A falta de fútbol por la pandemia, la emisión del lunes pasado de Bienvenidos a Bordo, el programa que conduce Guido Kaczka por El Trece, se vivió como una final del mundo. Por lo menos se puede llegar a esa conclusión a raíz de los comentarios en las redes sociales, donde los usuarios gritaron como un gol el logro de Rubén Luis Martínez, el chofer que por primera vez pudo llevarse el taxi que entrega el ciclo.
La participación de Rubén se extendió a lo largo de un buen rato, y desde el comienzo ya estuvo marcada por la emoción. Todo comenzó cuando Guido, tan hábil para inventar juegos sobre la marcha y entretener a sus espectadores, desafió al taxista y a los famosos invitados -Hernán Drago, Rocío Robles, Federico Cyrulnik y Marcela Baños- a que adivinaran cuál era la gran noticia que tenía para contar su productor estrella, Pablo Giménez.
El participante se la jugó y dijo que Giménez estaba esperando su primer hijo. ¡Y acertó! “Voy a ser papá”, dijo el productor, visiblemente emocionado. “¡Qué grande, Pablo, te felicito!”, celebró la noticia el taxista.
Volviendo al tema del taxi, Rubén le contó a Guido que es padre de siete chicos: cinco de su primer matrimonio, y dos de su actual relación. Y que llevarse el auto sería muy importante para su vida. Finalmente, después de agregarle un poco de suspenso, el conductor le dijo que procediera a girar la ruleta gigante. Después de dar unas vueltas que parecieron interminables, frenó en el cero. ¡El número ganador!
“¡Sí! ¡Sí! ¡Sí! ¡Sí!” Guido no podía parar de gritar. “¡Sí, Rubén! ¡Sí, Rubén! ¡Pensé que se pasaba! ¡Rubén, querido!”, continuó el conductor durante un buen rato, con esa voz suya tan característica, completamente incrédulo. El taxista en un principio no reaccionó: pasaron unos segundos hasta que “cayó”, como suele decirse. Luego, sí, empezaron a caer las primeras lágrimas.
“Creeme, Guido, nunca gané nada”, fue lo primero que atinó a decir el ya histórico participante del programa. “Ya no vas a poder decir eso, nunca más. Mirá cómo ganaste. Me matás, Rubén, no sé ni qué decirte… Yo estoy tratando de remarla pero te veo…”
“Gracias, no puedo hablar”, lo interrumpió, conmovido, Rubén. “¡Pero olvidate! Vos te anotaste, viniste, jugaste. ¡Te lo ganaste!”, señaló Guido.
“¿Sabés cuánta gente me decía ‘andá, andá’- le dijo Rubén-. Mis amigos de todos lados me preguntaban ‘¿por qué no vas?’ ‘Me da vergüenza’, les decía. Pero, bueno, vine y estuve tranquilo. Cero nervios. Mi señora me mandaba mensaje, me decía ‘fijate si algún productor ahí de la tele hace un casting para las nenas’. Nunca gané nada. Ni una rifa en el colegio…”
En el estudio reinaba la emoción. Y en Twitter todos festejaron con Rubén, como si hubiese hecho el gol del campeonato. “El taxista que ganó el auto en lo de Guido es lo mejor que me pasó desde marzo”, “Rubén acaba de ganar el taxi en el programa de Guido, histórico”, “un taxista acaba de ganarse el taxi en el programa de Guido Kaczka, está llorando y nosotros aplaudimos”, “se ganó mi corazón”, fueron tan solo algunos de los comentarios al respecto. “Guido” y “Rubén” fueron trending topic en la red social.
En este gol no hubo abrazos en la tribuna pero sí una unión como hace mucho no ocurría.
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