Simona le confesó su amor a Romeo: "Siempre me gustaste"

Desilusionada al enterarse que se va a casar con Lula, la protagonista de la tira se sinceró con el personaje encarnado por Gastón Soffritti, luego de que éste le preguntara por su reacción cuando supo que iba a contraer matrimonio

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Desde que comenzó la tira, quedó bien en claro el amor de Simona por Romeo. Y, si bien había guardado silencio hasta ahora, el anuncio del casamiento del personaje de Gastón Soffritti con Lula motivó que la protagonista de la ficción de El Trece le confesara sus sentimientos.

"¿Podemos hablar un segundo?", le pregunta él

"¿De qué?", le responde ella.

"De tu reacción, cuando te enteraste que me iba a casar", le dice Romeo.

"Sí, no estuve muy amable, me tomó por sorpresa", reconoce ella.

"A todos", se sincera él.

"¿A vos también?", indaga Simona.

"Sí, a mí también. Cuando lo vi a Dante en terapia sentí que no me tenía que interponer nunca más en la felicidad de ninguna persona. No sé, creo que cuando te pasa algo así, cuando tenés a una persona muy querida que está a punto de desaparecer, todo cambia ¿no?, te das cuenta que de un segundo para el otro todo puede terminar, y tenés que vivir, ser feliz, buscar esa felicidad, no esperar que suceda", le confiesa Romeo.

"¿Te querés casar con ella, estás enamorado de Lula?", le pregunta el personaje de Ángela Torres.

"Sí, estoy enamorado", le dice él, ante lo cual ella se levanta y empieza a irse.

"Pará, pará, ey, qué pasa, pará. Ey, escuchame, ¿qué te pasa?", la frena Romeo.

"No me hace feliz que te vayas a casar con Lula", se sincera Simona.

"¿Por qué?", le pregunta Romeo.

"Romeo, ¿qué querés que te diga, que siempre me gustaste?, sí, siempre me gustaste. Cuando éramos chiquitos y jugábamos juntos, me gustabas", le confiesa ella.

"¿Y por qué no me lo dijiste antes?", le dice él.

"Porque no me ibas a dar bola. Yo ya sabía que veníamos de mundos distintos. No sé, pensaba que si te decía te ibas a reír de mí", expresó.

"No, no me iba a reír de vos, a mí también me gustabas, eras linda, eras divertida, eras inteligente. Me acuerdo que Rosa te traía y nos poníamos a jugar, hacíamos un quil… terrible", le dice él, para luego despedirse y darle un beso en la mejilla, mientras ella se quedó llorando por su amor.

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