La Rioja, Jujuy y San Juan: paseos bajo la luna y delicias de la gastronomía regional

La inmensa diversidad de paisajes y de atractivos turísticos naturales posiciona a Argentina como un destino único en el mundo. Las regiones del noroeste y del Cuyo argentino son, sin dudas, sitios encantados. Cuáles son las experiencias más fascinantes e imperdibles

Argentina cuenta con una herencia cultural única e incomparable, en la que la historia se mezcla con las tradiciones y costumbres de pueblos originarios. En sus diferentes regiones se permite recorrer y conocer en detalle cada uno de los aspectos que lo convierten en fascinante, para vivir una experiencia inolvidable que invita a formar parte del país, el entorno y la cultura.

Un buen vino y comidas típicas como empanadas y locro se combinan con paisajes lunares. Del mismo modo, en el marco de maravillosos paisajes, las regiones del NOA y Cuyo invitan a conocer un poco más sobre sus tierras y costumbres.

Valle de La Luna, San Juan

Su extraño paisaje, la escasez de vegetación, la más variada gama de colores de sus suelos y las formas únicas de los montes convierten al parque en un lugar predilecto para turistas, tanto nacionales como extranjeros (Getty Images)

Célebre a nivel científico, ya que resguarda una importante reserva paleontológica, este fascinante y extraño lugar del mundo ocupa unas 62 mil hectáreas y fue, junto a su vecino Talampaya, en la La Rioja, declarado Patrimonio de la Humanidad.

Por la noche se pueden contemplar las increíbles formas y sombras por el reflejo de la luna, acompañadas por la gran historia que alberga el lugar. En noches de luna llena, la oscuridad sanjuanina vuelve a Ischigualasto aún más enigmático y deslumbrante. El circuito bajo la luna llena se presenta como una experiencia que despierta profundas sensaciones.

El recorrido dura unas dos horas y se realiza teniendo en cuenta el cambio de fase lunar, incluyendo dos días previos y un día posterior a la luna llena. "Miles de turistas llegan desde distintas partes del mundo y quedan impactados por la postal que despierta en ellos la posibilidad de sentirse inmersos en un verdadero paisaje lunar", explicaron a Infobae desde el Ministerio de Turismo San Juan.

(Parque Natural Ischigualasto)

Durante los paseos se realizan paradas para tomar las infaltables fotografías en las estaciones: El Gusano, Valle Pintado, Cancha de Bochas, El Submarino y El Hongo, donde las piedras presentan extrañas y misteriosas formas. En su base se encuentra instalado un centro de interpretación o museo con un recorrido acerca de los procesos y particularidades de un fósil.

Dentro del parque se sitúa el cerro Morado, antigua chimenea de un volcán extinto, a la que se puede ascender en una hora aproximadamente contratando a un guía en la base del parque, para obtener una vista privilegiada.

Según la agencia de viajes en línea Despegar, también se ofrecen salidas diarias a partir de las 7:00 hs con regreso a las 20:30 hs aproximadamente. Se llega al Parque Ischigualasto o Valle de la Luna por la nueva Ruta Turística Nacional 150. "Se ingresa en nuestras unidades con un total de recorrido estimado de cuatro horas".

Sus principales geoformas serán las protagonistas de estas excursiones (Getty Images)

Por la noche es cuando la vivencia cobra un tinte atrapante y el ambiente natural se transforma en íntimo: el silencio, la luz lunar y una postal inigualable.

“En este marco, muchos de los visitantes se atreven a poner en práctica técnicas de meditación, que los conecta con la energía natural que se respira”.

La Ruta 150, ubicada en el norte de San Juan, se convirtió en un nuevo atractivo turístico que permite recorrer además del Parque Ischigualasto otros circuitos emblemáticos de la zona como los valles sanjuaninos y característicos pueblos y cerros, como El Mirador, de gran riqueza natural.

Parque Nacional Talampaya, La Rioja

En el centro-oeste de La Rioja, un desierto rojo de paredones que se imponen horizonte (Getty Images)

La excelente gastronomía, los vinos, los maravillosos paisajes, la belleza de sus artesanías y la calidez de su gente hacen que éste sea uno de los destinos no tradicionales más requeridos. Tal vez lo más conocido del Departamento Felipe Varela, la imponente reserva natural fue declarada como Monumento de la Humanidad por la UNESCO.

El trekking, los circuitos a caballo, bicicleta, cuatriciclo o en vehículos todo terreno, el avistaje de aves y flora autóctona y los recorridos nocturnos con la luna como testigo lo convierten en el centro turístico con más servicios en el oeste provincial.

Desde la Secretaría de Turismo del departamento General Felipe Varela, su titular, Nadia Barrera, contó a Infobae: "La excursión mas tradicional es la del cañón. Sin embargo, y por su modalidad, la excursión de la luna llena, experiencia romántica y gastronómica bajo las estrellas, enamora a miles de turistas".

Para completar la excursión bajo la luna y las estrellas se ofrecen los productos gastronómicos más deleitantes de la región (Getty Images)

La excursión de la luna llena dura aproximadamente tres horas, se realiza un circuito de trekking a la luz de la luna y al finalizar se ofrece una pequeña picada o degustación de los más exquisitos productos regionales.

"A su vez, la 'ciudad perdida' y el cañón arcoiris forman parte de los paseos populares. En el primero, se permite observar desde un mirador una montaña que a lo lejos simula un conjunto de edificios y ventanas. Y el segundo es un cerro de colores mezclados", agregó. Este último llama muchísimo la atención, y sorprende a los turistas que esperan encontrarse únicamente con el tan característico color rojo de la región.

Las inmensas rocas moldeadas por la naturaleza durante millones de años ofrecen una cita impostergable con la historia y la aventura (Getty Images)

Hay diferentes opciones de circuitos que se pueden contratar en el parque. La agencia de viajes sin embargo, recomienda el circuito tradicional con una duración de aproximadamente dos horas y media.

Las paredes y el Cañón de Talampaya fueron erosionados por el viento y el agua para otorgarle las curiosas y atractivas formas que lo representan. A la indiscutible belleza del paisaje se suman restos de viviendas indígenas y petroglíficos de gran antigüedad.

Quebrada de Humahuaca, Jujuy

Según el Sistema Argentino de Calidad Turística, la región se encuentra en uno de los niveles mas altos de servicios de excelencia (Getty Images)

La aventura jujeña transporta a los turistas a visitar paisajes y pueblos únicos por su belleza y su gente. Ofrece a su vez de manera significativa y diferenciadora experiencias únicas por sus extraordinarios paisajes geográficos y postales que no se encuentran en la geografía del resto del país.

El turismo de la región se basa en la cultura viva. "El imaginario de Jujuy esta hecho en función a la cultura, la herencia y el paisaje cultural. Es un permanente intercambio de experiencias y sensaciones para el turista que vivenciará un calendario completo de actividades y sinceras manifestaciones jujeñas", explicó a Infobae la Secretaría de de Turismo del Ministerio de Cultura y Turismo de Jujuy.

El Espinazo del Diablo es una colorida formación de plegamientos sedimentarios a poco de llegar a Tres Cruces y a 118 km de San Salvador de Jujuy (Getty Images)
“El solsticio de invierno significa la bendición del sol. Esta inigualable puesta detiene el ritmo de una vida en la ciudad para vivir la celebración del sol a pleno”, agregó.

La región cuenta con hoteles para todos los gustos. Según los expertos la región atravesó un reajuste en cuanto a la categorización hotelera: desde hoteles boutique con atención personalizada hasta hostels económicos, respaldado por el Sistema Argentino de Calidad Turística.

Experiencia inolvidable en las Salinas Grandes. Los diferentes prestadores de servicio están preparados para brindar cenas en un marco de mar de sal cuando cae la noche. De productos nobles, las comidas son sencillas pero con un indiscutible sabor e intensidad.

Además, el vino es un producto turístico que define y agrega a la actividad turística de Jujuy. Como novedad, se homologó en la región el vino de mayor altura del mundo, con un viñedo situado por arriba de los 4000 metros de altura. Se ofrece la experiencia de visitar la cava.

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