“¡… Y ahora, como si fuese poco, llega ese muchachito que tiene la misma edad que cuando yo empecé a trabajar a quererme dar órdenes! ¡Justo a mí, que llevo 25 años en la empresa!”.
Esta frase podría ser de ficción, aunque es sacada de la realidad. Estamos asistiendo a un momento inédito en la humanidad, donde conviven muchas generaciones tan distintas entre sí, no sólo en la convivencia social, en la que estamos bastante acostumbrados por el formato de distintas edades en una misma familia, sino en ese sistema llamado “trabajo”.
Los negocios, empresas, emprendimientos y todo tipo de actividad junto a otros, está desafiada en este tiempo por la complejidad, la incertidumbre y los retos permanentes. A eso le sumamos la confluencia de distintas generaciones, cada una con sus matices.
La convivencia generacional corporativa implica cambios de paradigmas, de dogmas que se creían inamovibles hasta hace dos décadas, y trae desafíos completamente novedosos, como tener que trabajar con personas muy distintas entre sí, de edades y experiencias diametralmente opuestas. Esto incluye que los puestos de conducción muchas veces son ocupados por personas más novatas en edad, configurando un diagrama organizacional complejo y que puede ser enriquecedor.
Si ya es un desafío motivar a cualquier equipo, cuando tenemos una gran heterogeneidad de edades y experiencias el desafío es mayúsculo, porque no hay una uniformidad de intereses, gustos ni “anabólico” que sirva para todos por igual.
4 generaciones: sus rasgos principales y motivadores más frecuentes
Sin buscar ser un artículo académico, estos rasgos que se describen son los que se han resumido en estudios de universidades alrededor del mundo, y forman parte del manual diario de las áreas de recursos humanos.
Cada generación tiene sus pro y sus contras, seguramente puedes identificarte con algunos aspectos más que con otros. Este es un pantallazo general, es una pincelada de lo que observan los que nos dedicamos al comportamiento humano empresarial.
Hay aspectos que no figuran, como una remuneración apropiada, un clima laboral grato y beneficios de distinto tipo, que son comunes a todas las generaciones.
Revisemos cada generación, con sus años promedio, y algunas formas de motivación para ese grupo etáreo:
—Generación Z (1994-2010)
Algunas características: Son nativos digitales; espíritu progresista; pueden ser dispersos y con poco foco en su desempeño; tienen un toque de irreverencia con el que se revelan ante distintas situaciones; tienen una mentalidad global (su lugar es el mundo) y por lo tanto, les encanta la vida nómade.
Cómo motivarlos: Asignarles múltiples proyectos simultáneos, involucrarles en causas sociales y voluntariado, también en hacer desarrollos y nuevos sistemas de trabajo. En cuanto al tipo de trabajo, les gusta más por objetivos que cumplir un horario estricto y se les puede estimular con proyectos que tengan impacto medible y tangible y que, a su vez, sean sustentables. Como premios, beneficios de conectividad, renovación de tecnología, proyectos sociales en comunidades y la oportunidad de intercambios en el exterior, serían buenos puntos de partida.
—Generación Y (millennials, 1981-1993)
Algunas características: Como se sienten frustrados por cómo ven el mundo, tienen una mentalidad social y cívica prevalente. Su mente por lo general está abierta a la diversidad e inclusión. Son personas orientadas a objetivos.
Cómo motivarlos: Darles oportunidades de aprendizaje en temas que les interesen (un menú “a la carta” sería ideal), horarios flexibles, que puedan tener balanceada la vida personal y profesional. También los estimula que se escuche su opinión y, si se los va a premiar de alguna forma, recibir coaching y mentoría, y los viajes serían tres de sus favoritos en la mayoría de los casos.
—Generación X (1969-1980)
Algunas características: Esta generación vive intensamente las experiencias externas, de allí que el éxito personal y profesional es algo importante para ella. La visibilidad, el prestigio y el dinero (es un objetivo en sí mismo). Son personas flexibles ante los cambios y los desafíos, algunos un tanto informales respecto a asumir cargas pesadas de responsabilidad.
Cómo motivarlos: Reconocer sus aportes, premiar con tiempo libre y poco control. Darles libertad para trabajar e incentivar su creatividad. También aprecian el feedback continuo, sobre todo si proviene de personas que les generan respeto. Si vas a premiarlos, el tema económico es importante, además de darles libertad en los horarios, representar a la empresa, y que puedan proponer modelos propios en proyectos y reportes de su gestión.
—Baby boomers (1949-1968)
Algunas características: Orientados al trabajo en equipo. Muchas personas son ambiciosas y competitivas. Buscan la estabilidad en todo sentido y el estatus. Han pasado muchas situaciones desafiantes, por eso suelen tener una mirada optimista más allá de las dificultades.
Cómo motivarlos: En general les gusta el reconocimiento en público, que les consulten y pidan consejos, que sean tenidos en cuenta. Funciona hacerlos mentores de jóvenes y darles su lugar por experiencia y capacidad. Si implementaras algún premio, pueden apreciar más lo que se relacione con el placer, el hedonismo y mejoras en el estilo de vida.
*Daniel Colombo: Facilitador y Máster Coach Ejecutivo especializado en alta gerencia, profesionales y equipos; mentor y comunicador profesional; conferencista internacional; autor de 32 libros. LinkedIn Top Voice América Latina. Coach profesional certificado por ICF en su máximo nivel, Coach certificado y Miembro de John Maxwell Team.
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