Las caídas pueden llegar a ser un tipo de accidente muy frecuente en la etapa de la vejez. Esto se debe a que aumentan algunos de los factores de riesgos que generan inestabilidad.
La OMS define a la caída como la consecuencia de algún acontecimiento que precipita a la persona mayor al suelo involuntariamente. “Con el envejecimiento, el deterioro de la marcha aumenta progresivamente y puede agravarse por la presencia de enfermedades crónicas. Dentro de los cambios posturales que favorecen la alteración de la marcha se encuentran: la modificación del centro de gravedad, la alteración de la coordinación, los reflejos, el equilibrio y la flexibilidad”, explican a Infobae Julieta Valenzuela y María Laura Martínez Kuhn, licenciadas en Terapia Ocupacional de INECO.
Las caídas son un fenómeno multifactorial, por lo tanto, las intervenciones basadas en la incorporación de ejercicio diario y los ajustes ambientales no solo son la forma más eficaz para reducir caídas en personas mayores de la comunidad sino también de reducir sus posibles consecuencias físicas y psicológicas tales como la inmovilidad y la pérdida de independencia entre otras.
En esta oportunidad, brindaremos algunas sugerencias que ayudan a prevenir caídas recurrentes. De esta forma, la probabilidad de caerse será menor ya que la aplicación de distintas medidas de prevención puede disminuir notablemente su incidencia y sus consecuencias en la calidad de vida de la persona mayor.
En exclusiva para Infobae, Ineco ideo una serie de ejercicios destinados a los adultos mayores.
1. EVITAR EL DESORDEN
Para evitar riesgos de caída, mantener despejadas las zonas por donde se camina de muebles como sillones, mesas, entre otros
2. CALZADO ADECUADO
No es recomendable que sean demasiado pesados, con tacos altos o suelas resbaladizas.
3. MANTENER LOS ESPACIOS ILUMINADOS
Otras opciones son dejar la luz encendida o instalar interruptores de luz al alcance y tanto al inicio como al final de los pasillos.
4. TENER LOS OBJETOS AL ALCANCE
Se recomienda que una vez dispuestos accesiblemente, los mantenga en el mismo sitio y ordenados. También es importante mantener al alcance sus anteojos y los productos de apoyo para trasladarse en el caso que los utilizara ya sea un bastón o andador.
5. TENER ESPECIAL CUIDADO A LA HORA DE BAÑARSE
Antes de bañarse, asegúrese de que se encuentre a mano, la totalidad de los elementos a utilizar.
6. REALIZAR ACTIVIDAD FÍSICA DIARIA
La actividad física colabora en potenciar la fuerza, la resistencia y la flexibilidad así como mejorar los reflejos, la coordinación y el equilibrio, reduciendo el riesgo de caídas.
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