El curioso caso de Canadá, el país que permanece cerrado a los viajeros

Hay varias razones por las que el país de América del Norte endureció las restricciones al turismo y cerró sus fronteras en el marco del manejo de la pandemia. Los detalles

Las fronteras de Canadá permanecen cerradas para los viajeros. Los motivos (Foto: REUTERS/Carlos Osorio/File Photo)

Los viajes por turismo están comenzando a reactivarse en todo el mundo. Incluso cuando diferentes países alrededor del globo comienzan a recibir a los turistas con los brazos abiertos, una nación mantiene su puerta firmemente cerrada: Canadá.

Desde marzo de 2020, Canadá, que en estos días atraviesa una histórica ola de calor con temperaturas que superan los 49 grados, ha mantenido su frontera hermética.

Tanto los líderes de esta nación como de los Estados Unidos han extendido la prohibición de viajar no esencial casi mensualmente desde el inicio de la pandemia de COVID-19. Y, aunque algunos pensaron que la prohibición podría suavizarse este mes, los dos países acordaron extenderla nuevamente hasta al menos el 21 de julio de 2021.

Canadá, que en estos días atraviesa una histórica ola de calor con temperaturas que superan los 49 grados, ha mantenido su frontera cerrada desde el comienzo de la pandemia (Foto: REUTERS/Lars Hagberg/Archivo)

Hay varias razones por las que Canadá endureció las restricciones a los viajes y por las que el país aún no ha reabierto las rutas turísticas con la forma en que manejó la pandemia. Su política durante la pandemia ha sido la de actuar con cautela, incluso si otras naciones claman por reabrir.

Entonces, mientras que varios otros países flexibilizaron las restricciones de viaje en la primera mitad de 2021, Canadá solo las ha endurecido, varias veces.

Por ejemplo, todos los viajeros de 5 años o más deben presentar un resultado negativo de la prueba COVID-19 antes de abordar cualquier vuelo que ingrese a Canadá desde otro país, medida que entró en vigencia a principios de enero. Luego, en febrero, el primer ministro Justin Trudeau extendió el requisito de prueba a las llegadas fronterizas terrestres.

Canadá también extendió su prohibición a los cruceros, prohibiendo los buques que transporten a 100 o más personas, cerrando efectivamente la industria en el país hasta 2022.

Todos los viajeros de 5 años o más deben presentar un resultado negativo de la prueba COVID-19 antes de abordar cualquier vuelo que ingrese a Canadá desde otro país (Foto: REUTERS/Lars Hagberg/File Photo)

Los viajeros a Canadá también deben realizar una prueba a su llegada y pagar la cuarentena en un hotel aprobado por el gobierno mientras esperan el resultado de la prueba diagnóstica. Si la prueba es negativa, los viajeros pueden terminar su cuarentena obligatoria de 14 días en casa, pero aquellos que den positivo deben ponerse en cuarentena en las instalaciones gubernamentales designadas.

En este momento, solo los ciudadanos canadienses, los residentes permanentes, las personas registradas en virtud de la Ley India de Canadá, las personas protegidas, los ciudadanos extranjeros seleccionados que viajan por razones esenciales y los familiares directos de ciudadanos o residentes canadienses pueden ingresar a Canadá. Pero si no entra en una de esas categorías, eso significa que el turismo está prácticamente fuera de los límites.

Canadá padeció por un momento un programa de vacunación retrasada muy público, y aunque esas demoras parecen estar mejorando, sólo el 27% de los canadienses están completamente vacunados contra el coronavirus. Según datos de la Universidad Johns Hopkins, el país ha registrado más de 1,42 millones de casos positivos y más de 26.273 muertes.

El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, recibe la segunda dosis de la vacuna de Moderna en Ottawa, Ontario, Canada (Foto: REUTERS/Blair Gable)

Pero con la agilización de la vacunación en el país y la disminución de los casos positivos, y con varios países grandes que se están abriendo al turismo, algunos piensan que es hora de que Canadá relaje su política. ¿El motivo? A pesar de las diferentes variantes de preocupación como Delta, Gamma, Beta y Alpha, diferentes partes del mundo están reabriendo a los viajeros.

Muchos países cercanos a los EE. UU. ya sea geográfica o diplomáticamente, han reabierto a los turistas de todo el globo justo a tiempo para un boom de viajes de verano en el Hemisferio Norte. Pero Canadá no es uno de esos destinos.

La industria de viajes local ha clamado por corredores de viajes que creen que ayudarían al sector a recuperarse de las pérdidas relacionadas con la pandemia. La Unión Europea, por ejemplo, agregó a Estados Unidos a su llamada “lista blanca” de viajes, que permitiría a los visitantes vacunados saltarse los requisitos de cuarentena y moverse libremente entre las 27 naciones de la UE. Sin embargo, todavía no es un verdadero corredor de viajes, ya que la UE todavía está buscando que EE. UU. relaje sus restricciones de viaje para los visitantes de la UE.

Los países especialmente dependientes del turismo, como México, que ganó $25 mil millones en turismo en 2019, nunca cerraron sus puertas en absoluto.

Muchos países cercanos a los EE. UU. ya sea geográfica o diplomáticamente, han reabierto a los turistas de todo el globo justo a tiempo para un boom de viajes de verano en el Hemisferio Norte (Foto: EFE/EPA/MICHAEL REYNOLDS/Archivo)

¿Qué consecuencias podría tener este blindaje de fronteras? Solo hubo 150.000 viajes a Canadá de no canadienses en abril, un 6% menos que en marzo. Pero a pesar de que la gente no llega al país del Norte en oleadas, los canadienses están viajando al extranjero, incluso si tienen que ponerse en cuarentena cuando regresan. Los viajes al extranjero de residentes canadienses aumentaron casi un 19% en abril.

Aún así, la prohibición de viajar ha afectado ostensiblemente a la industria de viajes de Canadá, lo que ha ejercido presión sobre los gobiernos de Canadá y Estados Unidos. Sin embargo, parecen estar frustrados con lo que ven como una falta de progreso.

Air Canada, la aerolínea nacional de Canadá, pidió el mes pasado “claridad” y dijo que el gobierno necesitaba “actuar más rápido”. Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Canadá, Perrin Beatty, dijo a Bloomberg que “no tenía idea” de lo que haría el gobierno después de que expire la prohibición de viajar actual. Los líderes empresariales también están pidiendo un plan de reapertura.

Estas son palabras contundentes de algunos de los jugadores más poderosos de Canadá. Pero a juzgar por lo que los líderes de Canadá han dicho públicamente, no parece que haya mucha prisa por revertir la prohibición, al menos en este momento.

Las fronteras de Canadá, cerradas (Foto: REUTERS/Brendan McDermid/File Photo)

“Muchos países, como Canadá, continúan diciendo que ahora no es el momento de viajar”, manifestó el primer ministro Trudeau a principios de este mes. El mandatario también agregó que Canadá “trabajaría en estrecha colaboración” con los EE. UU. pero que la seguridad pública permanecería a la vanguardia.

Nuestra prioridad número uno mientras luchamos contra el COVID-19 es mantener seguros a los canadienses”, dijo el ministro de seguridad pública y preparación para emergencias de Canadá, Bill Blair, en un tuit a mediados de junio.

No sólo Canadá se vio afectado, ya que la Asociación de Viajes de EE. UU. precisó que Norteamérica pierde $1,5 mil millones cada mes que la frontera permanece cerrada entre los dos países. El turismo generó $105 mil millones y sostuvo uno de cada 10 empleos canadienses, según un informe .

Entonces, si bien la extensión de la prohibición no es una sorpresa total, ciertamente es frustrante para los proveedores de viajes en ambos lados de la frontera que desean volver a algo parecido a la normalidad.

SEGUIR LEYENDO: