La provincia de Córdoba tiene muchas cartas de invitación. Quienes vayan en busca de descanso y recreación saben que lo tienen asegurado en cualquiera de las localidades de sus valles. Del mismo modo, tendrán cientos de actividades los que vayan en busca de turismo aventura, desde un simple trekking hasta vuelos en parapente. Cada cual encontrará su mejor fórmula para pasar las vacaciones, en cualquiera de sus corredores.
El astroturismo está en alza en Córdoba y esta época del año es irresistible para salir a observar estrellas en cielos limpios y plateados. Dormir en un “hotel mil estrellas” es una de las opciones. Se trata de pasar una noche en el Cerro Champaquí, llamado el techo de Córdoba, con una altura de 2790 metros. Se parte desde Yacanto de Calamuchita, un traslado en vehículo lleva hasta cerro Linderos (en el filo de las Sierras Grandes). Allí se preparan las mochilas y se inicia una caminata de 40 minutos de dificultad baja, hasta la cumbre del Champaquí, donde se pasa la noche bajo las estrellas. Entre charlas viajeras, se reconocen las constelaciones y astros. El amanecer es otro momento esperado que se vive a pleno desde lo alto del cerro.
Al pie de Sierras Grandes, otra propuesta similar. Una caminata por la quebrada de San Miguel que insume cinco horas guiada por especialistas en astroturismo. “Es una gran oportunidad para todos aquellos que viven en las ciudades porque les permite recuperar el asombro por el cielo que siempre ha sido parte de la vida de la humanidad”, dicen los anfitriones.
En Capilla del Monte, un refugio con alojamiento del Cerro Uritorco, situado en la cara este, invita a contemplar, en condiciones de completa oscuridad, su cielo estrellado, que obtuvo, según la provincia, el primer certificado en el país para el astroturismo otorgado por la Fundación Internacional Starlight, dependiente de Astrofísica de Canarias. Este título reconoce el espacio por una excelente calidad de cielo.
El senderismo es una de las actividades más entretenidas y de baja dificultad para hacer turismo en Córdoba. Sus típicas sierras, con valles, ríos y lagos invitan a estar en contacto con la naturaleza y emprender largas caminatas. Los adeptos a esta práctica saben que solo se tiene acceso a magníficos paisajes exclusivamente a pie.
La provincia ofrece un calendario de actividades sobre esta actividad tan difundida, con salidas de diferentes grados de dificultad. En Nono, situado en Traslasierra, espera un sendero que bordea un arroyo cuyo recorrido total insume unas 3 horas y media. El sonido del agua y el canto de los pájaros animan el refrescante camino de baja dificultad. En Embalse de Calamuchita hay un sendero corto y muy entretenido para hacer en familia: el embalse La cueva de las brujas, que se hace con guía. El camino es pedregoso, húmedo, se recorre la costa de un lago, se cruza un arroyo y se asciende un cerro con buenas panorámicas de las sierras.
En La Cumbrecita, el cerro de cristal es uno de los puntos más atractivos para hacer un corto trekking. Muchos llegan interesados en las panorámicas, y muchos más por las rocas de cristal de cuarzo que aloja.
Junto con el trekking, tientan excursiones relacionadas al avistamiento de flora y fauna. Una excursión única en su tipo es la del Parque Nacional Quebrada del Condorito. El cóndor anida en este lugar donde puede aprovechar las corrientes térmicas que se generan entre los paredones rocosos para desplegar sus grandes alas. Los mejores lugares para observarlos son el Balcón norte y el Balcón sur.
Los amantes de los vinos también pueden tener una cita en Córdoba. La cultura de la vid se practica en sus valles, donde nacen vinos cada vez de mayor calidad. Cada región tiene su sabor por la diversidad de suelos. Hay viñedos en el norte de la provincia, en las Sierras Chicas, Traslasierra, Calamuchita y Punilla. Entre las cepas se destacan el Malbec, el Cabernet Sauvignon, el Pinot Noir y el Isabella. En total son 18 los establecimientos que reciben con catas y almuerzos maridados. Algunos de estos ofrecen alojamiento.
Las alternativas parecen no tener fin, si la idea es programar un circuito saltando de región en región. Uno muy curioso, invita a recorrer los hoteles históricos. Esta iniciativa busca revalorizar la tradición hotelera cordobesa y redescubrir esos edificios donde comenzó el turismo en la provincia.