El reconocido periodista científico Federico Kukso pasó por el stand de TICMAS en la Feria del Libro y habló sobre su reciente libro "Dinosaurios del Fin del Mundo", que repasa la historia de los dinosaurios hallados en la Argentina y de su trabajo diario en el vasto campo de la ciencia.
Kukso fue entrevistado por Patricio Zunini de TICMAS, una plataforma modular que acompaña estudiantes, docentes e instituciones educativas en la transformación digital mediante un modelo de enseñanza personalizada.
¿Por qué nos interesan tanto los dinosaurios?
Cuando uno sale del país puede enumerar a muchos embajadores argentinos, como Messi, Borges, el Papa Francisco, pero también los dinosaurios son grandes embajadores nuestros. Quizás uno no lo sabe, por estar bombardeado de noticias de nuevos descubrimientos, pero no hay museo natural en el mundo que no tenga un ejemplar argentino exhibido. Nuestro país, junto a EEUU y Mongolia integran los países que más dinosaurios han sido descubiertos. Son la meca de la paleontología.
Inclusive, la Argentina tiene una característica propia que la distingue de otros países: tiene todo tipo de dinosaurios, desde el más antiguo, hasta el más grande como el Patatotitan Mayorum descubierto en Chubut en 2013.
Hay un fenómeno de los dinosaurios que es transcultural y comienza alrededor de los 3 años en chicos y chicas. La fascinación luego fluye por otros canales a medida que se escolarizan. Pero los dinosaurios son la principal puerta de ingreso de los chicos a la ciencia. Inclusive es la primera salida escolar el ir a un museo de ciencias. Allí se le transforma la cara a los chicos. Es posible ver sentimientos y capacidades cognitivas humanas como fascinación, curiosidad, asombro, preguntarse cómo era la Tierra sin los seres humanos, etc.
Tal vez dentro de un millón de años no exista más el hombre en la Tierra. Preguntarse por los dinosaurios es un golpe al ego humano ya que fueron protagonistas de un planeta donde el ser humano no estaba. Nos corre del centro. Los dinosaurios gobernaron la Tierra durante 160 millones de años. Y el ser humano está hace sólo 300.000 años en este planeta. Mi libro se centra en los dinosaurios que habitaron la Argentina.
¿Cómo la evolución generó tamaños tan inmensos?
Hay muchas preguntas sin responder de los dinosaurios, como su color, su apareamiento, etc. En cuanto a su tamaño, debemos recordar que en los orígenes de la Tierra, había menos oxígeno.
Los dinosaurios también fueron grandes porque es una adaptación natural de su defensa. Cuando un organismo es más grande, es más difícil de ser cazado por un depredador. Yo siempre me hago preguntas curiosas como todo lo que tendría que comer ese enorme animal para tener ese cuerpo y las montañas de estiercol que generaría, que luego se fosilizaron. Al estudiar ese excremento, uno puede entender la dieta que tenían, cómo era su sistema digestivo, etc.
La única evidencia que quedó de ellos son los fósiles. Y el material blando no se mantiene tras los millones de años que pasaron. Por eso me gusta llamar a los dinosaurios como obras de arte, representadas por los paleoartistas, que recrean los colores y texturas de su anatomía.
Mi libro se centra en los dinosaurios que habitaron la Argentina. Y tuvo el gran aporte del paleoartista Jorge González, a quien me gusta reivindicarlo cada vez que tengo una oportunidad. Son personas que trabajan en forma conjunta con el paleontólogo.
¿Qué es lo más difícil de contar sobre la vida de los dinosaurios?
Me parece que el concepto de escala temporal es el más difícil de trasladar. Inclusive a los adultos. Pensar en un millón de años, por ejemplo es difícil. Son números abstractos y descomunales.
A mí me fascina de los chicos su fuego de la curiosidad. Y creo que esta curiosidad volcada en los dinosaurios puede alimentar otros aspectos, y debe ser cultivada permanentemente. Hoy con Internet estamos perdiendo la capacidad de asombrarnos por la cantidad de cosas que vemos y muchas veces la realidad es más impresionante que las películas de ciencia ficción.
Hay que romper con el estereotipo masculino del científico y decirle a las más chicas que hay muchas mujeres investigadoras. Tiene que ver con los medios y la reconstrucción mediática del científico y dejar de pensarlo o imaginarlo como el hombre viejo, solitario, asexuado como el estereotipo de Einstein. Quizás la imagen de Stephen Hawking es el estereotipo extremo del científico, con el cuerpo atrofiado y una mente brillante. Es cerebro puro.
O el lugar común al decir 'fuga de cerebros'. ¿Acaso los científicos no son cuerpos también? Son lugares comunes de la comunicación de la ciencia. Pero hoy en la Argentina hay más mujeres científicas que hombres.
Cómo se desmistifica al periodismo científico?
Yo cuando hablo de periodismo científico lo englobo dentro del periodismo cultural. La ciencia está atravesada por la cultura. Yo me especialicé mucho en la historia de la ciencia ficción y encontré que hay una retroalimentación mutua. Los científicos se inspiran mucho en la ciencia ficción. Y muchas de sus ideas provienen de allí. Hay que romper el estereotipo del genio o persona iluminada. Hay que golpear puertas y entrar en los laboratorios para desmitificar al científico. A mí me gusta mucho cuando la ciencia sale del laboratorio y es mostrada a la gente. Es sacarla de su closet. Porque hoy la ciencia convive más que nunca con nosotros. Desde los lentes de contacto que tengo, la lente de la cámara que está grabando, etc.
Me recuerda cuando la gente critica el gasto en el espacio al decir: ´tantos millones gastados en una misión espacial…'. Y lo que no saben es del efecto derrame de toda la investigación desarrollada en la exploración espacial, luego se traslada a la vida común. Por ejemplo el desfibrilador, el GPS, el rayo láser que lee el código de barras de un producto en un supermercado, los jugos sintéticos o el café en polvo.
Hay un vacío de la comunicación científica con la sociedad. Y allí es donde entra la comunicación de la ciencia. Esto tiene que ver con el concepto erróneo del gasto en la ciencia básica como un lujo de la sociedad. Ayer leía que Alemania va a aumentar el gasto en ciencia. Cómo entender estar viviendo en el Siglo XXI sin el concepto del ciencia.
Qué tiene que tener una noticia científica para convertirse en una historia.
A mí me fascina el proceso de descubrimiento de algo. No solo la noticia o novedad en sí mismo. Me gusta saber por ejemplo el fracaso que llevó a un avance. Cuántos años tardó en publicar un paper importante. Mostrar el lado humano y hablar del contexto de la ciencia.
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