Hace casi cinco años a Martín Carrizo, el hermano de la conductora infantil Caramelito, fue diagnosticado con Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). Inmediatamente comenzó a darle batalla a la enfermedad pero un día dijo basta. Se cansó y bajó los brazos. “Tiré la toalla y me entregué”, contó en su momento. Allí fue importante la fuerza que le imprimieron sus amigos. A fines del año pasado el destino le abrió la puerta a una chance que no dejó pasar. A través de las redes sociales, un argentino con la misma enfermedad le dijo que en los Estados Unidos, donde vive, existe un tratamiento que le permitiría llevar una vida normal.
Quien lo contactó, además, le mandó unas muestras de los medicamentos que él tomaba. Vio los resultados casi de inmediato apenas empezó a inyectarse. Por esos días, su hermana Cecilia fue quien ofició de enfermera. Sin embargo, para continuarlo, quien supo ser baterista de A.N.I.M.A.L., la banda de Gustavo Cerati y Los Redonditos de Ricota, debía viajar hacia allá. Inmediatamente comenzaron una campaña para llegar a seis millones de pesos, la suma que se necesitaba en ese entonces para los pasajes, hospedaje y el tratamiento.
El 5 de diciembre viajaron con la ilusión en las valijas. Se puso rápidamente a disposición. Desde allá, a través de sus redes sociales, fue contando los avances y las mejoras que fue sintiendo. Es un proceso largo que requiere de paciencia pero, sobre todo, de solvencia económica. Su familiares y amigos lo dieron todos. Pera falta un pasito más. Hoy está en otra etapa mucho más avanzada. La demanda de dinero sigue creciendo y la manera de obtenerlo es escasa. A tal punto, que en un momento tuvo que dejarlo. Abandonar significaba tirar por tierra lo conseguido. De esta manera, contaron que las cuentas bancarias siguen abiertas para que la gente pueda seguir donando a través de transferencias.
Ahora sacó a la venta una serie de remeras para que el público pueda comprarlas y, con ese dinero, seguir con el procedimiento. Hace cinco meses nació este proyecto impulsado por ML textil y su hijo, Benjamín. "Esto nació de la necesidad de continuar con mi tratamiento. Las remeras reflejan momentos míos en la música. ANIMAL, Gustavo Cerati y el Indio Solari. La familia de Gustavo, Andrés Giménez, Marcelo Corvalán y el Indio Solari me cedieron los derechos de imagen. "La campaña se llama ‘Volverá Martín’. Hace cinco meses tuvimos que frenar el tratamiento porque me quedé sin dinero. Por eso otra vez el pedido de ayuda, pero esta vez le propongo este maravilloso intercambio”, contó sobre las remeras que se pueden comprar a través de volveramartin.piurapiuma.com.ar.
A diez meses de haber comenzado el tratamiento, Carrizo compartió un Zoom con varios amigos, como Andrés Jiménez, Facundo Arana y Diego Cagna, entre otros, en Basta de todo (Radio Metro), el programa de Matías Martin. Carrizo se comunicó a través de mensajes de WhatsApp y relató cómo es un día de él allá: “Esto que tengo yo es muy violento. El músculo va desapareciendo. El tratamiento consiste en unas aplicaciones que hace que el músculo empiece a reconstituirse. Se van las fasciculaciones, el músculo conecta y empieza a crecer. Un día mío es muy largo, con muchos viajes y muchas inyecciones… Me dan 400 inyecciones, estoy hecho un colador”, manifestó aportando una cuota de humor.
En otro fragmento, habló Noelia, la enfermera que está con él constantemente y sigue su proceso en el sanatorio en el que lleva adelante la recuperación. A esta altura, más que una profesional, una amiga: “Para mí es un placer poder estar y ayudarlo. Directamente no lo tomo como un trabajo, ya se hizo una costumbre por vivir con él todos los días. Lo que hago, lo hago con todo el amor del mundo”.
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