Caminar por el bosque, trazar su sinuoso sendero y tentarse con abandonarlo, perderse. Adentrarse en los misterios que se esconden detrás de los troncos, debajo de sus piedras. Pocas cosas son tan enigmáticas y atrayentes como los bosques, donde la naturaleza es ama y dueña del destino. A continuación, algunos de los más increíbles y majestuosos de este mundo.
Bosque de bambú de Arashiyama, Kioto, Japón
Tal como su nombre lo indica, el bosque de bambú de Arashiyama es un hermoso espacio natural rodeado de esta planta gramínea en forma de caña. El ecosistema, de gran atractivo turístico anual, se destaca por las sombras de clorofila y el susurro que produce el balanceo suave de los troncos de bambú. Se encuentra en la ciudad de Kamakura, al noroeste de Kioto. Es un lugar único, donde sólo basta con cerrar los ojos y maravillarse con el sonido del viento.
Bosque del Gran Oso, British Columbia, Canadá
De un tamaño monstruoso que alcanza casi la superficie de pequeños países como Irlanda, el bosque del Gran Oso en Canadá es el hogar de cientos de especies de animales de todo tipo, incluyendo tipos poco comunes de lobos y ballenas. Es uno de los rincones con mayor biodiversidad en el planeta Tierra, con hermosas cataratas, árboles inmensos y acantilados rocosos que dejan sin aliento.
Bosque de Sangre del Dragón, Socotra, Yemen
Socotra es la isla principal de un archipiélago que integra la República de Yemen. Su clima desértico, árido y semiárido tropical monzónico la mantiene alejada de casi todo. La vegetación en su bosque más famoso está dominada visualmente por el árbol de pepino, Dendrosicyos socotrana, una subclase particular de la rosa del desierto. Más arriba, en las montañas, domina la dragonera de Socotra (Dracaena cinnabari), con una copa en forma de paraguas. Probablemente ese espécimen tan extravagante e infrecuente sea uno de los máximos íconos de la esencia y la historia de la isla. Su resina roja (por eso se la llama "sangre del Dragón") se utiliza en artesanías, medicina y también se exporta.
Bosque de Hallerbos, Halle, Bélgica
"El mágico bosque azul". Así lo llaman de manera cariñosa a este increíble bosque belga que se ubica en el municipio de Halle, entre Flandes y Valonia, y no demasiado lejos de Bruselas. La razón probablemente sea porque en primavera su superficie se plaga de campanillas que convierten a este lugar en un sitio sacado de un cuento de hadas.
Parque Estatal Humboldt Redwoods, California, Estados Unidos
El mero hecho de poner un pie en este increíble parque estatal del estado de California, en Estados Unidos, transporta al visitante a un mundo único, donde la tranquilidad y la naturaleza son protagonistas. El Humboldt Redwood cuenta con árboles gigantes, que pueden llegar a medir hasta 90 metros de altura.
Bosque "torcido" de Gryfino, Pomerania Occidental, Polonia
El Bosque "torcido" de Gryfino, en Polonia, es una curiosidad natural que sorprende al mundo. Su increíble arboleda de pinos silvestres -más de 400- pinos silvestres presenta una extraña curva en la base de los troncos. Las causas de este fenómeno no son claras, pero se cree que los árboles fueron manipulados durante sus primeros años en la década del '30 para crear madera que se doble de manera natural para construir muebles. Otros, en cambio culpan a las fuertes nevadas.
Otzarreta, País Vasco, España
El bosque de Otzarreta es uno de los sitios más mágicos y fotografiados de todo el País Vasco, en España. Troncos robustos y raíces gigantes de hayas invaden todo el paisaje. Es un área protegida y posee espectaculares postales panorámicas de zonas montañosas, cuevas, cascadas e infinitos caminos para pasear.
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