El valor de la visualización en la toma de grandes decisiones profesionales

La técnica consiste en imaginar o visualizar en la mente la meta u objetivo a alcanzar. Por qué, al decidir entre dos opciones de trabajo, es importante mirar más allá de los números

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Visualizar escenarios en los que elegimos la opción A o la opción B puede servir para darnos cuenta de qué oferta nos entusiasma más (Getty Images)
Visualizar escenarios en los que elegimos la opción A o la opción B puede servir para darnos cuenta de qué oferta nos entusiasma más (Getty Images)

En algún momento de nuestras carreras, es posible que nos enfrentemos a una encrucijada en la que debamos decidir entre dos buenas oportunidades laborales. Puede ser difícil decidir cuál es la mejor opción, especialmente cuando ambos son movimientos profesionales que en el papel suenan muy bien y nos emocionan.

A menudo, los profesionales quedan atrapados en concentrarse solo en números como el pago. “Creo que hay mucha presión, particularmente con el capitalismo, para enfocarse en ‘¿Qué estoy haciendo? ¿Cuánto voy a ganar? Obviamente, esos son factores importantes y cosas que la gente debe considerar“, dijo en diálogo con The Huffington Post Adjoa Osei, psicóloga clínica y consultora de diversidad, equidad e inclusión. “Pero, ¿qué otras cosas son importantes cuando pensamos en el trabajo?”, se preguntó.

Existe una técnica de visualización que puede brindarnos la claridad que necesitamos para avanzar con un gran movimiento profesional, adviertes los especialistas. Este truco puede sacar a la superficie emociones enterradas que nos ayudarán a determinar qué es lo que más valoramos. Muchos de nosotros estamos entrenados para ignorar cómo nos sentimos. Visualizar escenarios en los que elegimos la opción A o la opción B puede servir para darnos cuenta de qué oferta nos entusiasma más.

Cynthia Pong, asesora profesional y autora de Don’t Stay in Your Lane: The Career Change Guide for Women of Color, recomienda dedicar al menos 20 minutos para respirar y dejar de preocuparse por tomar una decisión antes de visualizarnos aceptando cada oferta. “La clave está en tratar de imaginar cómo nos sentiríamos en tres meses, seis meses o un año, si tomáramos la opción A. Prestar atención a cómo nos sentimos. ¿Notamos alguna reacción física? Luego repetir para la opción B“, subrayó Pong. “Hacer este tipo de visualización puede aportar mayor claridad y confianza en nuestra toma de decisiones”.

"El objetivo es llegar a un lugar en el que podamos aceptar de todo corazón la decisión que vayamos a tomar y estar en paz con la oferta que elijamos no aceptar" (Getty Images)
"El objetivo es llegar a un lugar en el que podamos aceptar de todo corazón la decisión que vayamos a tomar y estar en paz con la oferta que elijamos no aceptar" (Getty Images)

La técnica de la visualización consiste en imaginar o visualizar en la mente la meta u objetivo a alcanzar. Los resultados de utilizarla suelen ser varios, por una parte aumenta la autoestima, al sentirnos mejor y más confiados en nuestras posibilidades, y por otro lado crea una serie de conexiones que nos resultarán muy útiles en la entrevista de trabajo.

Osei recomienda reflexionar sobre los valores que son principios rectores de cómo deseamos vivir nuestra vida. “Debemos hacernos preguntas como: ‘¿Este trabajo me ayudará a hacer la transición al tipo de trabajo que quiero hacer?’ o, ‘¿Qué tipo de relaciones quiero tener con mi trabajo?’ para impulsar la reflexión”, sostuvo.

Luego, intentar clasificar los valores en orden de importancia y ver qué es lo que más priorizamos. “Si creemos que valoramos la flexibilidad, entonces no tiene sentido asumir ese trabajo que tiene un horario muy rígido, en el que a menudo se trabaja después del horario laboral”, destacó. “¿Eso realmente se alinea con el estilo de vida que estamos buscando?”

Aun así, no deberíamos hacer todo el trabajo por nuestra cuenta. Las especialistas sugieren combinar la técnica de visualización con hablar con personas de nuestra confianza. “Hablar sobre nuestras opciones con colegas, amigos o mentores de confianza puede proporcionar una perspectiva externa útil”, explicaron Pong y Osei. Y concluyeron: “El objetivo es llegar a un lugar en el que podamos aceptar de todo corazón la decisión que vayamos a tomar y estar en paz con la oferta que elijamos no aceptar”.

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