La delegación negociadora oficialista de Venezuela ratificó este jueves en un diálogo mantenido con la oposición que aquellos políticos antichavistas que se encuentren inhabilitados por la Justicia para ejercer cargos públicos de elección popular no podrán competir en las elecciones presidenciales de 2024.
Dos días atrás, las partes se habían reunido en Barbados para firmar un acuerdo sobre garantías electorales de cara a los comicios generales que se celebrarán en el país el año entrante, para las cuales la oposición tendrá este domingo su propia elección interna.
En este contexto, el jefe negociador chavista, Jorge Rodríguez, insistió en que una persona inhabilitada políticamente “no puede” ser candidata para estos comicios y enfatizó en que esto está establecido en el convenio suscrito, donde se acordó que se “promoverá la autorización a todos los candidatos presidenciales y partidos políticos, siempre que cumplan con los procedimientos en la ley venezolana”.
“Dice con mucha claridad ‘siempre que cumpla con la ley, siempre que cumpla con la Constitución”’, continuó Rodriguez.
A la par, el grupo rechazó “de manera categórica” las recientes declaraciones de Estados Unidos en las que mencionaron una posible reconsideración del levantamiento temporal de las sanciones sobre el país si la candidata opositora María Corina Machado -favorita de las encuestas- sigue inhabilitada.
Junto con el acuerdo por unas elecciones justas, Washington informó que aliviará algunas restricciones que mantiene sobre el petróleo y el gas con la nación centroamericana que entraría en vigencia dentro de seis meses. Sin embargo, esta ventana es tiempo suficiente para que la Casa Blanca cambie de parecer, en el caso de no notar un compromiso desde el Palacio de Miraflores con las causas democráticas que se pusieron sobre la mesa, “por el bienestar de los venezolanos”.
El secretario de Estado de la administración de Joe Biden, Antony Blinken, informó al régimen de Nicolás Maduro que dará tiempo hasta finales de noviembre para ver pasos concretos hacia la rehabilitación de los aspirantes a la presidencia que se encuentran inhabilitados, así como para la liberación de “todos los presos políticos” estadounidenses en Venezuela.
Por su parte, desde el Tesoro de Estados Unidos dijeron que están “preparados para modificar o revocar autorizaciones en cualquier momento, en caso de que los representantes de Maduro no cumplan con sus compromisos”.
Estas declaraciones son “inaceptables, falsas y mentirosas”, sentenciaron los negociadores, mientras que Rodríguez sumó que “Venezuela no acepta presiones ni chantajes ni injerencia de poder o de país alguno (...) No aceptamos, ni aceptaremos jamás ningún tipo de injerencia en los asuntos que solamente podemos resolver y resolveremos las venezolanas y los venezolanos”.
Por último, advirtió que si sostienen lo que ellos consideran una “mentira” y “las observaciones y opiniones alejadas de la realidad” revelarán “el tenor de las conversaciones que se han tenido”. Se está “intentando sembrar una matriz con el gran poder mediático y comunicacional que tiene” Estados Unidos para “subvertir la verdad”, concluyó.
En tanto, Machado cuestionó el acuerdo firmado esta semana y dijo que “no arroja certezas”.
“El texto que se dio a conocer del acuerdo no arroja certezas a los venezolanos al no precisar las acciones y plazos específicos que despejen la ruta hacia el 2024″, explicó.
A continuación, recordó a la población que, en el pasado, “el régimen de Maduro ha firmado acuerdos que viola reiteradamente” y “lo relevante ahora no es que se firme un nuevo documento sino que su cumplimiento estricto se extienda hasta todos aquellos aspectos que contempla la Constitución y que genuinamente benefician a los venezolanos”.
(Con información de EFE)