A los maestros de The Boarding Schools Association (BSA, su sigla en inglés), institución educativa ubicada en Londres, Gran Bretaña, se les pidió referirse a los niños transgénero de una forma diferente: "zie", en lugar de él o ella (he o she en inglés), para evitar herir a los estudiantes o simplemente que ellos no sean llamados de una forma que no desean. Zie es un derivado de sie, palabra alemana que significa "ellos".
La finalidad de la idea es crear un nuevo lenguaje que evite la discriminación e incluya a los alumnos que tomen esta decisión. También, se centra en que los maestros recorran con tranquilidad el camino de la identidad de género y se ocupen de que aquellos niños y adolescentes trans no reciban pronombres -masculinos o femeninos- que puedan afectarlos en un futuro.
Alex Thompson, director general adjunto de la BSA, explicó que "los maestros, jefes y subjefes de la institución estaban haciendo preguntas acerca de estos temas, desconociendo qué era lo políticamente correcto. Tenían temor de ofender a los jóvenes de entre 13 y 18 años con algunos cuestionamientos acerca de la identidad de género".
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— infobae (@infobae) 3 de agosto de 2016
"Hubo una fuerte comprensión -evidente y directa- cuando alguien hizo pública su homosexualidad, pero no en aquella zona en donde los jóvenes se preguntan '¿quién soy yo?' a un miembro del personal educativo. Son las preguntas que nunca se habían hecho antes", dijo Thompson, quien agregó: "Es increíble lo complicado que resulta todo esto en una comunidad que ha aceptado normas muy conservadoras desde hace muchos años".
A los maestros en Gran Bretaña se les solicitó que dejaran de llamar a los alumnos como niños o niñas. En cambio, fueron instruidos para que usen términos neutros como estudiantes. De esta forma se evita la discriminación.
También se les prohibió la palabra “señoritas” y le han recomendado a las escuelas que creen baños unisex.
Caroline Jordan, administradora de la Universidad de Oxford -también en Reino Unido- respaldó este tipo de medidas, asegurando que "afectan a un número de creciente de jóvenes que cuestionan su identidad. Son decisiones que deberían extenderse a todo el mundo".
En las asambleas, en lugar de decir "niñas, ir a clases", el personal deberá decir "alumnos, ir a clases" o "estudiantes, ir a clases". "Mi opinión es que se debe utilizar un lenguaje neutro sobre la gente y más referido a este tema", sostuvo Jordan.
Algunas escuelas ya han introducido los uniformes de género neutro, incluyendo la Universidad de Brighton, perteneciente al sector privado, y otros 80 centros públicos. Si bien es un parámetro chico -dado que solo se ha puesto en práctica en Reino Unido- es una buena iniciativa para que otros países se sumen a este tipo de medidas.
Otras entidades educativas han tomado la decisión de permitir que los niños trans puedan llevar una falda, chaleco y blusa de cuello abierto. Respecto a las niñas, camisa, saco, corbata y pantalones largos.