Al igual que en todas las emisiones del histórico Almorzando con Mirtha Legrand, durante el programa de este domingo la diva habló con sus invitados de sus historias personales, además de debatir sobre diferentes temáticas vinculadas a la actualidad, a tan solo una semana de las elecciones presidenciales.
Pero en esta ocasión, el humor fue el condimento especial de la mesa de La Chiqui, que contó con la modelo Alejandra Maglietti, los humoristas Roberto Moldavsky y Malena Guinzburg, el periodista Osvaldo Bazán y Paola Stello, mamá de Justina Lo Cane, la niña fallecida en 2017, cuyo caso impulsó la llamada “Ley Justina”.
El final del programa, como ocurre desde hace ya varias semanas, estuvo dedicado a la música. Donald se hizo presente para cantar algunos de sus más destacados hits. La idea original era que tanto la Chiqui como sus invitados disfrutaran de la presencia del cantante sentados en sus sillas, acompañando, tal vez, con algunas palmas.
Nada de eso ocurrió. Los invitados le pusieron todo su humor al almuerzo y se levantaron para bailar “Las olas y el viento”. Todos se ubicaron detrás de la diva y cantaron y bailaron, como si no estuviesen al aire.
Mirtha se quedó sentada y disfrutó de las desopilantes ocurrencias de los invitados. Cantó con ellos, aplaudió, rió y hasta se agarró la cabeza, sin poder creer lo que estaba sucediendo.
“¡Como me han hecho reír, chicos!”, les dijo. Y agregó: “En este almuerzo de hoy ocurrieron dos cosas que nunca en los años que hago televisión han ocurrido: que los invitados se pongan a bailar y que alguno pida aceite. Me encantó que bailaran”.
Sus agasajados terminaron casi sin aire, cansados por haber bailado la música de Donald. “No damos más”, confesó Malena. Moldavsky acotó: “¿Viste que después del postre hay una tanda de baile? Ahora tendría que venir la mesa dulce”. Y Bazán concluyó: “Ahora que Mirtha tire el ramo”.
En el comienzo de la emisión, además, la diva fue sorprendida por la producción con un llamado de su hija, Marcela Tinayre, quien la saludó por el Día de la Madre.
“Feliz día, mamita. Te estoy escuchando vendiendo todos los avisos, obras, hay de todo. ¿Cómo estás mamita querida? ¡Feliz día!”, le dijo Tinayre. Todo siguió muy ameno y la conductora cerró: “Nos vemos más tarde, ¿no? Mirá que te espero”.
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