En el último tiempo se vio un aumento en la cantidad de consultas en la web con respecto a la posibilidad de irse de la Argentina y probar suerte en otro país. Una de las búsquedas más populares fue la de “¿cómo tramitar la ciudadanía italiana?”.
En medio de la crisis desatada por el COVID-19, una investigación llevada a cabo por la consultora Taquión Research Strategy, junto con las compañías Inclusion y Gestión Aplicada, reveló que el 50,8% de los argentinos ya está pensando en el día después de la cuarentena, y que ocho de cada diez argentinos que tienen la posibilidad de proyectar sus problemas a 10 años, se irían del país si tuvieran las condiciones para hacerlo.
Dario Signorini, presidente de la Circunscripción Consular de Italia en Buenos Aires, en diálogo con Luis Novaresio para Radio La Red, explicó que en la actualidad se han incrementado las solicitudes en distintas embajadas extranjeras radicadas en Argentina. “Hoy se están recibiendo muchas consultas de personas jóvenes. Por lo general esto suele suceder cuando aparece una situación de crisis en medio de una pandemia, que hasta el momento era una tendencia totalmente contraria. La situación socio-económica sumado a lo que está atravesando el planeta, sanitariamente, genera un efecto de querer viajar a Europa o bien para poder contar con la ciudadanía. Hoy se priorizan los turnos para quienes son hijos directos, al menos hasta fin de año”.
De acuerdo a Augusto Ramos, gestor en ciudadanía italiana, las consultas aumentaron notablemente en los últimos días: “Durante los primeros meses del año teníamos dos consultas diarias. Hace un mes que por día atendemos de a ocho a diez personas que tienen dudas sobre cómo iniciar los trámites y si cumplen con los requisitos para pedir una”.
En este sentido, el trámite para obtener la ciudadanía italiana suele ser un proceso que lleva mucho tiempo y del que dependen muchas aristas. “No es lo mismo querer solicitar una ciudadanía siendo hijo de un italiano que aquellos que lo solicitan porque tienen un bisabuelo que nació allí. Todo depende del vínculo”, explicó Ramos.
¿Qué papeles se necesitan para iniciar el trámite? Una vez que la persona reconoce que hay o que hubo una persona de nacionalidad italiana en la familia debe:
- Presentar el acta de nacimiento, original con indicación de paternidad y maternidad, con sello y firma del funcionario. Esta acta se puede pedir directamente a la comuna de Italia por carta, mail o fax. Todas las comunas en Italia cuenta con un sitio web oficial para enviar la solicitud. Esta se puede descargar de la web del Consulado italiano. Allí hay que indicar nombre, apellido y lugar y fecha de nacimiento del ciudadano italiano.
- Acta de matrimonio, si su casamiento fue realizado en Argentina y en el caso de que se haya realizado en Italia y no se ha encontrado una copia del acta, es necesario al menos conocer, el lugar y fecha del matrimonio. En el caso de que se haya divorciado también es necesario presentarla.
- Acta de defunción (si ha fallecido) o DNI válido.
- Certificado de la Cámara Nacional Electoral de Argentina, que es el certificado que atestigua si el ascendiente italiano adquirió la ciudadanía argentina. Este trámite se llama certificado de no renuncia que deja en claro que la persona nunca renunció a su nacionalidad.
“En línea descendiente también es obligatorio presentar las actas que corresponden: de nacimiento, matrimonio, divorcio o disfunción si corresponde”, enfatizó Ramos.
“Todos los documentos deben ser traducidos. En el último tiempo sí recibí más consultas pero lo que más me sorprende es la urgencia de las personas sobre querer adquirirla. Antes quizás se comprendía que es un trámite que suele tardar. Hoy noto más apuro en querer sacar la ciudadanía”, explicó a este medio Mariano Roca, traductor público italiano.
Roca explicó que aquellos que quieren iniciar los trámites de “cero” en este momento manifiestan sus ganas de irse y que muchos incluso, viajaron a Italia para acelerar los trámites desde allí: “Este es un trámite que con mucha suerte tarda al menos 1 año pero hay muchas personas que inician el trámite directamente en Italia. A ellos se les brinda un permiso de estadía hasta conseguir una ciudadanía pero no se les permite trabajar”.
SEGUÍ LEYENDO