Nos fuimos a Londres con @lucila.godoy y visitamos la fábrica de Dr. Martens, la marca zapatos que es tendencia en todo el mundo. En @masmarianaok te mostramos el detrás de escena del proceso de confección artesanal. También, la gente que forma parte de esta organización que impone estilo y nos obliga a seguirla.
La planta está ubicada en Wollastone, a las afueras de la ciudad de Londres, es allí dónde sucede toda la magia de elaboracion con más de seis décadas de tradición.
En 1947- plena era post Segunda Guerra Mundial- Klauss Martens comenzó a producir zapatos económicos, cómodos y útiles. Sus productos apuntaban a la clase trabajadora inglesa. Un accidente en el tobillo lo llevó a inventar un calzado resistente para aquellos rubros que exigían largas horas de trabajo. Las botas del ejército le incomodaban su pie herido, por lo que decidió armar sus propios zapatos con cuero flexible y suela con aire.
La marca fue patentada en el año 1960 y desde ese momento no dejó de crecer. En los años 70′ marcó un antes y un después en su historia. Todas las tribus urbanas de Londres usaban los borcegos en señal de rebeldía.
Alcanzó la masividad el día que Pete Townshend– parte the la banda de The Who -incorporó este diseño en sus presentaciones. Referente en el mundo del punk, las mismas llegaron a Nirvana y Pearl Jam a principio de los 90′ y eso marcó el segundo gran salto a la popularidad, ahora en los Estados Unidos.
Con tantos años en el mercado, hoy podemos encontrar desde borcegos acordonados de distintos colores y texturas, hasta zapatos para los más chicos. Ya conquistaron prácticamente a todo público: hombres, mujeres y niños imponiendo tendencia.