Es posible que Érica Rivas tenga el privilegio de participar como actriz por segunda vez de la noche de los Premios Óscar. La primera fue en 2015 con Relatos Salvajes, que terminó siendo nominada (la estatuilla finalmente fue para la polaca Ida): allí se lucía en la última historia narrada por Damián Szifrón, como la novia traicionada -y reivindicada- en su propia noche de bodas.
En tanto, el próximo 15 de marzo de 2021 se sabrá si Los Sonámbulos -el filme de Paula Hernández que cuenta con Rivas como absoluta protagonista- formará parte de la gran noche a realizarse el 25 de abril. Pero ya desde ahora comenzarán las especulaciones porque este martes -en el marco de los Premios Sur- la Academia Argentina de las Artes y Ciencia Cinematográficas eligió a Los Sonámbulos para representar al cine nacional en el festival más célebre de la industria cinematográfica.
Con duración de 107 minutos y calificada como apta para mayores de 16 años, Los Sonámbulos -que también cuenta con las actuaciones de Marilú Marini, Ornella D’Elía, Daniel Hendler y Luis Ziembrowski- llegó a las salas argentinas en septiembre de 2019. La directora Paula Hernández interpela al espectador con una pregunta: ¿uno puede estar dormido encontrándose despierto? Más allá de la patología en sí misma, en la trama se desarrolla una historia de vínculos, de familia y de maternidad, y sobre todo, de lo que sufren y deben enfrentar las mujeres.
“Para mí es una metáfora muy interesante la del sonámbulo porque también es un lugar en el que el cuerpo actúa cosas que no pudo sacar a la luz en la vigilia -explicó Érica Rivas por aquellos días de avant premiere, en diálogo con Teleshow-. No solamente la cabeza crea sueños, sino que el cuerpo necesita accionar en el sonambulismo”.
En Los Sonámbulos, todo se desencadena en una reunión de Año Nuevo en la que una Luisa de 40 y tantos años (interpretada por Érica Rivas) decide replantearse, en plena crisis existencial, no solo su matrimonio sino también la relación con su hija adolescente, que es sonámbula, y hasta su oficio. Los buenos modos y la cordialidad familiar funcionan como una fachada de conflictos esenciales que se mantienen al margen, negándose a ser revelados.
El vínculo con su esposo se deshilacha de a poco cuando una vez más llega la invitación a recibir el nuevo año en la vieja casona en las afueras de esa familia matriarcal, comandaba por la suegra de Luisa (Marilú Marini). El verano, el alcohol, las tradiciones, pero también las miradas sobre el despertar de los cuerpos. Ante semejante agobio llegará el despertar de quienes durante tanto tiempo estuvieron acatando los deseos y los mandatos ajenos.
Este drama de Paula Hernández buscará un lugar de privilegio: convertirse en la octava película argentina en estar nominada a los Óscar. La Tregua fue la primera, en 1974. Hubo que esperar diez años para la siguiente, pero la recuperación de la democracia trajo una época de bonanza: Camila fue nominada en 1984 y La historia oficial se alzó con la estatuilla en 1985 (la primera para nuestro país).
Recién en 1998 llegó la quinta nominada: Tango, no me dejes nunca. El hijo de la novia lo consiguió en 2001, y El secreto de sus ojos (también con Ricardo Darín y dirigida por Juan José Campanella, como la anterior El hijo de...) repitió la proeza del filme de la gran Norma Aleandro (quien también había competido como mejor actriz de reparto): en 2009 se quedó con el gran premio. Y en 2014, lo dicho: Relatos Salvajes fue a los Óscar.
Al fin, el 15 de marzo se sabrá si Los Sonámbulos quedará en una preselección de nueve películas. Y el 15 se dará a conocer el quinteto que en la gala reprogramada para el 25 de abril (la ceremonia prevista para el 28 de febrero fue pospuesta por la pandemia) buscará la estatuilla. Hasta entonces, todo serán especulaciones. Y esperanza para que la Argentina vuelva a tener una película nominada.
Aquí, la lista completa de los ganadores de los Premios Sur:
Mejor actor de reparto: Sebastián Arzeno por, Las Buenas Intenciones
Mejor guión original: Ana García Blaya por Las Buenas Intenciones
Mejor guión adaptado: Arauco Hernández, Martín Mauregui y Federico Veiroj por Así habló el cambista basada en la novela Así habló el cambista de Juan E. Gruber.
Mejor dirección de arte: Laura Caligiuri por Muere, Monstruo, Muere
Mejor vestuario: Mónica Toschi por Los Sonámbulos
Mejor maquillaje y caracterización: Ángela Garacija por Los Sonámbulos
Revelación femenina: Amanda Minujín por Las Buenas Intenciones
Mejor fotografía: Julián Apezteguía y Manuel Rebella por Muere, Monstruo, Muere
Mejor película documental: Flora no es un canto a la vida dirigida por Iair Said
Mejor actriz de reparto: Verónica Llinás por La Odisea de los Giles
Mejor sonido: José Luis Diaz (†) por El Cuento de las Comadrejas
Mejor montaje: Andrés Estrada por Muere, Monstruo, Muere
Revelación masculina: Sebastián Arzeno por Las Buenas Intenciones
Mejor música original: Pedro Onetto por Los Sonámbulos
Mejor ópera prima: Las Buenas Intenciones dirigida por Ana García Blaya
Mejor actriz protagónica: Graciela Borges por El Cuento de las Comadrejas
Mejor actor protagónico: Gustavo Garzón por Sueño de Florianópolis
Mejor dirección: Paula Hernández por Los Sonámbulos
Mejor película de ficción: Los Sonámbulos dirigida por Paula Hernández
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