Española de nacimiento pero italiana por elección, Patricia Urquiola vive en Milán desde que finalizó sus estudios graduándose de arquitecta en el Politécnico de Milán. En 2001 creó su propio estudio desde donde adquirió fama realizando infinidad de trabajos para las marcas más reconocidas del mercado. Dueña de una capacidad para desarrollar lenguajes disruptivos, despliega un talento dúctil capaz de crear espacios para distintos usos, materiales y objetos industriales. En el corazón del renovado flagship store de Cassina se entrevistó con Gabi López.
-¿Cuáles son las urgencias del diseño?
-Todavía hay mucho que hacer. Hay que recuperar los grandes valores del mundo artesanal para tener una relectura continua en relación a la tecnología. Creo que los lados material e inmaterial de las cosas van a convivir cada día más y tenemos que ser muy sensibles. No tenemos soluciones, tenemos curiosidad, interés y ganas de recorrer muchos caminos.
-¿Qué rol cumplen los colores en materia del diseño actual?
-Muchas de nuestras interfaces serán inmateriales. La luz va a ser inteligente y va a tener mucha evolución. No solamente nos dará un color, sino que cambiará según quien se presente en escena y tendrá un chip de información de cómo queremos estar en relación a ella. A su vez, nos dará información porque funcionará a menudo como un proyector. Cuando hablamos de otros objetos como el sofá, se deberá analizar una nueva manera de "crearles un alma", es decir elegir una dirección para el producto.
El trabajo de la diseñadora constantemente mira hacia adelante. Su visión innovadora la lleva a adelantarse en el tiempo, observar comportamientos y experimentar con nuevas tecnologías; el futuro siempre es parte de su presente.
-¿Pensás en el futuro de tu trabajo?
-Para mí la metáfora que nos acompaña y nos lleva hacia el futuro es el Rizoma. La estructura rizomática del helecho, la de las hormigas, es molecular y es una navegación. Cuando piensas de una manera rizómica estás dentro de una serie de mundos en conexión, dónde estás dentro. Entrar o salir no es importante porque todas las entradas y salidas son válidas. La web, por ejemplo, es un rizoma. Tienen muchas posibilidades de dispersión de energía.
Empática y humilde, define a los diseñadores como "gente simple que trabaja" y su estilo único e incomparable empuja los limites del diseño por el camino de la innovación.