Julieta Prandi supo entrar más relajada al juego mediático en las últimas semanas y allí comenzaron los rumores sobre un nuevo presente sentimental que terminaron de dilucidarse cuando le dijo a Estelita, el personaje de Jey Mammón en su programa de América, que estaba saliendo con un cantante. Tras revisar sus redes, el periodista de Intrusos Guido Záffora encontró las similitudes y coincidencias que lo llevaron a la conclusión sobre quién era el hombre en cuestión: Emanuel Ortega.
Prandi -quien debutó este sábado con el ciclo Confesiones- apuesta de nuevo a una relación estable, pero de alto perfil que trae consigo efectos colaterales al meterse en la familia política de un clan muy fuerte en el mundo del espectáculo: los Ortega. Emanuel, el menor de los varones hijos de Palito y Evangelina, bajó su exposición pública en los últimos años al irse a vivir a Miami con su (ex) pareja, la modelo Ana Paula Dutil de quien se separó después de varias crisis.
El 2 de agosto de 2018 se había blanqueado la separación del cantante y la modelo, lo que generó una decepción para sus padres Palito Ortega y Evangelina Salazar quienes siempre sufren cuando alguno de sus hijos termina una relación: se encariñan con sus parejas y apuestan siempre a pasar los temporales sentimentales de cualquier matrimonio en pos de la estabilidad familiar, como la que ellos consiguieron durante más de medio siglo.
Por eso en el entorno de los Ortega la confirmación de una relación entre su benjamín y la conductora, blanqueada esta semana, no cayó de la mejor manera; no solo porque apuestan a una eventual reconciliación entre Emanuel y Ana Paula, sino por cierto “oportunismo” -según el entorno familiar- en las declaraciones de Julieta Prandi en los días en los que se encontraba realizando notas promocionales para su nuevo ciclo televisivo.
La relación entre Ortega y Prandi se fue cimentando lentamente con esporádicos encuentros y mucha interacción en las redes sociales. De a poco ambos avanzaron en lo que incipientemente se acerca a un noviazgo aunque aún carece de rótulos formales. Julieta deja ver, todavía, una cierta mirada de tristeza después de haber pasado la traumática separación del padre de sus hijos; de denunciarlo públicamente por violencia y haber sufrido todo tipo de embates en el ámbito privado que erosionaron su templanza y su seguridad personal.
Víctima de humillaciones y actitudes de maltrato, finalmente pudo contar su verdad, salir del círculo íntimo que la oprimía y empezar a reconstruirse como mujer, afrontando además las consecuencias materiales por la pérdida de su vivienda en Escobar -la que compró con los ahorros de toda su carrera- y que, al recuperar por orden judicial, encontró en estado catastrófico para tener que empezar de nuevo.
Ese volver a empezar incluyó también reinsertarse en el medio artístico del que se había ido alejando mientras sufría la traumática relación de pareja con su ex. De a poco comenzó a volver, conduce en La 100 la tarde junto a Mariano Peluffo y ahora suma su programa en la noche del sábado, un ciclo de entrevistas y canciones con músicos que hizo antes de la pandemia y del que pronto grabará una nueva temporada.
En tanto, los encuentros -cuarentena mediante- con Emanuel Ortega la llevaron a pasar jornadas en su chacra, y las fotos de sus redes sociales permitieron ir descubriendo “pistas” de la relación con el cantante, regresado de Miami, donde pudo verse el mismo fondo en algunas fotos y así -en el intercambio de likes entre ambos en sus publicaciones de Instagram- llegar a descubrir públicamente un romance que ella terminó asumiendo en las últimas horas mientras él guarda silencio.
El silencio de Ortega estaría ligado,por un lado, a su habitual bajo perfil de los últimos tiempos, alejado de su etapa de celebrity musical de sus comienzos. Aislado de todo, vivió años en Miami junto a Dutil y sus hijos, pero finalmente regresó al país y comenzó una historia de amor con Prandi.
El otro motivo del silencio del cantante tiene que ver con dos factores: la incomodidad familiar por el blanqueamiento de la nueva relación que no cayó del todo bien en la familia Ortega -siempre muy presente en la vida personal de sus hijos, aunque discretamente-; y por otra parte, porque en estas horas su ex esposa, Ana Paula Dutil, encara la mudanza de la familia completa a Buenos Aires, dejando años de una construcción familiar en los Estados Unidos muy propia de esta familia que ha hecho bases allí desde los años en que todos vivieron en Norteamérica, hasta cierta intención, según fuentes de su entorno, de tratar de recomponer la relación con Emanuel.
Quizás más ligado a una expresión de deseos que guardan secretamente Palito y Evangelina y menos real en la práctica, el hecho de que el cantante asuma públicamente un nuevo noviazgo a dos años de separarse de la madre de sus hijos, echa por tierra esas intenciones de recomponer la relación con su ex.
Lo cierto es que Dutil vuelve a Buenos Aires con el resto de la familia, se reinstala aquí para que todos estén nuevamente cerca, y sabrá o no si guarda verdaderas intenciones de recomponer su matrimonio, o si eso está más ligado a los intentos familiares de una parte más tradicional que desea verlos juntos como antes.
Sea lo que sea, que Emanuel ahora haya empezado a salir con Julieta Prandi no es lo que más lo acerca a intentar volver atrás en su vida sentimental, y que haya sido ella la que lo “forzó” públicamente al dejar servidas las pistas para que se sepa, no cayó bien en un entorno mucho más cerrado de lo que la conductora cree.
SEGUÍ LEYENDO