“Cuando termine de hablar Cristina”: ese era el momento, dijo Hugo Moyano, en el que comenzaría su acto en la Plaza de Mayo. La presidenta, contra la cual el secretario general de la CGT había llamado al paro, nunca pensó en permanecer en la casa de gobierno mientras su ex aliado la acusaba de quedarse con el dinero de los trabajadores con el impuesto a las ganancias. Gente que cobraba $5.782 tenía que tributar ($7.998 casados con dos hijos). El salario mínimo era de $2.670 y el del máximo cargo del país, de $69.587.
Así que en lugar de quedarse en Buenos Aires, Cristina Kirchner había viajado a San Luis, donde poco antes de las 15, cuando se estimaba que hablaría Moyano, reflexionó, durante la inauguración de un centro de cría de cerdos de última tecnología: “Este es el siglo de los países que puedan proveer más y mejores alimentos, más y mejor energía, más y mejor conocimiento”.
Siguió: “El eje de todo gobierno, y yo creo que el eje de la vida cotidiana de cada persona, es nunca bajar los brazos, nunca darse por vencido, siempre seguir adelante con las convicciones, sabiendo que no todos pensamos igual”. Moyano escuchaba y esperaba. Kirchner subrayó: “No todos pensamos igual, pero esto no es River-Boca. Necesitamos que gane la Argentina”.
Al cabo de 15 minutos, terminó su discurso, saludó y se dirigió al automóvil que la llevaría a la capital de San Luis. En ese momento, Moyano empezó el acto.
El paro fue flojo —hubo transporte público— pero unos 40 gremios adhirieron, además de los que apoyaron pero no marcharon. Aun así, 50.000 personas escucharon al secretario general de la CGT, que dijo: “Vinimos a defender los derechos de los trabajadores. Esta es una protesta que fortalece la democracia. No somos destituyentes”, remarcó el líder sindical. Le pidió al gobierno que dejase “esa soberbia abrumadora para comprender la realidad”.
El único orador de la tarde se quejó del estilo oficialista, “la forma de imposición, de hacer todo como si fuera una dictadura, sin consultar a nadie”. En una pulseada por el copyright del peronismo, no podía faltar el santoral: “Hay algunos que piensan que pueden sustituir a Perón y Eva Perón”, dijo, “y eso es lo máximo de la locura”.
Cuando faltaban poco más de dos semanas para las elecciones en la CGT, Moyano confirmó que buscaría un nuevo mandato y criticó al metalúrgico Antonio Caló, el nombre que parecía unificar a la oposición. “Leí por ahí que los dirigentes de la UIA prefieren a Caló. ¿Saben cómo les dicen a los delegados que llegan con el respaldo de la patronal? Gerengado. Y Caló va a ser un gerengado más”, ironizó.
También molesta con la presidenta, la jueza federal de Comodoro Rivadavia, Eva Parcio, se declaró incompetente en la causa que seguía la toma del yacimiento Cerro Dragón por unos 400 trabajadores. Dado que el ingreso al sitio había sido violento y con destrozos —”Se nos fue la mano”, dijo uno de los participantes; “hubo un grupo de infiltrados”, denunció otro— Parcio había pedido que la Gendarmería enviara personal.
Esa era la política oficial. Pero nueve gendarmes murieron en el accidente una vez que la toma se solucionó. Kirchner había dicho que ya no se podría disponer más de esa fuerza en las provincias, y se había referido a la jueza. Parcio argumentó que, según la presidenta, el caso debía estar en manos de la justicia local.
Un poco más al norte, en La Pampa, el femicida Marcelo Tomaselli fue sentenciado a prisión perpetua. El caso del que fue víctima Carla Figueroa, de 22 años y madre de un niño, había hecho que el Congreso revocara la figura del avenimiento del Código Penal, por al cual un violador o abusador sexual podía evitar la cárcel si era disculpado por la persona atacada. Figueroa había sido violada por Tomaselli, quien estuvo detenido ocho meses hasta que obtuvo su perdón y se casó con ella; un mes y medio más tarde, él la mató de 15 puñaladas.
Argumentó que no recordaba los hechos, por el shock, pero se demostró que en realidad había estado tranquilo: ”Ya está, ya está”, lo escuchó canturrear su madre, “mi corazón está aliviado”. El fallo destacó: “Son frases claramente reveladoras de alguien que anidaba la idea de matar en su mente”.
La inclusión de la fertilización asistida en el plan médico obligatorio que deben cubrir las obras sociales y las prepagas estaba más cerca de convertirse en un hecho: la Cámara de Diputados aprobó el proyecto, que pasó al Senado.
Boca empató 1 a 1 con Corinthians en la primera parte de la final de la copa Libertadores, y la revancha lo decidiría todo en San Pablo días más tarde. La Eurocopa 2012 se le escapaba a Portugal, que aun con Cristiano Ronaldo perdió por penales contra España.
Por primera vez en más de 40 años, el príncipe Charles se acomodó en la Royal Box de Wimbledon con su esposa, Camilla Parker-Bowles. No se quería perder a Roger Federer, quien le ganó fácilmente a Fabio Fognini y avanzó en un grand slam que se rendiría ante su juego.
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