América del Sur, un continente de contrastes y diversidad, ofrece a los amantes de la naturaleza una gama impresionante de destinos para explorar y maravillarse. Desde las imponentes montañas de los Andes hasta las exuberantes selvas tropicales, pasando por desiertos de surrealista belleza y costas bañadas por aguas cristalinas, cada rincón de este vasto territorio promete una experiencia única.
Con una superficie de 18 millones de kilómetros cuadrados, su biodiversidad y geodiversidad fue siempre el foco de la curiosidad e investigación de científicos como Charles Darwin y Alexander von Humboldt.
Así, la pluralidad de paisajes es característica del continente y es capaz de complacer a viajeros de todo tipo. Expertos de National Geographic han destacado algunos destinos que capturan la esencia y la grandeza de la naturaleza sudamericana, invitando a aventurarse en un viaje inolvidable por estos paraísos terrenales.
1. Machu Picchu
Ubicada en Perú, esta ciudad Inca fue nombrada como una de las siete maravillas del mundo. Los templos y las terrazas de cultivo ubicadas en la ladera de la montaña son evidencia de cómo fueron las civilizaciones antiguas que vivían en esa zona.
Machu Picchu, que significa “Montaña Vieja” en quechua, construida antes del siglo XV. Se encuentra en la cordillera Oriental del sur del Perú, en la cadena montañosa de los Andes a 2430 metros sobre el nivel del mar. Fue redescubierta por el arqueólogo Hiram Bingham en 1911, aunque ya era conocida por algunas familias locales. La ciudad fue construida como una residencia real para el inca Pachacútec y su familia a mediados del 1400 D.C. Machu Picchu fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1983 y una de las nuevas 7 Maravillas del Mundo en 2007. Es la atracción turística más visitada en Perú y uno de los principales destinos en el mundo.
2. Glaciar Perito Moreno
El Glaciar Perito Moreno es una impresionante masa de hielo ubicada en el departamento Lago Argentino de la provincia de Santa Cruz, en el sudoeste de Argentina, en la región de la Patagonia. Parte de su superficie se encuentra en Natales, Chile. Este glaciar se origina en el Campo de Hielo Patagónico Sur. En su descenso, alcanza el brazo Sur del lago Argentino, con un frente de 5 km de longitud, aflorando sobre el agua con una altura de unos 60 metros.
El derrumbe de la bóveda de hielo que se forma debido a su constante avance constituye un inusual espectáculo natural y es uno de los mayores atractivos del Parque Nacional Los Glaciares. El nombre del glaciar rinde homenaje a Francisco Moreno, director del museo de la Sociedad Científica Argentina y activo explorador de la zona austral de ese país.
3. Salar de Uyuni
El Salar de Uyuni, a veces conocido como Salar de Tunupa, es el mayor desierto de sal continuo y alto del mundo, con una superficie de 10.582 km. Está situado a unos 3650 m s. n. m. en el suroeste de Bolivia, en la provincia de Daniel Campos del departamento de Potosí, y en la provincia de Ladislao Cabrera del departamento de Oruro, dentro de la región altiplánica de la cordillera de los Andes.
Como si eso no fuera suficiente, la dualidad de su paisaje realmente impresiona. En épocas de lluvia se forma un espejo que refleja el cielo y hace que desaparezca el horizonte. Por otro lado, cuando no llueve se puede apreciar la sal que cubre toda su superficie.
4. Ilha Grande
Está frente al estado de Río de Janeiro y tiene una peculiaridad: no se puede llegar a ella en auto. Esto brinda una paz que no se encuentra en otro lado. La única manera de ir a esta isla es en barco desde la costa de Angra dos Reis. Su clima es tropical y sus temperaturas no bajan de los 19 grados en invierno, debido a esto es un destino ideal para visitar en cualquier época del año.
La isla es conocida por sus playas de arena blanca y aguas cristalinas azules. Al llegar a la isla, te desconectas del mundo exterior. No hay autos, no hay bancos, no hay ruido de teléfono. Se trata solo de relajarse al sol, navegar, nadar, desaparecer en los spa y volver a salir para buscar mariscos frescos en uno de los 30 restaurantes pequeños. Además, ofrece diversas actividades como senderismo, tours en vehículos todoterreno, y excursiones de un día.
5. Desierto de Atacama
Al estar lejos de las ciudades y ser un área con poca humedad ambiental, este desierto chileno es ideal para admirar el cielo nocturno en todo su esplendor. Su clima es árido, con lluvias cada más de 15 años. Se pueden desarrollar actividades como visitar el Salar de Atacama y el Valle del Arcoíris.
Este desierto cubre una superficie aproximada de 105.000 km², tiene una longitud de casi 1.600 km y un ancho máximo de 180 km. Está delimitado por el océano Pacífico al oeste y por la cordillera de los Andes al este. Además, es rico en recursos minerales metálicos y no metálicos, y es conocido como el “lugar con mayor radiación solar del planeta”, lo que le otorga el mayor potencial de energía solar del planeta.
6. Parque Nacional Huascarán
Este parque nacional ubicado en Perú fue declarado como Patrimonio Natural de la Humanidad en 1985. Comprende lo que se conoce como la cordillera Blanca, una cadena montañosa que forma parte de la cordillera de los Andes. En él se encuentran maravillas de la naturaleza como glaciares, lagos y la montaña más alta del país, el Huascarán que mide 6700 metros. También está el sitio arqueológico Chavín de Huántar, el cual había sido hogar de la cultura chavín, una civilización que precedió a los Incas.
El Parque Nacional Huascarán es famoso por tener en su territorio a 20 picos nevados que superan los 6000 m s. n. m., y a la montaña más alta del Perú y de toda la zona intertropical: el macizo nevado Huascarán del que obtiene el nombre. Con una extensión de 340.000 hectáreas, comprende 434 lagunas, 712 glaciares, profundos valles y 41 ríos que alimentan las cuencas del Océano Pacífico y Atlántico. Su importancia también se refleja en el potencial hidrológico pues sus nevados alimentan la cuenca de los ríos Santa, Marañón y Pativilca.
7. Volcán Chimborazo
Este volcán se encuentra en el centro de Ecuador. Su característica principal es el tener el punto más alto de todo el mundo. Por más que el Everest sea la montaña más alta con aproximadamente 8850 metros de altura, el Chimborazo, con sus 6263 metros, es el punto más alto medido desde el centro de la Tierra. Esto se debe a la forma geoide de nuestro planeta, lo que significa que el diámetro de la línea del ecuador es mayor al del resto de los meridianos.
Su parte superior está cubierta por glaciares. Más allá de que su última erupción haya sido en 550 d.C., aproximadamente, se lo considera como potencialmente activo.
8. Los Roques
Bañadas por el Mar Caribe, las costas de las islas Los Roques son uno de los puntos turísticos más hermosos de Venezuela. Una de sus propiedades más interesantes es la forma que tiene este archipiélago. Las islas se organizan de manera circular, por eso el conjunto es llamado atolón. Esto es bastante común en el océano Pacífico, pero muy inusual en el Caribe.
Está situado a 168 Km al norte de La Guaira, el puerto de Caracas. El atolón coralino está formado por unas 50 islas y cerca de 300 cayos, donde se encuentran los arrecifes de coral más diversos y mejor conservados del Caribe. Los Roques es un destino ideal para los amantes del buceo, del windsurf y de la pesca. Aunque no hay grandes hoteles de lujo, hay numerosas posadas con variedad de servicios, que permiten disfrutar cómodamente de las maravillas naturales que ofrece este prístino rincón del Caribe.
9. Isla de Pascua
Está a 3.700 kilómetros de la costa de Chile, en medio del océano Pacífico, y su atracción principal son los moais. Estas estructuras antropomorfas fueron construidas por la etnia rapanui. Son más de 900 repartidos por toda la isla y son realmente sorprendentes. Además, las aguas que rodean a esta isla son ideales para realizar actividades acuáticas como el buceo debido a su claridad.
Es también conocida como Rapa Nui y forma parte de la Polinesia y se encuentra en Oceanía, en medio del océano Pacífico a 3700 kilómetros del territorio continental chileno. Es uno de los principales destinos turísticos del país debido a su naturaleza y la cultura ancestral de la etnia rapanui. Para preservar esas características, el pueblo rapanui administra desde 2016 el parque nacional que lleva el mismo nombre, a través de la Comunidad Indígena Polinésica Ma’u Henua, mientras que la Unesco declaró este parque como Patrimonio de la Humanidad en 1995.
10. Cataratas del Iguazú
Estas cataratas son compartidas por Argentina y Brasil. Fueron nombradas como una de las siete maravillas naturales del mundo. El enorme caudal de agua que desciende es digno de admirar. Su salto más grande es conocido como la Garganta del Diablo con 80 metros de alto.
Para admirar sus increíbles saltos, se pueden realizar excursiones que recorren el inferior de las cascadas o la parte superior en los diversos senderos y miradores construidos con ese fin. A sus alrededores se encuentra una gran biodiversidad que comprende especies en peligro de extinción que son protegidas, como el yaguareté.