El jardín de cualquier hogar, ese lugar perfecto para relajarse, también puede convertirse en un refugio ideal para los mosquitos. ¿Por qué? Algunas especies vegetales emiten compuestos que atraen a estos insectos, por lo que eliminarlas es clave si para mantener el espacio al aire libre.
Si bien existen plantas que actúan como repelentes naturales, como el eucalipto, la citronela y la lavanda, hay otras especies que producen el efecto contrario. Estas plantas, lejos de ahuyentar a los mosquitos, los atraen de manera irresistible, e incrementan su presencia en tu hogar.
De acuerdo a una investigación, el néctar de las plantas es una fuente de nutrición común para todo tipo de mosquitos, adultos y de ambos sexos. En esta misma línea, otro estudio, si bien la sangre es un recurso crucial para los mosquitos hembra para el desarrollo de los huevos, tanto los mosquitos machos como las hembras dependen de fuentes ricas en azúcar, como el néctar, los jugos de frutas y la melaza, para satisfacer sus necesidades energéticas y nutricionales.
Elegir correctamente qué especies mantener en tu jardín puede marcar la diferencia en la lucha contra estos molestos visitantes.
Cuáles son las plantas que atraen a los mosquitos
1. Margaritas
Las margaritas (Bellis perennis) son plantas ornamentales populares por su sencillez y belleza, con pétalos blancos que rodean un centro amarillo brillante. Son resistentes y se adaptan fácilmente a diferentes tipos de clima, lo que las convierte en una elección frecuente en jardines.
Además de su valor estético, las margaritas producen néctar y polen que atraen a diversos insectos polinizadores, como abejas y mariposas, que buscan alimentarse de sus flores. Y, también, mosquitos.
El néctar de las margaritas es un factor que contribuya a la presencia de mosquitos en áreas donde abundan, ya que estos insectos también se alimentan de azúcares presentes en las flores cuando no están buscando sangre.
Sin embargo, su capacidad de atraer mosquitos es menor en comparación con otras plantas que retienen agua o emiten olores más intensos.
2. Alegrías del hogar
La Impatiens walleriana, conocida comúnmente como alegría del hogar o miramelindos, es una planta ornamental popular en jardines debido a sus flores vibrantes y coloridas. Originaria de África Oriental, esta planta crece en lugares húmedos y sombreados, lo que la hace ideal para espacios con poca luz solar directa. Sus flores, disponibles en una variedad de colores, florecen durante largas temporadas, lo que la convierte en una elección frecuente para la decoración de jardines y terrazas.
En un estudio sobre el comportamiento alimenticio de los mosquitos, los científicos observaron que Impatiens walleriana puede atraer hasta un 80-90% de los mosquitos expuestos a la planta debido a su abundante producción de néctar. Este factor, sumado a su capacidad para prosperar en áreas húmedas, la convierte en una planta atractiva para estos insectos en ciertos entornos.
El mosquito Aedes aegypti, conocido por ser vector del dengue, zika y chikungunya, se siente atraído por este tipo de flores. El mosquito Culex pipiens, transmisor del virus del Nilo Occidental, tiene una atracción del 80-95%, según el estudio.
3. Lantana
La lantana (Lantana camara) es una planta ornamental muy popular en jardines por sus vistosas flores de colores brillantes y su resistencia a condiciones adversas. Sin embargo, esta planta es un imán para los mosquitos debido a los compuestos volátiles que emite y que son atractivos para diversos insectos.
Aunque sus flores son principalmente visitadas por polinizadores como abejas y mariposas, los mosquitos también se ven atraídos por el néctar que la planta produce, lo que puede aumentar la presencia de estos insectos en áreas donde la lantana abunda.
La lantana puede crear microambientes húmedos entre sus hojas densas, especialmente en climas cálidos y húmedos. Estos ambientes favorecen la reproducción de los mosquitos, ya que ofrecen sombra y un espacio protegido del viento donde los insectos encuentran refugio.
Aunque no acumula agua como otras plantas acuáticas, la estructura densa de la lantana crea condiciones de humedad que resultan atractivas para los mosquitos, sobre todo en jardines con poca ventilación.
4. Escobilla o escoba amarga
La Parthenium hysterophorus, conocida popularmente como escobilla, escoba amarga o hierba de Santa María, es una planta invasora que crece en climas tropicales y subtropicales. Aunque es originaria de América, se ha extendido a otras regiones del mundo debido a su capacidad para adaptarse a diversas condiciones. Esta planta es conocida por liberar compuestos volátiles que atraen a diferentes insectos, incluidos los mosquitos.
Los mosquitos, especialmente las especies del género Anopheles (vectores de la malaria), se sienten atraídos por la Parthenium hysterophorus debido al néctar que produce.
Estudios han demostrado que los mosquitos adultos, tanto machos como hembras, se alimentan del néctar de esta planta para obtener la energía necesaria para su supervivencia. La combinación de sus flores pequeñas y accesibles, junto con la abundancia de néctar, la convierte en una fuente atractiva para estos insectos.
5. Pensamiento
El pensamiento (Viola), también conocida como violeta tricolor, es una planta ornamental muy apreciada por sus flores de colores intensos, que van desde el morado hasta el amarillo, pasando por tonos blancos y azules. Es común en jardines y macetas debido a su facilidad de cuidado y capacidad de florecer en diversas estaciones.
Los mosquitos se sienten atraídos por el pensamiento debido a su producción de néctar. Las flores del pensamiento, con su estructura abierta, permiten un fácil acceso al néctar, lo que lo convierte en un atractivo para varios insectos, incluidos los mosquitos.
Además, el pensamiento crece mejor en lugares húmedos y sombreados, condiciones que también resultan favorables para los mosquitos. Aunque no es una planta acuática ni retiene agua, su entorno de crecimiento puede contribuir a crear microhábitats donde estos insectos encuentran un ambiente adecuado para su reproducción y alimentación.