Nati Jota no pasó su mejor fin de semana. Cuando se preparaba para disfrutar y hacer todo aquello que no pude hacer durante la semana por cuestiones laborales, los planetas se alinearon para conspirar en su contra. Las pálidas estuvieron a la orden del día, a tal punto, que al mediodía del domingo pidió, en forma de suplicio e ironía, que sea lunes de manera urgente. Lejos de divertirse, se vio en vuelta, primero en un escándalo que hizo que se convierta en tendencia en Twitter y luego en un robo que le causó mucha tristeza e indignación.
Si nos paramos en el mundo virtual, todo comenzó con un mensaje que compartió una usuaria en la red social del pajarito. Con ánimos de ofender y creyendo que la otra persona no se iba a entera, publicó: “Está Nati Jota al lado mío en el bar y es más pelotuda de lo que creí”. Enseguida, los fanáticos de la mediática le pasaron el dato. Como todo aconteció en el lugar en el que mejor se mueve, no tardó el devolver el recado: “Qué picante sos por Twitter Abru, me tenías al lado”.
Sin embargo, cuando parecía que todo iba a quedar en tan solo esa ida y vuelta, surgió un nuevo conflicto. Quienes estuvieron atentos al intercambio no dejaron pasar que las dos que estaban discutiendo lo hacían desde cada una desde una mesa de un bar. Si bien la apertura de bares y restaurantes, siguiendo los protocolos necesarios, están habilitadas, la recomendación es que no se concurra masivamente. Las imágenes de los últimos días dejan en claro que en gran parte de los barrios porteños no se respetó la distancia social y que las veredas de los recintos estuvieron abarrotadas de personas.
“Las dos hablan desde la mesa de un bar, ¿Y la cuarentena dónde quedó?”, “Qué irresponsables las dos”, “Excelente respuesta de Nati. Si te molestaba, ¿Por qué no se lo dijiste en la cara?”, “Le dice pelotuda, pero pelotudas son las dos por estar en un bar y no respetar la distancia social”, fueron algunos de los comentarios más cautelosos.
Lejos de este conflicto, Nati tuvo que sufrir un robo que la dejó marcada. El sábado le sustrajeron su mochila con varias partencias de valor. Por un lado, la billetera, con dinero, documentación como tarjetas, registros y demás. Por otro, toda su colección completa de maquillajes. Por su profesión, es una herramienta de trabajo. Sobre todo en los tiempos que corren, en los que en los canales de televisión no maquillan a los invitados, sino que se les pide que cada uno lo haga en su casa para evitar el contacto. “Es algo de lo que no te armás de un día para el otro, es caro y son cosas de las que me fui armando de a poquito, con esfuerzo”.
La joven expuso el tema dentro de su grupo de seguidores y, al menos, logró ciertos resultados. Un joven le escribió para comentarle que había encontrado su registro de conducir y sus tarjetas de créditos. Dentro de las pálidas, el dato le significó un trámite menos para hacer.
Para finalizar, el domingo lo terminó haciendo catarsis en Instagram. Hizo una especie de consultorio de parejas y allí fue relatando experiencias propias y también trató de aconsejar a quienes se lo pedían. Por un lado, a partir de lo que pasó con su ex, Bruno Siri, contó que desde ahora no va a exponer tanto sus relaciones sentimentales. “Voy a tratar de exponer menos porque después duele el eco que se genera. Ya cortar duele; imagínense tener que ver mil cosas y que te lleguen cosas por todos lados.
Por otro lado, habló de la gente tóxica. “Vieron que hay gente que se vive quejando de la gente tóxica pero que de alguna u otra manera siempre anda con gente tóxica…¿No será que quién genera lo tóxico sos vos?
SEGUÍ LEYENDO