Condiciones climáticas hostiles, ubicación extremadamente remota o experimentos sociales son algunos de los factores que llevan a que una ciudad se proponga ofrecer una alternativa a extranjeros o nacionales a mudarse allí. En este caso, un pequeño pueblo suizo de 248 habitantes llamado Albinen realizó una importante oferta económica para aquellas personas que estén dispuestas a vivir durante diez años en el pueblo para que no desaparezca completamente.
La oferta es de 53 mil euros y está dirigida a aquellas personas que decidan comenzar una nueva vida en el pueblo de Albinen. Incluso, para aquellos que tengan hijos el precio aumenta notablemente, ya que son 7.600 euros extra por cada miembro de la familia con tal de que la pequeña villa de Albinen no desaparezca por completo.
Al sur del país, rodeado de montañas, el pueblo tiene para ofrecer una tranquilidad inigualable, ya que se encuentra lejos de las grandes ciudades de Suiza, dejando únicamente espacios para grandes bosques, zonas ganaderas y agrícolas y paisajes únicos.
¿Qué requisitos piden cumplir a cambio de 53 mil euros?
Para acceder a esta oportunidad hay ciertas condiciones impuestas por una asamblea del pueblo que decidió aceptar esta medida. La primera de ellas es que la persona debe ser menor de 45 años y construir o adquirir un hogar en el que tendrá que vivir 10 años como mínimo. La casa no puede ser utilizada para vacacionar; si esto ocurre, se procederá a confiscar la totalidad del dinero.
El objetivo de los habitantes es que la aldea se expanda rápidamente. Por eso, es importante que cuantas más personas estén dispuestas a vivir durante una década, será mejor para el poblado.
Además de tener los papeles en regla, los solicitantes deberán demostrar que van a hacer una inversión en el pueblo de al menos 200.000 francos suizos (170.000 euros). Para ello, deben disponer en el momento de la solicitud de una autorización para la construcción de una vivienda o un contrato de compra de vivienda debidamente documentada. También tendrán que aportar la documentación que pruebe que un banco les concedió el préstamo necesario para la inversión en Albinen.
Para fomentar la economía local y regional, los nuevos residentes tienen que otorgar por su parte el 70% de los contratos de construcción o renovación a empresas del cantón de Valais y los extranjeros necesitan un permiso de residencia.
Las autoridades de Albinen supieron reconocer que debido a sus propias condiciones solo podrán atraer, en un plazo de cinco años, en el mejor de los casos a entre 5 y 10 familias jóvenes. Aun así consideran que eso "ya se podría valorar como un éxito", según dijeron en un comunicado.
Según datos del ayuntamiento, en 1941 Albinen contaba con 376 habitantes, cifra que se fue reduciendo continuamente hasta contar en 2015 con 253 ciudadanos. En los últimos años, la localidad perdió a tres familias y solo quedan dos niños que van a al colegio y cinco que van al colegio secundario, según la agencia suiza ATS.
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