Después de un año complicado, y durante sus primeras vacaciones tras el período de aislamiento obligatorio por la pandemia, Luli Fernández contó que ella y su familia tuvieron coronavirus. La modelo relató que tanto ella como su marido, el abogado Cristian Cúneo Libarona, y el pequeño Indalecio, su hijo de un año y medio, contrajeron el virus durante el mes de agosto, y resolvieron mantenerlo en secreto. Hasta que ahora, en medio de su estadía en Río de Janeiro, Luli decidió contarlo en las redes sociales.
La modelo lo hizo público durante una serie de historias que publicó en su perfil de Instagram. Primero, publicó una imagen de la familia en Ipanema, con un texto en el que anunciaba haber contraído el virus. “Aunque esté a punto de largarse la tormenta del año este, trío dinamita encaró la playa. Como les dije, el tapaboca no es obligatorio acá. Aunque nunca lo hice público, Cristian, Indalecio y yo tuvimos COVID-19 en el mes de agosto. Antes de viajar nos hicimos el análisis para saber si teníamos anticuerpos y por suerte dio que si. Efectivamente desarrollamos anticuerpos contra la enfermedad. Con la tranquilidad de ese estudio, encaramos una nueva aventura”, destacó Luli, en una imagen en los que se veía a su marido y su hijo con la playa de fondo.
La noticia causó revuelo entre su más de un millón de seguidores, que se sorprendieron por la revelación y se mostraron preocupados por la salud de la modelo. Para llevar tranquilidad, y de paso informar de su experiencia en los protocolos para viajar al exterior, la conductora de Paladares publicó una serie de historias y fotografías en los que contaba su situación. “El estudio de anticuerpos que compartí en historias fue para mi tranquilidad, porque transité mi enfermedad en agosto y saber que tenés anticuerpos te hace viajar con cierta tranquilidad, aunque, como todos, el temor y la angustia que todo esto genera hace que estemos atentos y súper cuidadosos”, escribió junto a un mini álbum familiar de la familia en las playas cariocas.
La modelo y el abogado se conocieron de casualidad. Recomendada por el periodista Jorge Rial, la modelo fue al estudio de abogados de su actual esposo por una consulta particular: porque a su mamá la habían echado del trabajo. “Cuando lo vi dije: ‘¡Qué bombón!’”, contó este año durante su paso por PH, Podemos hablar. Allí contó que ambos empezaron a intercambiar mails hasta que se enamoraron. Finalmente, se casaron en 2014 en una ceremonia inolvidable y fruto de ese amor, en marzo de 2019, nació Indalecio.
Más allá de la pandemia y el contagio, fue un año difícil para la modelo y su familia. En abril, una banda de ladrones armados ingresó a su domicilio de Villa de Mayo, en el partido de Malvinas Argentinas, en horas del mediodía. Los delincuentes encañonaron a ella y a su marido y amenazaron con llevarse al pequeño Indalecio.
En lo laboral también fue un año movido para la conductora. En marzo, en simultáneo con el inicio de la primera etapa del aislamiento, llegó el fin de Incorrectas, el magazine que conducía Moria Casán en America TV y en el que ella oficiaba de co-conductora. Al tiempo, Luli se incorporó a Fantino a la tarde, en la misma señal, pero renunció al poco tiempo por una restructuración del programa. “Quedaba relegada, me quedaba sólo la parte de los tuits y todas estas cosas, que no tiene nada de malo, pero que era distinto de lo que me habían convocado inicialmente para hacer. No era lo que quería hacer ni era para lo que me habían llamado”, contó durante su participación en PH.
A finales de agosto, Luli fue elegida para la tanda de reemplazos de Mujeres de El Trece, el magazine que se emitió por el canal de Constitución, y que fue noticia por los supuestos conflictos entre las conductoras, como por los casos de coronavirus que obligaron a reestructurar el ciclo, que duró menos de dos meses en el aire.
SEGUÍ LEYENDO