Fue en el primer programa de La noche de Mirtha, por El Trece. Juana Viale volvía con el ciclo nocturno de los sábados, siempre en reemplazo de su abuela, y sorprendió con una declaración inédita. “Les quiero contar que perdí el celular hace tres meses”, apuntó la nieta de la diva de los almuerzos mientras sus invitados debatían en relación al uso abusivo de las redes sociales. “Sí, estoy sin celular”, contestó ante la mirada absorta de Darío Barassi, Diego Leuco y Matías Martin, que con Martín Bossi habían sido invitados al programa.
“¡Estás loca, Juana!”, aseguró Barassi, que se definió adicto a las redes sociales. “No. Soy mucho más feliz”, contestó la conductora. Y dispuesta a desarrollar el concepto amplió: “Se me extravió y ahora toda la producción que trabaja conmigo está a punto de una crisis de nervios”. Entonces Matías Martin, con ironía apuntó: “Pero venden, ¿no te compraste otro?” Y ella respondió: “No, no… Si vuelvo, tengo muchas ganas de volver al sapito. Ese que es solamente teléfono”. E hizo una mímica con las manos para referirse a los teléfonos que se usaban hace veinte años, con tapita plegable, conocidos como startac.
“¿Cómo te comunicás?”, quiso saber Barassi. “Mis redes sociales me las maneja mi hija, que está trabajando conmigo. No contesta los mensajes porque dice que son míos. Entonces eso lo tengo que hacer yo. No los lee”, apuntó Juana en relación a Ámbar de Benedictis, su hija de 18 años. “Y después, uso el teléfono de línea que tengo en casa. Mail…”, agregó Juana Viale. Y reflexionó: “Hay vida”, ante la sorpresa de quienes la rodeaban.
“¿Los que trabajan con vos sí lo sufren?”, preguntó Diego Leuco. “Mi hermano me dice: ‘¡No va más no tener teléfono!’”, contó imitando el tono de reto de Nacho Viale, productor de los programas de su abuela. “El otro día estaba volviendo de hacer algo y si hubiera tenido teléfono no podía contestar porque estaba manejando. Y llego y eran mails… Porque ahora los mails son mensajes... El asunto del mail es un mensaje en mi casilla de correo”, ahondó para explicar cómo se organiza para estar comunicada en los tiempos que corren. “Es vida. Yo la paso, real, mucho mejor. Y me doy cuenta, por la observación de no tener teléfono, el consumo de teléfono en el otro. Te llama mucho más la atención”, aseguró Juana Viale antes de que Matías Martin la desafíe: “Acabás de empezar. Te quiero ver a mitad de año”. Y la conductora insistió: “Yo estoy subsistiendo bien… El resto no. Pero bueno… Me hace feliz”.
En relación a su rol en la conducción de la mesa de Mirtha, antes del estreno Juana le contó a Teleshow: “Es necesario innovar: el público lo fue pidiendo. Tuve la suerte de poder tomarme vacaciones este verano y viajar por Argentina, y la devolución del público... No tenía dimensión de lo que se ve el programa. Realmente lo digo. Siempre fui una persona a la que reconocían, pero fui a pueblitos muy extraños, de cantidad de gente, y un amor... No tengo palabras para agradecer: mucha gente diciendo que fui una compañía en estas épocas de encierro, de cuarentena. Esto del programa le da una dinámica, no sé si fue mi sello o ayuda de los invitados, que permite que sucedan cambios. Así que sí, una vuelta de tuerca”.
Y en ese entones agregó: “Me gustaría que sea un programa completamente abierto: es necesario escuchar todas las voces, no quedarse con una campana de nada. Las elecciones son un puntapié para que se animen a sentarse varios que no se han sentado; estoy expectante. La segunda ola es incertidumbre: todos estamos un poco mirando lo que está pasando en otros lugares. Pero me llena de desafíos y de expectativas”.
SEGUIR LEYENDO: