Ornella D’ Elia tenía 12 años cuando, sin saberlo, su vida cambiaría para siempre. Por aquel entonces practicaba remo en un club de Tigre, y como se había llevado varias materias, sus padres la castigaron y no la habían dejado ir a entrenar para que se quedara estudiando en su casa. Sin embargo, no perdió el contacto con las autoridades de la institución, quienes un día llamaron por teléfono para comunicarle a sus padres que se filmaría una película en las instalaciones y que habían convocado a todos los socios a un casting.
“Yo no quería ir por el proyecto, sino para salir de mi casa y poder reencontrarme con mis amigos”, recuerda hoy, a sus 17 años, Ornella a Teleshow. Sin conocimientos previos de la actuación, la niña se presentó a la audición con el pelo recogido -”no me sacaba la colita ni para bañarme”, enfatiza-, mientras que “todas las chicas estaban divinas, con el pelo suelto”.
Al momento de presentarse frente a cámara, el director le preguntó si podía quitársela. “No, no puedo. No quiero”, respondió ella. Dicha actitud, piensa, fue la que hizo que quedara seleccionada. “No sé qué vieron, porque fui cero simpática”, continúa quien considera que debutó como actriz “de pura casualidad”.
Así, casi sin querer, comenzó su carrera profesional. Por ese entonces, D’ Elia siquiera se había planteado lo que quería para su futuro. Una vez que comenzó a prepararse para la película se entusiasmó cada vez más, y gracias al trabajo de su coach actoral, le dijo a sus padres que quería seguir formándose en su costado artístico. “Ellos siempre me bancaron, y si algo me hace feliz, me dicen que siga para adelante”.
Ornella, que nació en Mar del Plata pero a los dos años se mudó junto con su familia a Buenos Aires, acaba de terminar el secundario y destaca que la cuarentena por la pandemia del coronavirus la ayudó a hacerlo de manera virtual. “Hace dos o tres años venía llevándome todas las materias porque faltaba mucho por mi trabajo. Y cuando empezó este año me había planteado hacerlo por Internet”, cuenta quien quiere estudiar la carrera de cine. “Pero 2021 lo quiero enfocar en mi carrera”, aclara quien ya tiene varios proyectos para el año que viene.
Después de aquel debut, la joven decidió que quería dedicarse a la actuación, y comenzó a tomar clases mientras cursaba en un colegio orientado a lo artístico. Con el tiempo fue recibiendo nuevas convocatorias, participó de cortos, integró Cast, un semillero de artistas impulsado por Telefe, y grabó un piloto con Gastón Pauls para Netflix, proyecto que aún no se pudo realizar.
A los 14 años se presentó a la audición de Los sonámbulos, tiempo después recibió su mejor regalo de 15: había quedado seleccionada y compartiría elenco con Érica Rivas y Luis Ziembrowski. Dos meses y medio después, ya estaba filmando la película que, sin saberlo, representará a la Argentina en los Oscar 2021. “Marcó un antes y un después. Todavía no puedo creer lo que estoy viviendo”, admite la joven que el 11, 18 y 22 de diciembre presenta Instrucciones para enseñarle a volar a mi elefante rosa en una sala al aire libre del Centro Cultural San Martín.
Atrás quedó esa Ornella que un día se asustó cuando su madre la llevó a un casting de una publicidad de papel higiénico. ”Salí corriendo cuando tiraron burbujas”. Hoy, con 17 años, está segura de lo que quiere para su futuro. “La profesión me buscó a mí. Cuando uno queda en un proyecto, uno no elige el personaje, el personaje te elige a vos”, considera.
“Lo mío fue súper de casualidad. Yo no forcé nada. Si las cosas se tienen que dar, se van a dar. Y voy a seguir por ese camino”, agrega Ornella D’ Elia, quien tiene un futuro prometedor como actriz y no descarta la posibilidad de ir a trabajar al exterior. “Me gustaría irme con algún proyecto, no a probar suerte”, dice y sostiene que ya está trabajando para ello: realizó castings y espera que la pandemia del coronavirus le permita viajar cuando surja algún proyecto.
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