El turismo, uno de los pesos pesados de las economías nacionales y regionales- la actividad supone cerca del 10% del PBI mundial y se prevé que, para 2030, habrá 1.800 millones de turistas en el mundo-, no siempre es deseado. Los viajeros pueden hacer que el día a día de un local se convierta en un infierno: barrios en los que ya no se puede vivir debido a la alza en precios provocada por cada vez más visitantes, masas interminables de personas en lugares turísticos y costo de vida cada día más alto. Además, también están los turistas irrespetuosos, como uno que hace poco grabó su nombre en el Coliseo romano.
Es por eso que no extraña que los locales estén cada vez más frustrados con el turismo. A continuación, 5 lugares donde el turismo tiene un impacto negativo:
Venecia, Italia
Venecia se está hundiendo, y las masas turísticas sin dudas no están ayudando. En "La Serenísima!", la población estable apenas llega a los 55 mil, mientras que llega un promedio de 40 millones de turistas al año. Los locales se quejan constantemente de que el turismo, en especial el que llega desde los cruceros, es responsable del aumento de la contaminación en la ciudad, y el Comité del Patrimonio Mundial de la Humanidad de la UNESCO está preocupada por su impacto en los sitios históricos.
Por eso, Venecia ya implementó varias medidas y multas con respecto a diversas conductas negativas: arrojar basura al suelo, a no usar remera en público, colgar candados de amor, escribir o dañar árboles o edificios. Según informaron desde CNN, incluso se está limitando la cantidad de habitaciones de hotel.
Dubrovnik, Croacia
"La Perla del Adriático". Así le dicen a la maravillosa Dubrovnik, una de las ciudades medievales más antiguas de Europa que con la llegada del furor de Game of Thrones se volvió un destino especialmente popular, ya que algunas de las escenas clave de la serie de HBO se filmaron en sus calles. En el 2014, la ciudad tenía mucho que agradecer al show: el turismo había aumentado un 6% con el arribo de 13 millones de viajeros, lo que dejó una ganancia de 10 millones de dólares. En el 2015, hubo un aumento del 10%.
Sin embargo, pronto se convirtió en una tortura para los locales, y la ciudad no pudo controlar este gran flujo de arribos. Es por eso que en agosto del 2017 el alcalde de Dubrovnik anunció un plan que durará dos años para reducir el número máximo de turistas por día de 8 mil a 4 mil.
Barcelona, España
En Barcelona, "la contaminación turística" preocupa a sus residentes hace años. Para ellos, el turismo es el segundo problema más grave de la ciudad, luego del desempleo. En el año 2014, la ahora alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que en su momento era una figura política en alza, escribió una columna en The Guardian titulada "El turismo masivo puede matar a una ciudad, sólo pregúnteles a los residentes de Barcelona".
Debido a esta problemática, atracciones populares debieron cambiar sus reglas. La Boquería, por ejemplo, en el 2015 prohibió el ingreso de grupos turísticos de más de 15 personas. Otra sa solución del Ayuntamiento fue aprobar una ley, que ya entró en vigor, que prohíbe abrir hoteles en el centro de la ciudad, incluso si otros cierran. La decisión, que promueve tranquilidad en el barcelonés, causó obvia polémica en la industria hotelera que vea diezmada su posibilidad de acción.
Machu Picchu, Perú
Machu Picchu es una de las atracciones turísticas más impresionantes del mundo. Esta antigua ciudad construida antes del siglo XV -ruina del poderío del Imperio Inca- recibe cada año a millones de personas, la mayor razón por la que esta maravilla se encuentra hoy en peligro.
Por eso Perú, en un acuerdo con la UNESCO, está tratando de hacer todo lo posible para proteger Machu Picchu. Los viajeros, a partir del 2019, podrán transitar por sólo tres caminos aprobados, y por día se deja entrar a las ruinas incas a un máximo de 2.500 visitantes.
Ámsterdam, Holanda
Ámsterdam ya hace tiempo que se convirtió en un destino popular para viajeros amantes de la noche y de la fiesta. Todos los fines de semana, el centro de la ciudad es abrumado por visitantes extranjeros en bares y clubes de desnudistas. Por eso, se están tomando medidas para combatir el problema, tratando de mantener la ciudad atractiva para residentes y turistas por igual.
Entre las medidas en consideración están suspender la construcción de nuevos hoteles, mover la terminal de cruceros lejos del centro de la ciudad, prohibir tiendas sólo para turistas en las partes viejas y prohibir las "bicicletas cerveceras", largos bares movidos a pedal, según AP.
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