Como ya es costumbre en los programas de televisión en estas circunstancias, la producción del Cantando 2020 tuvo que moverse rápido para buscar reemplazos ante un caso positivo de coronavirus. Natalia Cociuffo, coach de Ángela Leiva y Brian Lanzelotta, se contagió y, por lo tanto, los cantantes, que mantuvieron contacto estrecho con ella, deben permanecer aislados, a pesar de que se encuentran en perfecto estado de salud y sus respectivos hisopados dieron negativo. En su lugar ingresaron dos colegas suyos: Rocío Quiroz y Rodrigo Tapari.
Ellos ya habían estado hace poco en la pista más famosa del país, como invitados en el ritmo en trío. Anoche, en la emisión del viernes, compartieron el ritmo “homenajes” y no fueron ellos los que eligieron la artista a quien le rindieron tributo, sino que siguieron la elección que ya habían hecho Leiva y Lanzelotta. Se trató nada más y nada menos que de Gilda.
Después de comentar que estaban muy “nerviosos y ansiosos”, sensaciones lógicas previo a su debut en uno de los programas más populares de la televisión, Tapari pidió “piedad” al jurado porque solo habían tenido un día para ensayar. Cabe aclarar que el miércoles pasado se confirmó el positivo de COVID-19 de la coach, por lo tanto tuvieron muy poco tiempo para prepararse. Moria Casán les avisó que iban a ser tan exigentes como con el resto de los participantes.
Lo cierto es que el pedido de Tapari estuvo de más porque su performance, junto a la de su compañera, fue todo un éxito. Acompañados por un equipo de bailarines, interpretaron varios temas de la reconocida cantante de cumbia.
Cuando terminaron su performance, Rocío Quiroz no pudo contenter las lágrimas al emocionarse por lo que había vivido en la pista más famosa del país. Su compañero tomó la palabra y dijo: “Le vamos a agradecer a los admiradores, esto es muy fuerte. Solo tuvimos un día de ensayo y le dimos con todo. Y estábamos muy nerviosos, sabemos lo que significa Gilda para todos. Y representarla fue una idea de Ángela y Brian, esos grandes cantantes que nos aceptaron para que podamos estar acá”.
Luego llegó el momento de la devolución del jurado. Nacha Guevara consideró que “crearon un momento muy hermoso”. “Muy bien armado, muy bien construido. Todo este trabajo de hormiga sirve para construir una emoción, y es lo más difícil de conseguir. Rocío, sos muy expresiva, te veo un futuro enorme. Gracias por crear un momento verdadero”, dijo y los puntuó con un 9.
Karina La Princesita, que en este ritmo tiene el voto secreto, le sugirió a Rocío que “le pierda el miedo a las notas altas”, y felicitó a ambos por su labor en la pista. Oscar Mediavilla, por su parte, sostuvo que en el estudio se vivió “un gran momento”. “Después de escuchar gente que desafina mucho, uno empieza a escuchar todo desafinado. A mí me da mucho gusto encontrarme con ustedes en esta pista, a la que tanta falta le hace la gente que canta bien”, aseguró y los calificó con un 9.
Por último, Moria Casán valoró que el homenaje no haya sido un “golpe bajo” y agregó: “El final me encantó porque eran los latidos de un corazón. No había nada forzado, y los dos son excelentes. Me encantó, vi un gran clima de emoción, pero no de cursilería”, remarcó y les puso la nota más alta, un 10.
Antes de despedirlos, Ángel De Brito -conductor del certamen junto a Laurita Fernández- consideró: “Sería una linda pareja para que se quedara”.
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