Un día de playa en la noche de Masterchef Celebrity. La magia de la televisión todo lo puede y en el certamen gastronómico de Telefé eligieron ambientar el estudio con una temática acorde para despedir el verano. El jueves de última chance cobró forma de Masterchef Beach, y los participantes se disputaron el único lugar en el balcón con un desafío especial: preparar un menú playero según su voluntad y su inspiración.
Previamente, los siete peores cocineros de la semana -las actrices Claudia Fontán, Cande Vetrano, Andrea Rincón y Georgina Barbarossa, las conductoras Sol Pérez y Flavia Palmiero y el mediático Alex Caniggia- se midieron en un duelo sobre la arena: el clásico tejo, actividad infaltable en cada veraneo. El hijo de Claudio Paul y Mariana Nannis picó en punta, y cuando llegó su turno, Georgina se acercó confiada en su experiencia en el juego. Tomó su tejo color azul y se preparó para el lanzamiento, pero el destino no fue el esperado: impactó entre el conductor Santiago del Moro y uno de los jurados, Germán Martitegui, y recorrió el estrado hasta que pudo ser alcanzado por el chef Donato De Santis.
“Casi muere Hitman”, se impactó Alex Caniggia. “Casi lo mato a Martitegui”, corroboró la culpable mientras que el estudio se recuperaba de las carcajadas y pasaba a disparar las teorías más desopilantes. “Para mí lo hizo a propósito”, señaló el jurado italiano. “Agresión al árbitro”, alegó el supuesto damnificado, mientras Georgina clamaba por otra oportunidad ante un inflexible del Moro. “Para mí, de la bronca de las devoluciones, le quiso dar”, sumó su opinión el hermano de Charlotte desde el back.
Cuando le volvió a tocar a Georgina, los jurados tomaron precauciones: se corrieron unos metros atrás del estrado y tanto Donato como Germán buscaron protección en su colega Damián Betular. A pesar de su técnica poco ortodoxa, esta vez el tiro de la ex Movete tuvo mucha mejor puntería y, aunque quedó lejos del objetivo, al menos logró dejar el tejo en la pista y mantener a salvo la integridad física de todos sus compañeros.
En la segunda ronda del juego, los participantes fueron mejorando la puntería y arrimando con mayor pericia sus tejos. A pesar de sus esfuerzos por trasmitir mala energía, Alex había perdido la delantera a manos de Andrea Rincón. Para colmo, su tejo color rojo recibió la ayuda involuntaria de los otros participantes, que fueron empujándola hacia la victoria. El festejo de la ex Gran Hermano fue elocuente: lejos de las medallas y los balcones, era su primer logro en su aventura de Masterchef Celebrity. No era para despreciar, por supuesto, pero tampoco iba a ser el premio que esperaba.
Una vez terminado el juego, los concursantes volvieron a sus estaciones para escuchar la consigna del día. El encargado de anunciarlo fue Martitegui, sin secuelas aparentes de la “agresión” de Georgina. El exigente chef informó que el objetivo del día era que prepararan “el mejor plato de playa de la historia”. Pero, se sabe, siempre hay una dificultad extra en Masterchef, y en este caso, el agregado cobró forma de los tradicionales cornalitos fritos que debían acompañar con una salsa de mayonesa.
Claro que había una participante exceptuada de esta segunda consigna y no era otra que la ganadora del tejo. Andrea Rincón recibió la notica con menos entusiasmo del esperado. “Okey”, atinó a responder, con una cara de circunstancia que se encargó de explicar en el backstage: “La verdad es que yo quería el balcón. Así que el beneficio que se lo metan en el ...”, señaló entre risas.
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