El origami se originó en China durante el siglo I o II d.C. Es un método que consiste en realizar figuras u objetos con hojas de papel doblándolas sucesivas veces. Comenzó como un arte que se basaba en la imaginación o el simbolismo más que en la realidad. Los pliegues de la figura evocaban el espíritu de un animal, una flor, o un pájaro, en vez de reproducir una copia fiel de estos.
El término procede de los vocablos japoneses "oru", que significa plegar, y "kami", que es papel. En los primeros siglos de su existencia se le llamaba kami por el significado que se había creado para papel. Tiempo después, tomó el nombre de orikata, pero no fue antes de 1880 que se desarrolló la palabra origami.
Flavia Kerling de Monart Deco explicó que la occidentalización de este método deco fue adaptándose poco a poco a las distintas regiones. En España se internalizó de tal forma que asignaron el vocablo papiroflexia al arte geométrico de hacer plegados para figuras de papel.
Hay referencias fidedignas sobre el origami en el siglo XIX en toda Europa. El Museo Nacional de Alemania y el Museo de Arte Tradicional Sajón tienen piezas plegadas de caballos y jinetes realizadas alrededor de 1810. Hacia mediados del siglo XIX, Friedrich Fröbel creó en ese país el primer jardín de infancia con un sistema que incluía ocupaciones entre las que se contaba el origami, al que categorizaba como forma de vida. Además enseñaban geometría elemental con esta técnica.
"Las fuentes japonesas incluyen muy pocos modelos europeos de esa época. Lo cierto es que no se conoce el origen específico, pero se lo relaciona con los certificados de bautismo de los siglos XVI y XVII que se plegaban con lo que hoy llamamos base de molino de viento", dijo.
En nuestro país y en distintas partes del mundo, ya es una marca registrada y distintos especialistas se encargan de brindar cursos y talleres para aprender un poco más. La idea es poder hacerlos en casa y poder decorar los distintos ambientes con un presupuesto mínimo ya que el principal material es papel.
Este elemento puede ser de diferentes gramajes dependiendo del tipo de origami que se quiera realizar. "Si querés plegar mandalas para decorar una ventana, se debería usar uno que permita el paso de la la luz. Si preferimos que sea modular, nos convendría usar láminas de mayor espesor", explicó Flavia Kerling.
4 tips para hacer un origami en casa
– Usar papel de un tamaño de 15×15 cm (puede ser algún papel de origami o cartulina)
– El doblez debe realizarse en una superficie lisa, sólida y bien iluminada
– Es importante marcar bien los pliegues, respetando la figura original para que quede lo más armada posible
– Mantener las manos limpias para no ensuciar los materiales
– La práctica hace que los origami queden bien terminados, por eso es importante tener paciencia.
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