Hace unas semanas, un deterioro en el delicado estado de salud de Camila Perissé tomó la atención del mundo del espectáculo. La querida actriz de 69 años, fue internada en un estado desesperante en el hospital de Pergamino, con un cuadro de deshidratación, pesando solo 42 kilos y en un contexto de grandes dificultades económicas. “Se le va la cabeza. Ni siquiera vino a verla un psiquiatra”, le dijo a Teleshow su marido, Julio “El Chino” Fernández, desde el hospital en un conmovedor pedido de ayuda.
En Nosotros a la mañana (El Trece) hoy difundieron un video de la actriz grabado en el hospital de Pergamino, en la que se la ve con buen estado de ánimo y donde anuncia que continuará con su internación en Mar del Plata, su ciudad natal. “Muchas gracias por la súper ayuda, pronto nos vamos a ver en mi ciudad, para ver el tratamiento que me está esperando. No va a ser fácil para mí, estamos pasando un momento muy difícil, pero lo voy a hacer”, relató.
En el programa conducido por el Pollo Álvarez, se comunicaron con el Chino Fernández, que se manifestó optimista a pesar de las dificultades por las que atraviesa su mujer. “Camila es una persona con una cabeza tremenda y su cerebro es su parte más poderosa. Está agotada, pero yo estoy convencido de que va a mejorar, no sé si en un cien por cien, pero va a volver a subir al escenario y va a dar batalla”, señaló.
Internada desde el 11 de marzo en Pergamino, la actriz continuará con su tratamiento en el mismo lugar en el que se encuentra internada Lía Crucet, con quien la une una amistad de larga data. A pedido del periodista Carlos Monti, el Chino relató una anécdota de cuando su esposa coincidió con la cantante en un teatro de revistas. “Sos muy linda, hace poco que empezaste sos inteligente, pero para ellos, los que manejan los hilos, vas a ser una puta”, reveló.
A partir de entonces, el hombre contó la dura historia de vida de Perissé que se remontaba a su niñez, que había sido violada por un hombre cercano a su familia y ella había convivido con ese dolor, atemorizada y sin poder hacerlo público. También, perdió a sus padres siendo muy chica, lo que la afectó profundamente. También se refirió al motivo por el cual su esposa se fue alejando de los primeros planos del mundo del espectáculo, que la tuvo como una de sus luminarias durante los años ‘80. “A Camila se le cerraron las puertas en muchos canales”, señaló Fernández.
“¿Dejó de trabajar porque ella tenía que conceder determinadas cuestiones?”, preguntó Monti y el Chino fue tajante: “Acostarse directamente, y fue prohibida en Aries, teniendo un contrato por cinco años, por un señor que era un hijo de mil putas que ya no está, Jorge Porcel. Y me hago cargo”, afirmó Fernández, que tuvo palabras elogiosas para el otro gran capocómico de la productora, Alberto Olmedo.
“Era un señor, la otra cara de lo que tiene que ser un ser humano. Lo llamabas a las tres, cuatro de la mañana y te preguntaba si necesitabas algo”, dijo en relación al rosarino. En ese momento, la periodista Karina Iavícoli le preguntó si otras actrices habían aceptado la propuesta que Camila rechazó. “Por eso han continuado y están trabajando todavía”; sentenció.
Perissé y Fernández vivieron un tiempo en el exterior hasta que se radicaron en Mariano Benítez, a 30 kilómetros de Pergamino. Alejados de las grandes marquesinas, pero sin perder el pulso artístico, montaron un pequeño espectáculo en el que él cantaba cantos y ella recitaba cuentos. Desde mediados del año pasado, su salud se fue deteriorando, como le había manifestado el Chino a Teleshow: “Tuvieron que hacerle cuatro operaciones, dos de ingle, después de cadera y de fémur. Estuvo tres meses en silla de ruedas. El peor error fue tratarla como si tuviera un fibromialgia y darle una medicación que he hizo pésimo. Encima se agarró coronavirus que derivó en una neumonía y eso la terminó de destruir”, afirmó.
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