El imponente Palacio Errázuriz Alvear, una residencia de estilo francés construida a principios del siglo XX y sede del Museo Nacional de Arte Decorativo, vivió en los últimos tres meses una situación extraordinaria. “Casa Tomada”, la retrospectiva del artista visual y arquitecto Gaspar Libedinsky, fue visitada por más de 200.000 personas, esta cifra marcó un récord histórico de convocatoria que se reflejó en las largas filas para ingresar durante los fines de semana.
Desde el 20 de mayo hasta el 14 de agosto, la muestra, que reunió más de 10 años de producción del artista, propuso un recorrido inmersivo e interactivo por los salones, patios y jardines del museo ubicado en Avenida del Libertador al 1900.
Los materiales que otros consideran de descarte o antiestéticos son fuente de creatividad para Libedinsky. Para esta muestra, le compró a un fabricante 60.000 kilos de cerdas plásticas de escobillones, hechas a partir de botellas recicladas. Ese material dio vida a la instalación Arrecife en El Origen de las Especies, una mega obra que cubrió 400 metros cuadrados del hall del Museo Nacional de Arte Decorativo.
Los visitantes pudieron caminar entre los laberintos de la instalación artística, un efecto buscado intencionalmente por Libedinsky para que el público pueda sumergirse en el arte. La propuesta convocó a público especializado y habitué de las muestras de arte, pero también a muchos jóvenes y familias que fueron atraídos por la forma innovadora de “apropiarse” de los objetos cotidianos y los espacios del museo.
Luego de casi tres meses de exposición, el material plástico del Origen de las Especies volverá a la industria para que se fabriquen 10.000 nuevos escobillones. “Fue petróleo, plástico, botella, entró en el mercado de reciclado para convertirse en cerdas de plástico y tras dos meses volverá a convertirse en escobillones”, describió Libedinsky a Infobae cuando estaba ultimando los detalles de la muestra.
Parte del secreto radica en que, en “Casa Tomada”, los objetos de limpieza (que conforman la mayoría de las obras de Libedinsky) se desplazaron al centro de los magníficos salones. Trapos, escobillones, plumeros, que suelen utilizarse en la conservación de la obras de arte pero que se mantienen ocultos en algún recinto alejado de la exhibición, en esta muestra ocuparon un lugar central. Esa presencia buscó genererar un efecto de extrañamiento en los visitantes, pero además resignifica el mobiliario del palacio.
En la serie Míster Trapo hecha con textiles usados, Libedinsky mostró la tensión entre la elegancia de los uniformes y la rusticidad de los trapos de limpieza. Como explicó el crítico Rodrigo Alonso, “el artista habla aquí de una suerte de “deseo” de éstos últimos por acceder a la sofisticación de los primeros. En todo caso, es su intervención formal la que pone de manifiesto ese deseo, o quizás incluso lo genera, haciendo gala de ese comportamiento lúdico-constructivo”.
Las doce prendas pertenecientes a Míster Trapo se ubicaron en el Salón de Baile del palacio, como doce bailarines dispuestos a comenzar la danza en cuanto se inicie la música, incluyendo e interactuando con el propio espectador.
Sin embargo, sus elecciones no son arbitrarias, son en sí mismas una definición y una toma de postura. Como comprarle las franelas a los trapitos de los semáforos o confeccionar obras con los trajes usados que adquiere en el Ejército de Salvación.
Una nube a Miami
La instalación “Nube”, una de las grandes protagonistas de la muestra de Libedinsky, será adquirida por la desarrolladora inmobiliaria Rosso Development para ser expuesta en el complejo residencial de lujo The Standard Residences en Miami.
“Desembarcar con ‘Nube’ en Miami, donde conviven algunos de los desarrollos inmobiliarios más importantes a la par de un circuito artístico del más alto nivel como Art Basel es sin lugar a dudas un enorme privilegio. Por eso, es un verdadero honor ser convocado por Carlos Rosso para que mi obra sea parte de sus magníficos desarrollos inmobiliarios. Estoy feliz en participar como artista con mi obra en The Standard de Miami”, contó Libedinsky a Infobae.
Los cuadros de Gallardo
En junio de 2020, Libedinsky rompió la selecta barrera del circuito del arte por una situación fortuita: se hizo viral una imagen del director técnico Marcelo Gallardo en una charla virtual del Club Atlético River Plate.
Detrás del entrenador, en la pared del living de su casa, estaban expuestas tres piezas de Libedinsky que formaron parte de la obra Kunstformen der Natur (Formas artísticas de la naturaleza). Los cuadros están hechos con cerdas de plástico de escobillones convertidos en una especie de pinceladas sobre el lienzo, que en este caso es acrílico.
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