Bordados, paillettes y tejidos artesanales protagonizaron el encuentro de moda más importante del país

Esta semana se realizó una nueva edición del Argentina Fashion Week, uno de los eventos de moda más importante del país. Fueron cinco días a puro glamour donde más de 15 diseñadores argentinos participaron mostrando sus mejores creaciones para el verano 2023.

Como si se tratara de una pequeña muestra de lo que será la próxima temporada de moda, la pasarela estuvo colmada de federalismo argentino, con un interesante número de diseñadores y diseñadoras provenientes de distintos puntos del país que hicieron gala de sus creaciones y dejaron a todos los asistentes asombrados.

Bajo la dirección de Héctor Vidal Rivas, los desfiles se realizaron en el Palacio Paz de la Ciudad de Buenos Aires con una gran puesta en escena. “Me siento muy feliz de haber logrado lo que logramos. Para nosotros fue darle un lugar a los diseñadores de todas las regiones del país. Además de los de Buenos Aires, se presentaron de Santiago del Estero, Córdoba, Jujuy, de Tres Arroyos, Rafaela y trajimos una marca de Brasil”, afirmó en diálogo con Infobae el diseñador y productor de desfiles.

“Creo que la diversidad de las colecciones presentadas, desde la alta costura de siempre hasta las de los nuevos talentos, fue lo más destacable. Por un diseño argentino con identidad y difusión”, concluyó Vidal Rivas, quien es además asesor de imagen de Mirtha Legrand y quien la acompaña a todos los eventos sociales.

Durante la primera jornada de ARFW, mostraron sus diseños “Luxury” Benito Fernández, Marisa Marana, María Pryor, Jorge Rey, Verónica de la Canal, Jean Pierre y Camila Romano.

Con prendas de géneros que fueron desde gasas, lentejuelas, seda hasta el mix de texturas como encajes y broderie, Benito Fernández presentó su colección “Amazónica”, donde las estampas con fondos negros, los colores tierra y los rojos, naranjas y turquesas fueron los protagonistas.

Marisa Marana presentó la colección “Oro”. El dorado en distintos materiales intervenidos por el negro avanzó en las faldas, se asomó en las enaguas y adornó las espaldas. Las prendas estuvieron compuestas por tules bordados en piedras oro, tafetas y piedras; y los vestidos negros, invadidos por el capricho dorado. Y siguiendo las huellas de su universo, con libertad fantasía, en su esencia romántica que siempre está, María Pryor presentó la colección “Espíritu de los tiempos”.

Más adelante, llegó el turno de Jorge Rey. El reconocido diseñador presentó la colección “Lapsus”, inspirada en “los momentos de lapsus mentales donde queda el tiempo para el error y la falla, lo que vuelve todo más enriquecedor y distinto”. Con el clásico volumen que caracteriza a Rey, mostró texturas 3D y cortes cual fallas con dilatación morfológica pronunciada generando puntos de tensión considerables.

Por su parte, Verónica de la Canal deslumbró con su colección “Persuasión. Que nadie te diga cómo vestirte”, inspirada en la forma en que los seres humanos transitamos la moda. Incluyó diseños con personalidad inspirados en una expresión artística en donde cada pieza es única, combinando texturas del hoy con reminiscencias de antaño.

Predominaron los colores pasteles, desde el rosa y el celeste, pasando por el orquídea y el amarillo, hasta llegar al blanco y verde. Respecto a las siluetas, fueron al bies en algunos casos y con mucho volumen en otras. Tampoco faltaron los bordados artesanales y corsets.

En cada elección de estos diseños “se buscó dar seguridad, personalidad y que nadie pueda persuadir a alguien de ser otra persona que no es”, según la propuesta de la creadora.

Jean Pierre Joyeros, la firma de origen francés, presentó un anticipo de su colección. Mostró en cinco tendencias las joyas para esta primavera – verano, cada una con nombre propio. Enigma: exquisitos diamantes negros combinados con brillantes blancos, en original contraste para pulseras, anillos y gargantillas con engarce misterioso.

Pasión y Fuego: rubíes en originales piezas que realzan las piedras preciosas. Naturaleza: piedras multicolores, explosión de colores rosa, amarillo y celeste en collares cortos y largos, combinados con titanio, rodio y oro negro. Llama la atención la pulsera color coñac y amarillo. Una línea de piedras semipreciosas topacio, citrino y amatista.

Capri: colección de piedras duras como malaquita, lapislázuli, cornalina, combinadas con oro y brillantes, la gran moda de esta temporada, y un estilo cargado de pura energía y colores. Por último, Street Style: joyas en oro blanco, rosa y amarillo, piezas que transmiten un espíritu independiente, realizadas para la mujer informal, libre, pues le permite combinar piedras para el día a día.

Como si fuera esto fuera poco, Camila Romano presentó más de 10 creaciones para “mujeres independientes, muy femeninas y que saben lo que quieren”. La diseñadora puso sobre la mesa como cierre de la apertura de Argentina Fashion Week en el Palacio Paz el mundo de las novias, madrinas, y vestidos de noche.

Con una paleta del blanco al negro, pasando por grises, tonos plata y algunos pasteles como el rosa nude, en vestidos largos, faldas con volumen y sin, capas con texturas bordadas a mano, kimonos, géneros en satén de seda natural, tules bordados, shantung y otros bordados en piedras o con aplicaciones de flores en lurex 3D.

Así resumió la diseñadora su trabajo en vestidos hechos completamente a mano, únicos y livianos: “Defino mi estilo como contemporáneo, elegante y muy femenino. Es para una mujer independiente, de todas las edades y cuerpos. Una mujer que sabe lo que quiere. Lo mío es una búsqueda permanente de la belleza que cada una de nosotras tenemos”.

Durante la segunda jornada del Argentina Fashion Week, Maribi, Francisco Ayala, Luis Palacios, Luis Guerra, Ana Tarrasanta y Daniel Herrera presentaron sus trabajos.

Maribi presentó dos colecciones: alta costura llamada Valuviem y pret llamada Rainbow. Ambas representan lo más profundo de la marca con explosión de colores y texturas. Las prendas transmiten libertad, pasión, esfuerzo, alegría. Cada una de las prendas fueron diseñadas como una obra de arte, combinando las mejores técnicas de bordado e intervención.

Francisco Ayala presentó la colección “Impares” con la participación del Ballet Folklórico Nacional y del Estudio de Danzas de Margarita Fernández. En la apertura se vio un inmenso vestido llevado por un grupo de cinco bailarinas que exploraron el espacio y el movimiento de esa prenda de dimensiones fuera de lo común.

Para esta colección el diseñador rescata las siluetas que elaboró en sus últimos trabajos de vestuario. Tal es el caso de la “Silueta Imperio” del vestido que usó Mariquita Sanchez de Thompson en 1813 cuando se entonaran por primera vez las estrofas del Himno Nacional, recreado para el Museo del Cabildo Nacional.

Este vestido, de mangas abullonadas, corte debajo del busto, recto y con muchos pliegues en la espalda en el que utilizó puntillas originales del siglo IXX realizadas en “Encaje Irlandes” es la inspiración para otras versiones más modernas combinadas con pantalones o con recortes que dejan ver mucha piel.

En “Impares”, Ayala continúa su alianza con “Manos Andinas”, un proyecto que combina el diseño textil y el diseño de moda. Esta colaboración tiene por objetivo revalorizar las fibras naturales autóctonas, proponiendo una moda cien por ciento argentina de triple impacto.

Además, continúa trabajando junto a la diseñadora Marisa Camargo en la creación de los tafetanes, gasas, gasas modificadas y jacquards de algodón autóctono que utilizó en esta colección. Ayala creó para los hombres prendas veraniegas como remeras de algodón, sacos de hilo, pantalones faldas y faldas envolventes realizadas en telar.

Otro eje es la colaboración con artistas textiles: junto a Susana Larrambebere continúa explorando el mundo de la iconografía prehispánica y en esta oportunidad incorporan una técnica de bordados de la India llamados “Kantha”.

También se vieron géneros pintados por el artista plástico chaqueño Sergio Falcon que recrean el universo del litoral. En esta colección también se mostraron trabajos realizados con distintos oficios.

El joven y talentoso diseñador Luis Guerra, logró instalarse en la sociedad de Santiago del Estero pero su criterio y creación lo llevaron a hacer producciones fuera de la provincia. Se considera elocuente, clásico y a veces atrevido. Se graduó en el Instituto Roberto Piazza en 2007 y desde entonces no paró con su pasión por la costura. Hizo producciones de fotos en Roma, Italia.

Ana Terrasanta presentó la colección “Methanoia”, inspirada en la Virgen de San Nicolás. Con el abrazo de María hacia nosotros una cosa que pide es la conversión, un cambio rotundo de vida, es decir, un cambio de lo oscuro a lo claro, cambios de colores, cambios de volúmenes. Durante el desfile, también hubo capas que representaron el abrazo de María.

En el tercer día de ARFW presentaron sus diseños Ocantos, Artesanas de Jujuy, Rosarito y Vizzano. Mientras que Rosarito mostró la colección “Indian Nazar”, con la que propuso viajar al amado mundo de color, brillo y magia que India nos regala, Vizzano, la marca brasileña de calzado, representada comercialmente en Argentina por Industrias Versato S.A., mostró cómo su ADN fashion y sustentable conquistó consumidores en más de 95 países.

Con sus coloridos diseños, Rosarito invitó a las personas a combinar y divertirse, vistiendo lo que les haga sentir la misma pasión con la que estas prendas fueron creadas. “Nazar significa visión en India, es adonde nos vemos, esperemos nos acompañen”, indicó.

Zapatos atrevidos, audaces e imponentes definen el statement del nuevo orden estético que invade la moda. Para la pasarela del ARFW, Vizzano creó una curaduría de tendencias haciéndole match a los productos considerados must have fashionistas en las redes sociales, además de materiales y texturas exclusivos, formas sofisticadas y colores llamativos.

El catwalk estuvo formado por cinco bloques. El primero, Alma Vizzano, con las construcciones consagradas de la marca: scarpin, plataforma, deportivo casual, sandalias minimalistas y una reinterpretación contemporánea del slingback. Sexy is Back fue el momento para los calzados en vinilo y transparencia, ofreciendo más piel a la vista en los looks. Maximalismo, con las double platforms que entregan nuevas dimensiones para las sandalias.

Euphoria de los años 90/2000, ahora con una estética bold, trayendo actualizaciones en los volúmenes, contornos y alturas en los tacones, y acabados sofisticados y contemporáneos, evidenciados por el look satinado y metalizado. Para el grand finale fue el momento de Glitzy, una tendencia que se mueve entre los colores metalizados y un efecto holográfico que dialoga con el futurismo, además de la supernovedad de la textura con estampado gradiente, desarrollada en la exclusiva Napa Satín Berlin, que protagoniza desde los deportivos hasta los célebres scarpins de Vizzano, reverenciando la tecnología óptica y digital.

El grupo de mujeres artesanas que conforman Artesanas de Jujuy presentaron sus creaciones autóctonas de la provincia de Jujuy mostrando la riqueza de su cultura.

La prenda protagonista fue el poncho que se presentó en diversos modelos, colores y tamaños y la novedad es que con aptos tanto para mujeres como para varones.

Así mismo, el diseñador Eduardo González Pérez Ocantos exhibió deslumbrantes vestidos de alto impacto visual, basados en cuadros que él mismo pinta y plasma sobre diferentes texturas.

La originalidad, distinción y colores de sus piezas lo caracterizan entre sus pares y lo posicionan entre los elegidos con gran proyección internacional, por sus “impresos” en telas que convierten a sus vestidos en verdaderas obras de arte.

El día 25 de agosto, la anteúltima jornada de ARFW comenzó con una disertación encabezada por Fabián Medina Flores. Luego, fue el momento de los desfiles de Amsoar, Mabby Autino, Carina Spagiari y Iara.

Mabby Autino presentó la colección “Dolls Dreams” en pos de mostrar su arte mediante distintos estereotipos. La inspiración fue la belleza, la explosión del color, lo que trasmite cada uno de ellos, las formas y accesorios que hacen que las personas puedan destacar, lucir y expresar a través de su rostro.

Carina Spaggiari presentó “Evolución”, donde se vieron las nuevas tendencias internacionales para la temporada primavera-verano 22-23. Los diseños estuvieron llenos de colores fuertes e intensos, con muchos brillos y telas con mucho volumen. Se trató de prendas con carácter destinadas a la mujer evolucionada que vive el hoy a todo dar.

El cierre de ARFW estuvo a cargo del diseñador Gustavo Pucheta, quien presentó “Boreal”. La colección se inspiró en el transcurso de una tarde de cosecha de algodón. Partículas de algodón sobrevolando el ambiente, rayos de sol que atraviesan las mismas y desprenden un abanico de colores, predominando los rojizos, verdes y azules.

Esta temporada, apostó por enfatizar en las prendas sastreras y de corsetería, proponiendo un prêt-à-couture sofisticado.

Manteniendo la característica de lo extremo en sus colecciones, en esta oportunidad va desde la mixtura de sacos de siluetas oversize ultra clean en crepes de tonos saturados a sacos de lino natural con apliques de guipur de algodón en texturas tridimensionales, pasando por corsets de brillos hasta llegar a conjuntos de lentejuelas. El drama y el maximalismo característicos de la marca, esta vez están explorados desde los opuestos, con colores plenos y estridentes junto a texturas cargadas en géneros naturales, utilizados en sacos, pantalones, camisas y faldas.

* Fotos: cortesía Argentina Fashion Week

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