Aquel martes el conflicto entre Hugo Moyano y el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner perdió la poca sutileza que le quedaba. Por la mañana el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, dictó la conciliación obligatoria por 15 días en el conflicto entre la Federación de Camioneros y los empresarios por el aumento salarial. Pero el sindicato de Moyano lo ignoró y extendió el paro del transporte de combustible a las 18 provincias del país que lo procesaban. Duraría 72 horas.
El vicepresidente Amado Boudou, a cargo del ejecutivo mientras Kirchner estaba en el G20, dijo que se podría aplicar la Ley de Abastecimiento. Hugo Moyano le respondió de pasada en un acto en la CGT: “Este señor no aplicó la ley de abastecimiento cuando se les dio el aumento del ciento por ciento a los legisladores y sale ahora a amenazar ante un reclamo salarial justo”. Tomada no mereció un comentario, ni siquiera un “este señor”, cuando advirtió que los camioneros enfrentaban “severas sanciones económicas” y hasta la pérdida de la personería.
En cambio, la noche anterior, en una charla en la Pastoral Universitaria, había tenido expresiones amables para Mauricio Macri, el jefe de la oposición, y Daniel Scioli, el gobernador de la provincia de Buenos Aires que nunca consiguió la confianza del kirchnerismo. La demostración más reciente había sucedido cuando, apenas dejó su despacho por un viaje, su vice, Gabriel Mariotto, lo criticó públicamente.
“Tengo buena relación con el gobierno de la Ciudad”, dijo Moyano. “Tiene dificultades por la mala relación con el gobierno nacional, pero está tratando de sobrevivir, como otros. Con nosotros se firmó un convenio histórico por la recolección de residuos”. Cuando le preguntaron por Scioli, comentó: “Las dificultades que tiene son su vicegobernador y el problema económico. No compartimos que se aguante todo”.
En pocas horas las estaciones de servicio de todo el país comenzaron a limitar la cantidad de nafta que vendían. Días atrás había faltado dinero en los cajeros automáticos, porque se había frenado el transporte de caudales, y luego se afectaron los supermercados y el correo.
La AFIP, que poco antes había eliminado de su sitio la opción de pedir autorización para comprar dólares con fines de ahorro, volvió a cambiar su página. Ahora se veía, junto con los motivos oficiales de turismo y adquisición de inmuebles, vehículos o maquinaria, un enlace a “otros destinos”, donde se desplegaba un menú cuyo último enlace era “otros no especificados”. Un espacio para completar permitía pedir dólares para ahorro. Al enviarlo, se recibía el mensaje “Solicitud en análisis”.
¿Cuánto tiempo podía durar el análisis del pedido para comprar dólares al precio oficial, $4,51, en lugar de los $5,94 que valía cada blue en una cueva? No existía un plazo establecido. Y como el análisis no equivalía a rechazo, había que esperar en lugar de presentar un recurso de amparo ante la justicia.
La compañía que gestiona el mercado nacional de electricidad, Cammesa, esperaba el pago de $31 millones de Edesur, por energía adeudada. Pero la empresa distribuidora prefirió hacer público que no podía pagarlo porque el gobierno de la ciudad de Buenos Aires le debía, justamente, esa cifra.
Cuando se quitaron subsidios a los edificios públicos (administración comunal, hospitales, escuelas), la cuenta de la luz de Macri aumentó un 267%, y el alcalde había recurrido a la justicia. Mientras esperaba la decisión de los tribunales, Macri había pedido más recursos a la Legislatura, que no había tratado el tema aún. Pero el asunto no le interesaba tanto como el procesamiento de su asesor de comunicación, Jaime Durán Barba, que aquel martes 19 dictó la jueza federal María Servini de Cubría.
El motivo era la violación del artículo 140 del Código Electoral: “Se impondrá prisión de dos meses a dos años al que con engaños indujere a otro a sufragar en determinada forma o a abstenerse de hacerlo”. En los medios se traducía como campaña sucia contra Daniel Filmus cuando competía con Macri por el gobierno de CABA. Filmus había denunciado que una encuesta telefónica de la campaña de PRO lo vinculaba engañosamente con Sergio Schoklender, el apoderado de las Madres de Plaza de Mayo investigado por fraude en la causa de Sueños Compartidos.
Dos de las preguntas de la encuesta eran “Si se comprueba que el padre de Daniel Filmus es arquitecto en la empresa de Sergio Schoklender, ¿usted cree que esto va a afectar negativamente su candidatura?” y “¿Cree que los escándalos que tocan a Filmus, como el de las Madres, afectan su credibilidad?”.
Servini procesó a Durán Barba y sus socios, Rodrigo Lugones, director ejecutivo de Durán Barba y Asociados, y Guillermo Garat, su socio y propietario de los call centers investigados por influir en el voto para perjudicar al kirchnerismo en la campaña 2011. La defensa argumentó que la causa estaba armada. Durán Barba explicó por qué las campañas sucias eran contraproducentes.
Sin que se dijera la palabra “reelección”, Hugo Yasky lanzó el Movimiento hacia una Nueva Constitución Emancipadora en un acto que organizó junto con Luis D’Elía. Una “nueva Constitución” para un “nuevo Estado” era el objetivo de la agrupación política: “La Constitución existe para que las mayorías puedan avanzar en sus conquistas”. No asistieron, aunque se los esperaba, Martín Sabatella y Emilio Pérsico; en cambio estuvieron Ricardo Forster y Adriana Puiggrós.
En el mismo momento la presidenta, que se disponía a firmar la declaración de cierre del G20, centrada en la crisis europea y la incertidumbre global, se cruzaba con el primer ministro británico, David Cameron, en el hotel de Los Cabos donde estaban los jefes de estado que controlaban casi todo el PBI del mundo. El encuentro fue breve pero nada emotivo. Cameron dijo que Argentina debía aceptar el referéndum que los malvinenses harían en un año, y terminaría por confirmar su pertenencia al Reino Unido. Kirchner intentó entregarle un sobre con las resoluciones de la ONU que el Foreign Office había ignorado porque no quería dialogar sobre las islas.
Poco antes de que se cumpliera, el 26 de junio, el décimo aniversario del asesinato de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán, los policías Alfredo Fanchiotti y Alejandro Acosta, condenados a prisión perpetua como responsables, pasaron a cárceles de régimen abierto por decisión de segunda instancia, ya que el tribunal de origen había rechazado su petición. Tanto la Unidad Penal N° 11 de Baradero como la Unidad Penal N° 12 de Gorina, donde quedaron respectivamente Fanchiotti y Acosta, son lugares para detenidos con buena conducta que transitan el final de su condena y buscan la reinserción social. Muchos internos realizan salidas transitorias.
Años antes se había denunciado que Fanchiotti salía de la cárcel de Olmos sin permiso judicial, acompañado por un funcionario del penal, y en abril de 2022 los dos policías iniciaron un pedido de libertad condicional. Aquel martes de junio la abogada de la familia Santillán, Claudia Ferrero, protestó: “Están dando libertad anticipada al asesino de Puente Pueyrredón”.
En Gran Bretaña Julian Assange comenzaba una estadía que se extendería por casi siete años en la embajada de Ecuador en Londres. El fundador de WikiLeaks iba a ser extraditado al día siguiente a Suecia, luego de que el Tribunal Supremo británico le negara la reapertura de su caso en el Reino Unido. Desde 2010 Assange estaba en arresto domiciliario acusado de violación y acoso a dos mujeres en 2010, aunque él insistió en que tuvo relaciones consentidas con ellas.
“La persecución de la que soy objeto en distintos países deriva no sólo de mis ideas y mis acciones, sino de mi trabajo al publicar información que compromete a los poderosos”, escribió Assange en la carta de solicitud al presidente Rafael Correa, que entregó en la embajada, donde quedó bajo protección. “Amenazas de muerte, boicot económico y la posibilidad de ser entregado a las autoridades de Estados Unidos hacen que busque en territorio ecuatoriano el asilo político que me permita continuar con mi misión en un territorio de paz”.
La DAIA, que reúne a las organizaciones sociales de la comunidad judía en Argentina, repudió la visita de Mahmoud Ahmadinejad a Bolivia, donde se encontró con el presidente Evo Morales, y a Brasil, para participar en la cumbre ambiental Río+20. “Un tirano y negador del Holocausto que preside un país implicado en la comisión de atentados terroristas nunca debe ser bienvenido, en ninguna parte”, decía el comunicado que instaba “a las naciones libres a hacer otro tanto”.
Bolivia sólo tenía relaciones con Irán desde seis años antes y había pasado un mal momento el año anterior, cuando recibió al ministro de Defensa, Ahmad Vahidi, quien tenía pedido de captura internacional por la voladura de la AMIA y hoy es ministro del Interior de su país. Las relaciones con Argentina se habían resentido y Bolivia prefirió pausar sus vinculos con Irán. La reunión de Morales y Ahmadinejad intentaba recomenzar los lazos.
El Comité de Seguridad en el Fútbol intervino en el caso del asesinato de Gonzalo Saucedo, un hincha apuñalado poco antes: clausuró un sector del estadio del club, la tribuna Sívori Alta, que suelen ocupar los barrabravas. Desde allí esperaban ver ganar a su equipo el sábado siguiente, cuando se jugaba el ascenso a la Primera A en elpartido con Almirante Brown. El comité fue criticado por los medios, que consideraron escasa la medida, pero más comentarios negativos recibió Omar Solassi, vicepresidente segundo del club, quien sugirió que los Borrachos del Tablón se ubicaran en otro lugar.
En la A terminaba también el torneo Clausura, y el domingo podía pasar algo extraño: Tigre, puntero con Arsenal con 35 puntos, podía ganarlo por primera vez en su historia y a la vez descender a la B. Su misión sería triunfar sobre Independiente pero, según el resultado de otros equipos, podía caer o no en la zona de promoción, donde se jugaría su caída de la A.
Inglaterra y Francia pasaban a los cuartos de final en la Eurocopa al ganarle a Ucrania y Suecia y en los Estados Unidos, en el penúltimo partido del campeonato de la NBA, LeBron James fue clave para que los Heat de Miami derrotaran a Oklahoma, pero quedó lesionado en la pierna izquierda. ¿Podría jugar la final?
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