Es cierto que históricamente se asoció la llegada de la primavera con el renacimiento de los vinos rosados. Esto tenía que ver con que esos vinos, son los primeros del año en salir al mercado. Y, tanto su aspecto como sus aromas y sabores, se asocian con el regreso del buen clima y el reflorecimiento de la naturaleza, invitando a disfrutar nuevamente más tiempo al aire libre.
Y si de disfrute se trata, la comida y el vino están primeros en la lista de muchos. Pero la llegada de la primavera ya no está solo dominada por los vinos rosados que, como todos años, se lanzan masivamente en esta época. Porque son varias las opciones refrescantes que tienen los amantes del vino para volver a vivir ocasiones de consumo al aire libre.
Claro que, por sus características, los vinos rosados son ideales porque no solo refrescan el paladar, sino que además se lucen por sus aspectos, apreciados plenamente gracias al vidrio transparente de las botellas. Así. Los hay de color rosa pálido o intenso, de tonos asalmonados o piel de cebolla. Colores que llaman la atención más allá del diseño de muchas botellas que se parecen más a frascos de perfume gigantes que a vinos. En realidad, el rosado no es un gran vino ni lo quiere ser. Principalmente porque se elabora rápido, en dos o tres meses está listo para salir al ruedo. Es más, la gran mayoría de los producidos en el país se exportan a Europa y Estados Unidos, a donde llegan en pleno verano, causando un gran impacto. Mientras que para el desembarco en el mercado interno se espera que pasen los días fríos y grises de invierno, porque en realidad el rosado es ideal para un consumo informal y casual. Ya sea en casa o en un restaurante, se asocia más con el sol y el aire libre, por eso su vínculo eterno con la primavera.
Pero en Argentina la vitivinicultura viene avanzando a pasos gigantes y, más allá que las bodegas están elaborando los mejores vinos de su historia, hay nuevos vinos que también son muy adecuados para disfrutar en esta época del año, justo cuando el sol vuelve a calentar. Todos tienen como característica fundamental su frescura, dada por la acidez vibrante, como la de los rosados, o más. También sus colores, que trasmiten suavidad y liviandad. Por un lado, están los vinos espumosos, que desde hace años rompieron con la estacionalidad, y se disfrutan todo el año.
La otra categoría que está en boga es la de vinos naranjos, que son blancos elaborado como tintos. Es decir que, a diferencia de los vinos blancos, el jugo se macera con las pieles. Esto aporta más cuerpo y textura, pero como se parte de uvas más ácidas, cosechadas más temprano para lograr una mejor estabilidad en el tiempo, los vinos son súper refrescantes. Y esta acidez también resalta las texturas en boca, dando sensaciones más vibrantes, casi como al de las finas burbujas en los buenos espumosos. Hay algunos que son más aromáticos que otros dependiendo de la variedad. Y se denominan naranjos porque su aspecto suele ser cobrizo.
Claro que también llegan los primeros blancos y tintos del año, que servidos luego de refrescados también se disfrutan mucho al aire libre.
Pero qué mejor que recibir a la estación de las flores y los pajaritos con esos vinos que vuelven a ser protagonistas en esta época.
Andeluna Rosé 2022
Andeluna, Gualtallary, Valle de Uco $4500
Elegante por fuera y por dentro es el rosé de partida limitada que elabora el enólogo de la casa Manuel González Bals. Siempre a partir de racimos y granos seleccionados y sin paso por madera, para mantener viva la fuera de la fruta. Sus aromas son elocuentes, a frutos rojos diversos. Y en boca se destaca la frescura, que no solo aporta vivacidad a cada trago sino también profundidad. Beber entre 2023 y 2024.
Puntos: 90,5
Chandon Cuvée Réserve Blanc de Noirs
Chandon, Valle de Uco, Mendoza $4850
Elaborado 100% con uvas Pinot Noir que provienen de los viñedos más altos, Cepas del Plata y El Espinillo, emplazados entre 1400-1650 msnm. Es un vino fresco y tenso, de buen volumen y aromas expresivos. Paladar franco y vivaz, con delicadas notas de frutas rojas, resaltadas por las finas burbujas y un leve final a frutos secos. De trago profundo y equilibrado, ideal para el brindis o para servir en la mesa.
Puntos: 91
Cadus Appellation Tunuyán Naranjo 2022
Cadus Wines, Los Chacayes, Valle de Uco $12.500
Santiago Mayorga eligió un Viognier de la Finca Viña Vida, que fermentó en huevo de concreto durante 20 días con sus pieles. Y luego siguió su proceso durante 65 días en barricas usadas, siempre con vino blanco. De esas, seleccionó tres para dar vida a un vino innovador. De aspecto y aromas bien de naranjo, con una frescura es tensa, franco y voluptuoso. Bien floral en boca, con toques cítricos y un dejo amarguito. Sus texturas finas acentúan su persistencia. Puntos: 91