Tras el referéndum celebrado el pasado domingo sobre la disputa por el Esequibo, el régimen de Nicolás Maduro elevó al máximo la tensión con Guyana y volvió a arremeter contra la oposición venezolana al ordenar la captura de 13 dirigentes. Este jueves, 30 ex jefes de Estado y de Gobierno de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) repudiaron la nueva ola de persecución desatada por la dictadura chavista.
Los firmantes del documento indicaron que, ante la orden de aprehensión anunciada por el Ministerio Público chavista, en participar contra parte del equipo de trabajo de María Corina Machado, candidata para las elecciones presidenciales del próximo año tras arrasar en las primarias opositoras, hacen “un llamado de alerta a la comunidad internacional y a los gobiernos democráticos del mundo, al Secretario General de Naciones Unidas, al Consejo Permanente y la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) y a los garantes de los Acuerdos de Barbados (USA, Unión Europea, Canadá, Reino Unido), acerca de la criminalización de la disidencia democrática en Venezuela”.
“Pedimos, al efecto, que se adopten las medidas de urgencia que permitan contener el desbordamiento dictatorial en dicha nación y sus amenazas a la paz y la seguridad internacionales”, agrega el texto.
Los 30 firmantes son: Mario Abdo (Paraguay), Óscar Arias (Costa Rica), José María Aznar (España), Nicolás Ardito Barletta (Panamá), Felipe Calderón (México), Rafael Ángel Calderón (Costa Rica), Laura Chinchilla (Costa Rica), Alfredo Cristiani (El Salvador), Iván Duque (Colombia), Carlos Mesa (Bolivia), Ernesto Pérez Balladares (Panamá), José María Figueres (Costa Rica), Vicente Fox (México), Federico Franco (Paraguay), Eduardo Frei (Chile), Lucio Gutiérrez (Ecuador), Osvaldo Hurtado (Ecuador), Luis Alberto Lacalle Herrera (Uruguay), Mauricio Macri (Argentina), Jamil Mahuad (Ecuador), Lenin Moreno (Ecuador), Mireya Moscoso (Panamá), Andrés Pastrana (Colombia), Sebastián Piñera (Chile), Jorge Tuto Quiroga (Bolivia), Mariano Rajoy (España), Miguel Ángel Rodríguez (Costa Rica), Julio María Sanguinetti (Uruguay), Luis Guillermo Solís (Costa Rica), Álvaro Uribe Vélez (Colombia), y Juan Carlos Wasmosy (Paraguay).
La dictadura de Maduro ordenó este miércoles la detención de otros 13 dirigentes de la oposición venezolana.
El fiscal general del régimen, Tarek William Saab, expresó el presunto vínculo de “apátridas venezolanos” con la petrolera norteamericana Exxon Mobil. Según denunció, los funcionarios en cuestión habrían impulsado una campaña contra la consulta popular sobre el Esequibo.
Los funcionarios señalados por el chavismo son: Henry Alviarez, Claudia Macero y Pedro Urruchurtu, de Vente Venezuela (VV); el presidente de Súmate, Roberto Abdul; los dirigentes en el exilio Yon Goicoechea, Juan Guaidó, Julio Borges, David Smolansky, Carlos Vecchio, Lester Toledo y Leopoldo López; y los ex ministros chavistas Andrés Izarra y Rafael Ramírez.
La esposa de Roberto Abdul, miembro de la comisión que organizó las primarias en las que Machado fue elegida en octubre como candidata de la oposición para 2024, confirmó su detención por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), dijo en las redes sociales el abogado Alfredo Romero, director de la organización no gubernamental Foro Penal.
El fiscal general chavista dijo que Alviárez, Macero, Urruchurtu y Abdul realizaron “acciones desestabilizadoras y conspirativas” en contra del “desarrollo del Referéndum Consultivo por la Guayana Esequiba”.
Saab dijo que esas cuatro personas, todas con los mismos cargos, se aliaron con opositores venezolanos y ex simpatizantes del chavismo actualmente todos en el exterior, y usaron “financiamientos provenientes del lavado de activos de organizaciones internacionales y empresas extranjeras como la Exxon Mobil” para sus actividades, que no detalló.
Machado, quien ofrecía una rueda de prensa junto a Alviárez y otros colaboradores casi al mismo tiempo que el fiscal ofrecía su declaración, dijo al ser consultada sobre el anuncio de Saab que si las autoridades “creen que con esto van a crear miedo, descalabro, desmoralización o desmovilización, es todo lo contrario”.
En esa línea, la líder opositora dijo que el fracaso del referéndum fue en repudio al chavismo. “El régimen respondió amenazando y con una absurda sentencia diciendo que no era reconocida. Necesitaba distraer la atención y comenzó con algo muy peligroso, que es plantear un conflicto territorial”, expresó la candidata.