Di Domenico, el diseñador que logró que el glamour de sus vestidos no se transforme en vulgaridad

Por la noche del 16 de mayo, una triste noticia sorprendió al mundo de la moda: la muerte de un reconocido diseñador Carlos Di Domenico. Falleció en un sanatorio privado de la ciudad de Rosario. Enfrentaba desde hace un tiempo una dura enfermedad, que lo había alejado de su trabajo.

Con 66 años y 40 de ellos recorridos entre telas, tijeras, agujas e hilos, era uno de los más queridos en el ambiente fashionista. Sus creaciones lucían en las mejores pasarelas de Argentina y del mundo junto a las top models más reconocidas.

"El Dolce & Gabbana argentino". Un estilo muy particular identifica al diseñador, gracias a los exquisitos géneros que importaba desde su amada Italia, Marruecos, Turquía, Nueva York e Ibiza; los bordados a mano con piedras, canutillos, paillettes, lentejuelas y cristales; sastrería entallada y vestidos de alta costura. Contaba con colecciones de alta noche y día, una línea de jeans y accesorios de lujo que adornaban su maison sobre la calle Cerrito en el barrio de Recoleta.

No solo tuvo su casa matriz en Recoleta, sino también su boutique en Mar del Plata. También, pocos años atrás, se instaló en Punta del Este, con una tienda exclusiva con objetos de decoración y selectas prendas de vestir importadas desde el Viejo Continente.

El talentoso modisto comenzó años atrás a vestir y a realizar desfiles que pronto lo iban a a posicionar como uno de los mejores diseñadores y el elegido por muchas mujeres que buscaban su diferencial en telas y diseños.

Las musas argentinas para el talentoso Di Domenico fueron Susana Giménez, con sus clásicos en animal print -muy característico de su firma-, Mirtha Legrand, con vestidos y tailleurs bordados al estilo barroco, Ingrid Grudke, Teresa Calandra, Teté Coustarot, Nequi Galotti, Graciela Borges, Ana Rusconi, Rossella y Patricia Della Giovampaola, entre otras tantas mujeres que confiaban en él para vestirse.

"Es muy triste esto, lo conocía hace 40 años cuando lo descubrí en un local en Mar del Plata que tenía con su mujer Susana Ortiz en la calle, y a partir de ahí fue el comienzo de una gran relación que desencadenó muchos desfiles en su ciudad", afirmó el productor Héctor Vidal Rivas a Infobae.    

Su carrera en el mundo de la moda comenzó de la mano de Vidal Rivas, quien le presentó a Mirtha Legrand. "Cuando los presenté y logré que vistiera a Mirtha Legrand fue el comienzo de una prometedora carrera. Terminó siendo reconocido no solo en nuestro país sino también a nivel internacional. Se lo va a extrañar", confesó Vidal Rivas.   

"Tuvo dos estilos: el primero cuando la marca era Carlos y Susana y después cuando empezó solo. Tenía sus propios diseños, era alguien muy creativo, impecable en todo, vistió a las dos figuras más emblemáticas del país, Susana y Mirtha, durante muchos años", enfatizó su descubridor.

"Hicimos muchas cosas juntos, tantos desfiles. Sin dudas la moda Argentina lo va a extrañar. Él junto con Jorge Ibáñez fueron dos grandes de la moda en el país; dejó un legado muy importante que va a ser difícil de superar", concluyó.

Su trabajo le valió en 2001 una nominación como "Diseñador Avant Garde" por la revista Vogue. A nivel local, participó en las ediciones invierno/verano del BAF Week en el período 2000-2010. En dos oportunidades obtuvo el premio "Tijera de Plata, Diseño con identidad propia", otorgado por la Cámara Argentina de la Moda.

"Si tuviera que definir qué estilo dejó Carlos Di Domenico en la moda argentina diría 'el estilo Di Doménico'. Fue un diseñador cosmopolita, ecléctico. Creaba sus colecciones inspirándose en sus viajes, pensando en sus clientas. Él siempre quería que estuvieran espléndidas, femeninas, que resaltaran a donde fueran, que todos reconocieran la firma Di Domenico en cada prenda", recordó Manuela Vidal Rivas durante una charla con Infobae.  

"Algo que lo caracterizaba eran las telas italianas. La mujer italiana era para Carlos gran parte de la inspiración: femenina, espléndida, resaltando su silueta, sin miedo a lo arriesgado, marcando tendencias. Las telas estampadas, el juego de texturas lo han caracterizado", agregó.

Sin dudas fue un diseñador que supo ganarse su lugar en la moda argentina, querido por todos, elegido por las más grandes celebrities del país para que las vista", describió su productora de modas, y agregó: "Lo voy a recordar siempre con mucho cariño. Carlos me conoció desde que nací y estoy muy triste por esta pérdida".

Por otro lado, su colega Benito Fernández compartió con Infobae: "Carlos supo interpretar a la mujer. Todas sus colecciones eran sofisticadas, tanto su ropa de día como la noche; sin excesos lograba la perfección, con mucho color, alegría y glam. Un gran ejemplo de trabajador y buen colega".

"Me da mucha pena que se haya ido porque no estamos preparados para estos golpes. Se lo va a extrañar mucho", enfatizó César Juricich.   

"La moda hace un tiempo que estaba de luto. Era una persona muy adorable, un diseñador increíble, divertido, creativo, glamoroso, tenía un exquisitez para el glamour que pocos tienen", recordó Tere del Valle, asesora y vestuarista de Susana Giménez y Araceli González.

Para la Revista Susana, Carlos era un diseñador que nunca faltaba en sus producciones. Vestidos y prendas especiales realizadas con las medidas exactas de la conductora, tiempos a contrarreloj para adornar sus  portadas. Una de las más recordadas fue protagonizada por un strapless blanco realizado en el 2010 con el escudo de la República Argentina pintado a mano.

"Carlos era capaz de parar una producción o una novia para hacerle un vestido a Susana o a Araceli. Recuerdo un diseño en particular. Queríamos que Susana se sienta sexy y él decidió hacer un top y una falda. Yo pensé que estaba loco y él me dijo 'quedate tranquila, yo la conozco' y fue todo un éxito. El diseño fue un tul bordado negro sobre un bandeaux y culotte de paillettes".

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