Cada 24 de mayo se conmemora el Día de la Visibilidad Pansexual, una iniciativa que comenzó en redes sociales impulsada por personas que pertenecen a esta orientación sexual y afectiva. El nombre completo de la efeméride es Día de la Conciencia y de la Visibilidad Pansexual y Panromántica.
La bandera del Orgullo Pansexual está conformada por tres colores: magenta/rosa, azul, y amarillo, y la elección es para mostrar la inclusión, no sólo de los binarismos tradicionales, sino también de las identidades y expresiones “no binaries”, así como de las personas trans. En términos generales, las personas pan muestran un interés erótico y/o afectivo por otros sin tomar en cuenta factores de género
La pansexualidad, como todas las etiquetas de la sigla LGBTQIA+, se entiende de maneras diferentes. Sin embargo, la organización no gubernamental estadounidense de defensa queer, la Gay and Lesbian Alliance Against Defamation (GLAAD por sus siglas en inglés) define ampliamente ser pansexual como “sentirse atraído por todas las identidades de género o atraído por personas sin importar el género”.
El prefijo “pan” proviene del griego y se traduce como “todos”, por lo tanto, el término “pansexual” se puede entender como una identidad sexual que se utiliza para describir la atracción hacia personas de todos los géneros, más allá de los parámetros masculino-femenino.
Cuál es la diferencia con otras identidades sexuales
“Ser pansexual es sentir atracción estética, amorosa o sexual por las diferentes formas de género, ya sea aquellas en las que existe acuerdo entre el sexo biológico y el género (cisgénero) o en las que hay desacuerdo (transgénero). Las personas pansexuales tienen orientaciones cambiantes, pero esto no significa que sean inestables en sus relaciones. El término sólo establece que sus elecciones abarcan una amplia gama de posibilidades y se dan la libertad para dar curso a sus deseos”, explicó consultado por Infobae Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo.
Ahora, ¿en qué se diferencia, por ejemplo, de la bisexualidad? El prefijo bi significa “dos” y pan, como se dijo, significa “todos”, por lo que sugiere una clara diferencia entre las personas que se sienten atraídas por dos géneros y las que se sienten atraídas por personas de todas las identidades de género.
Sin embargo, algunas personas interpretan la pansexualidad como un “anexo” de la bisexualidad, argumentando que la última es transfóbica. Los mismos utilizan una definición cisnormativa de bisexualidad como “hombres cis y mujeres cis”, lo que implica que las personas bisexuales no pueden ser atraídas por personas no binarias o personas transbinarias.
Si bien la palabra pansexual ha existido desde principios del siglo XX, las personas han tenido experiencias íntimas de fluidez sexual en diferentes épocas y culturas. Según el Informe de LGBTQ para Jóvenes de la Campaña de Derechos Humanos 2018, los jóvenes se identifican como pansexuales ahora más que nunca. Además, señala que la fluidez sexual como la que afecta a la pansexualidad es común en las poblaciones de mayor edad.
Qué significa ser demisexual
Como se sabe, la clasificación de homosexuales y heterosexuales es sólo la pequeña punta de un iceberg cuando se trata de entender y definir las muchas formas en las que se manifiesta la atracción humana. Hay una gran razón por la cual el acrónimo LGBTQIA+ sigue creciendo, y es porque la gente empieza a comprender la compleja fluidez de la sexualidad.
El concepto de demisexualidad, una variación específica —ligeramente más cargada sexualmente— de la asexualidad, se refiere a una persona que no siente atracción sexual hacia otra persona a menos que sienta una fuerte conexión emocional con ella.
La noción de “amor a primera vista” o la química como un golpe instantáneo de dopamina, no existe para quienes se consideran demisexuales. Donde algunas personas pueden sentirse atraídas por la apariencia y el comportamiento de alguien al conocerlas, es muy probable que los demisexuales no queden impresionados.
Para el psicoanalista y ex secretario científico del Claustro de la Asociación Psicoanalítica, Maximiliano Martínez Donaire, “se trata de sujetos que tienen una fuerte inhibición de su deseo sexual a menos que se cumplan determinadas condiciones”. “Aparentemente no experimentan deseo sexual en su vida cotidiana excepto que se dé algún tipo de vínculo emocional intenso con un otro. Recién cuando eso sucede se permiten conscientemente expresar su excitación sexual”, ahondó.
Qué es ser asexual
Aproximadamente el 1% de la población mundial que se identifica como asexual no experimenta atracción sexual hacia ningún género, pero se enamora y puede tener una pareja.
Cuando se habla de diversidad sexual, se suele pensar en muchas identidades diferentes. Se sabe que las personas pueden sentirse atraídas sexualmente por hombres, mujeres y/o personas no binarias. Pero, ¿qué pasa con aquellos que sienten poca o ninguna atracción sexual o romántica? ¿Qué es exactamente la atracción sexual y cómo es pasar la vida sin experimentarla?
Aros y Ases, una organización que reúne a personas que se declaran asexuales y arromanticas, explica que “la asexualidad es una orientación sexual en la que una persona experimenta poca o ninguna atracción sexual hacia alguien y/o no experimenta deseo de contacto sexual”.
Si bien la tipo de atracción sexual “es una parte normal de la vida de muchas personas, este concepto puede ser completamente extraño para las personas que se identifican como asexuales”, agregaron. “Como cualquier otra orientación sexual, la asexualidad no es una elección. A diferencia de la abstinencia y el celibato, que son opciones para evitar el sexo, la asexualidad es una parte innata de quién es alguien”, puntualiza en su web.
Si bien la atracción sexual y romántica van de la mano para algunas personas, muchas personas asexuales experimentan una distinción entre los dos. Es posible que las personas asexuales no experimenten atracción sexual ni sientan impulsos sexuales hacia otras personas, pero algunas aún experimentan sentimientos románticos, como el deseo de intimidad emocional o física. Otro error común sobre la comunidad asexual gira en torno a esta distinción. Mucha gente piensa que los asexuales no quieren tener citas, o que son arromáticos, lo cual es diferente a la asexualidad.
Gino, skolio y omnisexualidad
Otras identidades tal vez menos conocidas, y por fuera de la bisexualidad, homosexualidad y heterosexualidad, son la ginosexualidad, skoliosexualidad y omnisexualidad.
En su blog personal, el psicólogo y escritor Germán Renko desarrolló un glosario sexual, en el que incluyó varios de los términos abordados en esta nota. Además, abordó:
- Ginosexualidad: como contracara de la androginosexualidad, entendida como la atracción sexual hacia los hombres y/o rasgos masculinos —una preferencia sexual que engloba a los hombres homosexuales y a las mujeres heterosexuales—, la ginosexualidad es la “atracción sexual hacia las mujeres y/o rasgos femeninos, preferencia sexual que engloba a los hombres heterosexuales y a las mujeres homosexuales”, definió el especialista.
- Skoliosexualidad: también conocida como ceterosexualidad y escoliosexualidad, según Renko, “es la atracción sexual hacia personas que no se identifican de forma binaria, es decir, personas cuya identidad de género no se identifica con hombre ni con mujer”. Esto es, una orientación sexual caracterizada por la atracción sexual, romántica, emocional o física por personas no binarias y genderqueer.
- Omnisexualidad: por último, el especialista definió a esta identidad sexual como “la atracción sexual hacia todos los géneros y sexos, sin distinción de sexo, ni de identidad de género”.
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