfuerzos de las empresas que mejor pagan”, que son, principalmente, las grandes, donde los salarios oscilan entre los 249 dólares (obrero y operador) y los 1.003 dólares (gerente), según Conindustria.
El diputado chavista Ramón Lobo, ex ministro de Economía, dijo que el nuevo aporte para las pensiones “es deducible del ISLR (Impuesto Sobre la Renta)”, por lo que podrá ser incluido “como gasto de la empresa al momento” de la declaración.
(Con información de EFE)