El mundo de la moda está en shock. Anna Wintour (68 años), su pluma más influyente, podría dejar la dirección de la edición estadounidense de la revista Vogue.
La británica de los anteojos de sol Chanel y corte de pelo carré está a cargo de "la Biblia internacional de la moda" -un statu quo que ella misma le supo dar- desde 1988.
Hace cinco años asumió un nuevo desafío: la dirección artística del grupo empresario que edita la revista, Condé Nast. Pero por diversos factores las cosas no salieron como se esperaban y la compañía registró pérdidas por más de USD 100 millones anuales.
La crisis financiera le dio fuerza al rumor de su salida en un contexto complejo para la editorial que frente a los problemas decidió cerrar las producciones Teen Vogue, Self , Details y Style.com.
Wintour le dio proyección internacional a Vogue, la convirtió en un negocio rentable con ganancias millonarias en publicidad y logró que estrellas del cine, la música y primeras damas llegasen a su tapa.
Uno de sus mayores logros fue que la moda comenzara a ser considerada una rama del arte. Hasta tal punto lo consiguió, que en 2014 estampó su nombre en el Instituto del Traje de Nueva York, que pasó a llamarse Centro del Traje Anna Wintour.
También le dio impulso a la Fundación CFDA Vogue, que apoya a diseñadores emergentes.
"El diablo viste de Prada", una novela publicada en 2003 por la escritora Lauren Weisberger, define a la perfección la fuerza con la que Wintour influye en la industria de la moda. Si bien utiliza personajes de ficción, se cree que la autora se basó en su experiencia como asistente de Wintour para desarrollar la obra, que año más tarde llegó al cine.
Las paginas de Vogue se nutren del trabajo de reconocidos fotógrafos, editores y diseñadores que proporcionan a la revista una estética visual contundente, en su mayoría potenciados por la misma directora. Mario Testino, Annie Leibovitz, Steven Meisel y David Sims son algunas de sus firmas.
Arriesgada, fue pionera en introducir a una desconocida Naomi Capmbell como parte del September Issue (el ejemplar más importante que introduce las colecciones de cambio de temporada) o a personalidades que no necesariamente estaban vinculadas al ámbito de la moda.
Mientras los expertos predicen que Vogue sin la leyenda viviente de Wintour se encaminará hacia el fracaso, hay antecedentes de reemplazos exitosos de figuras con trayectoria importante.
"Nuclear Wintour", como la denominaron sus colegas por el poder que adquirió incluso en ámbitos que superan a la moda, lideró el cambio de paradigma que atraviesa el periodismo. Así lo describió en un reportaje: "El auge de la tecnología ha cambiado el trabajo de todos, no solo el de nuestro mundo. Evidentemente, para nosotros es fantástico, significa que podemos hablar con los lectores a través de medios muy distintos. Y también es posible hablarle a tu público. Son 24 horas al día y siete días a la semana, pero eso es en parte lo que lo hace tan interesante, y el principal cambio durante los últimos años había una distancia con el lector".
Como parte de esa transformación, Condé inauguró nuevos sitios digitales, como Them, dirigidos a jóvenes LGBTQ; Architectural Digest's Clever y AD Pro, The Hive, y Bon Appétit, todos productos con el impulso de Wintour.
Los nuevos proyectos hacia la comunicación digital potenciaron a la editorial alcanzando cifras altas de audiencia: 122 millones de visitantes únicos en febrero en cada uno de sus espacios, 16% más que el año pasado, según comScore.
Los fuertes rumores del alejamiento, que sacuden al mundo de la moda, fueron tímidamente negados por una fuente anónima de Condé Nast a Page Six, quien primero se hizo eco de la noticia: "Enfáticamente negamos estos rumores", dijo el vocero. Y después hubo silencio.
Se especula que, para darle una salida elegante, la gran directora dejaría Vogue y Condé Nast luego de la boda de su hija Bee Shaffer (30) y con la icónica edición de septiembre de la revista.
Entre los posibles reemplazantes de Wintour suena con fuerza Edward Enninful, actual director de Vogue edición británica, condecorado por la Reina Isabel II por su labor a favor de la diversidad en la industria de la moda. La dirección artística de la editorial no tendría aún un sucesor.
¿Y qué sucederá con Anna Wintour? Los especialistas estiman que podría volver a sus orígenes y liderar el Consejo Británico de la Moda.
Seguí Leyendo: