En un especial de la Televisión Pública conducido por Gastón Pauls, Dos solos, Ricardo Darín se abrió como nunca y contó detalles de su vida y su carrera profesional. Con la confianza que les dio haber trabajado juntos en Nueve Reinas, la entrevista fluyó al punto de que el actor de El secreto de sus ojos terminó revelando la charla que tuvo con su hijo cuando éste le dijo que quería seguir su profesión.
“Lo hemos hablado bastante con él, es pesado, yo lo sé, lo peor que le puede pasar a un chico es tener un padre conocido y todos aquellos que viven esa situación deberían prestarle atención a lo que ocurre con los chicos, porque hay cosas que son difíciles de digerir. Él tiene a su favor el hecho de que desde muy chiquitito hemos ido hablando de estas cosas”, comenzó relatando el padre del Chino Darín.
Y agregó: “El día que él me confesó que quería ser actor, que fue un día a la madrugada en la cocina de casa, estaba perfilando para un lado totalmente distinto. Reaccioné haciéndole honor al viejo axioma de que cuando llega el momento en que somos padres y nosotros creíamos que íbamos a hacer todo lo contrario de lo que hacen nuestros padres con nosotros, en ese preciso momento hacemos exactamente lo mismo que hicieron con nosotros. Él me lo planteó en un momento de desazón e incertidumbre profesional. Me dijo: ´¿Qué opinarías si yo te dijera que quiero ser actor?´ Yo lo veía un poco venir, pero le dije: ´Qué opinaría yo es lo de menos, yo creo que lo importante es que vos vivas la experiencia de investigar en vos mismo y saber si es eso lo que querés hacer, peor no te pongas presiones, no te obligues a ser actor”.
En otro tramo de la charla, el actor también habló justamente de las presiones de ser una figura consagrada. “Hay que aprender a convivir con las cosas como se presentan y cómo se van dando. Yo tuve mucha suerte, aunque pareciera que es un gesto de falsa modestia. No estoy diciendo que no trabajé, y que no he respondido a ciertas expectativas y no me he esforzado“. Y continuó: “Me gusta la movilidad, disfruto de sacar o intentar sacarme motes de encima porque nosotros nos tenemos que plantear desafíos permanentemente para hacer algo por nosotros. No me gusta ser considerado un fenómeno porque no lo soy y está lejos de adularme. Entiendo que la intención no es ofenderme pero las exageraciones, como los fanatismos, tienden a producirme cierto rechazo”, señaló.
Por otra parte, el actor contó cómo fue la experiencia de grabar Nueve Reinas con Pauls.“Teníamos entre manos un organismo casi de relojería, teníamos un guión sólido y pulido a través del tiempo que tuvo Fabián Bielinsky tan craneado, tan pensado, que nosotros teníamos la única responsabilidad de ser esos dos elementos que entraban a jugar en ese tablero”, dijo.
En esa línea, contó la estrategia que utilizaban para llevar a cabo sus personajes. “El juego era que estos tipos que no se conocen, en veinticuatro horas se sorprendan con las cosas que se van presentando. Ese era el juego, y yo creo que los que nos pasó a nosotros dos personalmente en ese trabajo, fue que utilizamos todos los tiempos fuera de cámara para agilizar la fluidez entre vos y yo. Y eso se trasladó económicamente a la pantalla, porque no hicimos de amigos, precisamente, hicimos de dos tipos que no eran amigos. Y nos funcionó muy bien esa técnica: alejarse lo más posible del texto para permitir hacer creer al espectador que lo que estoy pensando lo hago por primera vez, nunca lo leí antes”.
Por último, se refirió a los premios que cosechó a lo largo de toda su carrera como intérprete, pero les restó importancia al considerarlos “polémicos”, ya que desde su mirada lo que realmente importa es la opinión del espectador.
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